Universitarias Stephanie Chaves:

Educación sexual en colores y el arte de lo irreverente

La ilustradora erótica conversó con UNIVERSIDAD sobre su arte, su marca y su proyecto de educación sexual.

Stephanie Chaves no es una ilustradora cualquiera. Es la ilustradora de lo irreverente, lo gráfico y lo que algunos podrían considerar “grotesco” o “incorrecto”.

Graduada de la Universidad de Costa Rica (UCR) en diseño gráfico, la artista de 27 años es reconocida principalmente por sus dibujos eróticos y su proyecto de educación sexual, que ejerce mediante su marca y página de Facebook Stephanie Chaves Ilustración, la cual cuenta con más de 26.000 seguidores.

Declarada feminista, por creer firmemente que cada ser humano merece los mismos derechos y deberes, Stephanie usa su talento para crear ilustraciones que ayuden a informar sobre diversos temas, desde salud sexual y reproductiva, hasta la problemática del acoso callejero y el machismo.

El trabajo de Chaves ha sido expuesto en varios países entre los que figuran Perú, El Salvador, España, Argentina, México, Italia y Chile. Recientemente su trabajo fue agregado también a la colección privada de la Escuela de Bellas Artes de la UCR.

La ilustradora conversó con UNIVERSIDAD sobre su trabajo y su proyecto de educación sexual, que tiene tres objetivos claros: divulgar información científica y objetiva, empoderar a las personas con respecto a su sexualidad y su cuerpo y mitigar el traspaso de comportamientos sexistas, homofóbicos y dañinos para la sociedad.

 ¿Qué la llevó a ilustrar sexualidad?

-Los dos detonantes fuertes que hicieron que yo ilustrara sexualidad fueron la crianza que tuve con mis papás, que son súper conservadores y cerrados, así como la religión.

 ¿En qué momento empieza a ilustrar erotismo y sexualidad?

-Cuando entré en la UCR. Apenas entré a Artes, comencé a tener como estos tintes de erotismo y a ilustrarlo, porque me parecía que era algo de lo que no se hablaba, pero todos hablábamos a la vez en expresiones como “qué picha, qué pichudo, etc.”; pero nadie hablaba de penes y vaginas y sexualidad realmente como en preguntas, o espacios de reflexión o de dudas, ni divulgaba información, y eso me parecía demasiado raro. A partir de ahí fue que comencé a ilustrar más y, conforme fueron pasando los años, fue haciéndose más mi tema central.

¿Cómo fue la recepción de este tipo de arte al principio?

-Bueno, al inicio alguna gente me decía que yo fijo sabía que si hablaba de sexualidad en Costa Rica iba a ser un boom y que todo lo calculé fríamente y no fue así. Nada más vi que había educación sexual casi nula y mucha doble moral del costarricense. Al principio la gente no le daba tanta importancia y tiempo, después comenzó a hacerse súper viral y llegó, incluso, a otros países. La gente todavía le tiene demasiado miedo (al tema), pero creo que es como un 50/50. La reacción inicial sí es siempre como chocante y eso es lo que quería al inicio hacer también. Pero por otro lado, había todo este montón de gente que estaba esperando que algo así pasara, que alguien hablara como yo.

¿Cómo surge su estilo de diseño? ¿Tuvo inspiraciones de alguna parte?

-El estilo visual fue todo un proceso de experimentación desde que entré a la U, hasta que maduré mi estilo y vi que ya eso era. Por supuesto, uno tiene inspiraciones de otros lugares, a veces hasta de manera inconsciente. Por ejemplo yo amaba Dexter, Las chicas superpoderosas, Coraje el Perro Cobarde; y, si usted ve, se parecen un montón a mis ilustraciones como en el modo de colorear: línea relativamente gruesa negra en el contorno y colores planos y llamativos en el centro. En cuanto a la paleta cromática, creo que uno comienza a crear lo que le gustaría consumir. A mí me gustan los colores llamativos y por eso los uso.

¿En qué momento nace Stephanie Chaves la marca?

-Al inicio fue muy confuso porque no sabía si era artista o empresa, todavía me lo pregunto. Esta pregunta que me hace es demasiado confrontadora (ríe). Creo que comencé a hacer marca cuando vi que uno necesita darle a la gente todo demasiado terminado y explicado, para que puedan entender lo que uno hace, por qué lo hace y hacia dónde va. También, cuando vi que había un vacío en Costa Rica para consumo sexual erótico. Creo que entonces creé la marca para ordenarme yo y a la gente, y a la vez vi que la gente sí estaba ansiosa por consumir cosas eróticas.

¿Cómo ha logrado llevar la controversia que genera su trabajo? Por ejemplo, con las ilustraciones que ha hecho sobre el tema del aborto.

-Algo que es importante, no solamente para mí sino para otras personas que incurren en estas temáticas, es siempre asesorarse a nivel legal. Porque hay demasiadas maneras de hacer las cosas mal en redes, y uno no cree que hay tantas cosas que son ilegales. Por ejemplo, no es ilegal dar información, pero sí es ilegal ser la persona que incita a hacer ciertas cosas. Uno tiene que cuidar mucho lo que dice.

La gente se enoja muchísimo, a nivel absurdo. No me gusta entrar en este juego de “yo estoy bien y usted mal”; entonces creo que la única manera de decidir cuándo algo es válido y cuándo no es basándose en los derechos humanos.

¿Por qué le parece importante tratar todos estos temas controversiales en su página?

-Yo creo que porque no hay información de este tipo que se encuentre realmente accesible y visualmente agradable para uno consumirla. Hay un montón de gente que no lee y que necesita que haya ilustraciones para consumir algo. Creo que es importante darle esta información a la gente de manera más rápida, más accesible y más visualmente agradable, para que se informe.

¿Cuáles son los temas más importantes que quiere tratar mediante su proyecto?

-Definitivamente derechos humanos, con énfasis más en derechos sexuales y reproductivos, violencia hacia la mujer, los derechos de la comunidad LGTBQI y comenzar a retomar más el proyecto de sexualidad ilustrada. Me gustaría hablar por ejemplo sobre métodos anticonceptivos, infecciones de transmisión sexual; más educación sexual.

¿Cuál cree que es el impacto que tiene su proyecto?

-El impacto ha sido bastante positivo, muchísimas personas se han dado cuenta de mi trabajo y más allá de que mi trabajo se haya hecho viral, es que la información se haga viral. Realmente a nivel nacional el impacto ha sido muy bueno, he tenido oportunidad de dar charlas en universidades y muchas personas se están abriendo a la educación sexual, que tanto estamos buscando, y a los espacios de conocimiento y de aclaración de dudas. Siempre se abre pie a la discusión, reflexión y autocrítica. Más feliz y satisfecha con el proyecto no puedo estar.

¿Siente que su impacto ha sido positivo en las personas?

-Las herramientas de medición que tengo por el momento son como redes sociales y los encuentros esporádicos que tengo con la gente. Hay mujeres que me han agradecido por la información que doy, por mi trabajo y por empoderarlas con ciertos temas, igual los hombres. Siento que los tres objetivos de mi proyecto se han cumplido, las personas que me siguen se sienten más seguras con su cuerpo y sus derechos.


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Chaves cuenta con un álbum ilustrado educativo sobre mitos, realidades y peligros del aborto y se encuentra trabajando en dos más sobre infecciones de transmisión sexual y métodos anticonceptivos.

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La ilustradora también tiene toda una línea de productos con sus ilustraciones como bolsos, libros de colorear, camisas, sandalias, almohadones, monederos, stickers y más.

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