Universitarias Sugieren establecer cupos para poblaciones marginadas

Cuotas de ingreso democratizarían la universidad pública Latinoamericana

Informe de la Red UNI evidenció que precarización laboral y bajo acceso a poblaciones excluidas son esenciales para democratizar la educación superior.

Los altos niveles de desigualdad en las universidades públicas de América Latina han puesto en jaque a las sociedades de la región. En los centros educativos no solo hay poblaciones enteras con bajísimas oportunidades de obtener carreras universitarias, sino que hay personal docente que se enfrenta a una fuerte precarización laboral que reduce la calidad educativa.

Así lo evidenció el informe de la Red Global de las Universidades para la Innovación (UNI), “Educación Superior en el Mundo”, encargado por la Unesco, y que en su capítulo latinoamericano integró a diversos expertos de universidades públicas, quienes analizaron la sinergia entre las Humanidades, las Artes, las Ciencias Sociales y la Tecnología, y como esto incide en la mejora de la formación superior.

Entre los diversos temas que se analizaron en el documento fue posible determinar que es urgente superar los modelos tradicionales, establecer una mayor vinculación entre las disciplinas para afrontar desafíos de las sociedades. Además de intervenir las comunidades con el impulso de proyectos de investigación, así como la rearticulación de procesos cognitivos donde estudiantes y docentes aprenden y aportan desde la investigación e innovación.

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Quienes se ubican en los niveles de menores ingresos tienen 70 veces menos oportunidades de ingresar a la universidad.

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Para esto, se debe empezar con la reducción de la desigualdad existente en las universidades estatales de la región latinoamericana, donde impera una fuerte exclusión de jóvenes que por sus condiciones socioeconómicas, étnicas o culturales enfrentan dificultades para ingresar a la formación terciaria, y peor aún, de aquellos que logran entrar, pero por diversos motivos deben abandonar.

De acuerdo con Célia Caregnatto de la Universidad Federal de Río Grande del Sur de Brasil y miembro del grupo de investigadores del informe, la educación superior es un derecho público y definitivamente se deben impulsar mecanismos para hacerla más inclusiva para todos los sectores, y así lograr que los jóvenes permanezcan y tengan un verdadero éxito académico.

“La democratización de la educación superior se logra con acciones para garantizar el acceso a personas de bajos recursos, excluidos por su raza, etnia o género. El compromiso con la superación de los obstáculos para estas poblaciones puede encontrar la respuesta en el establecimiento de cuotas o cupos”, analizó Caregnatto.

Está comprobado, indicó la experta, que la desigualdad persiste entre los quintiles poblaciones más pobres y los más ricos, quienes se ubican en los niveles de menores ingresos tienen 70 veces menos oportunidades de ingresar a la universidad, permanecer y graduarse de una carrera.

Por ejemplo, en países como Brasil la desigualdad para jóvenes de grupos de negros, indígenas, pobres o mujeres en condición de precariedad es sumamente marcada. Lo mismo ocurre en países como México y Ecuador, donde las poblaciones indígenas se enfrentan a grandes desafíos para estudiar.

De allí que diversas universidades han impulsado este tipo de programas que establecen cuotas mínimas de ingreso para estas poblaciones, así como iniciativas que hacen prácticamente gratuito el ingreso a la universidad.

Este es el caso de Argentina que ha logrado altos niveles de inclusión en las universidades públicas y ha alcanzado al 70% de la población, gracias a la gratuidad de sus cursos y matrículas; o en ciertas universidades de México que tienen costos bajísimos de matrícula.

Precarización laboral

La desigualdad en las universidades de Latinoamérica también está muy marcada en las condiciones laborales de los docentes, quienes experimentan niveles de precarización laboral, tanto en sobrecarga de labores como en interinazgos.

Para Carmen Caamaño, miembro del grupo de investigadores del informe e integrante del Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad de Costa Rica (IIS-UCR), estas situaciones afectan la calidad de la formación de las universidades y la calidad de vida de los profesores.

“Una gran parte de los interinos ven muy pocas posibilidades de convertirse en personal en propiedad y la producción de conocimiento se ve afectada mientras tengamos docentes con nombramientos de cuartos de tiempo en diversas sedes o universidades, o que para un período determinado no cuenten con nombramiento, de manera que no se pueden preparar bien, ni profundizar en la enseñanza”, detalló Caamaño.

Además, estas condiciones les limitan acceder a un seguro social, a verdaderas garantías a la hora de pensionarse, incluso a programar el crecimiento de su familia.

En Latinoamérica el personal de tiempo completo es muy poco. Por ejemplo, en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) la proporción es de 20% personal en propiedad y 80% interinos; en el sistema argentino solamente un 15% tiene estabilidad laboral, y las cifras son parecidas en el resto de la región.

“Es preocupante ver como desde las universidades se plantea la emancipación de las libertades y derechos humanos, mientras se sostienen sobre el trabajo precarizado. Es una contradicción muy grande porque no solo afecta sus condiciones laborales, sino también su posibilidad de participar en los espacios democráticos de las universidades y frente a una política generalizada de recortes presupuestarios”, argumentó la experta.


Casos exitosos

El informe “Educación Superior en el Mundo”, en su capítulo de Latinoamérica —desarrollado por expertos de reconocidas universidades de la región—, destaca una serie de casos exitosos en los que se han implementado programas enfocados en la sinergia que se deben impulsar entre la ciencia, la tecnología y las humanidades.

México: vínculos con otros sectores

El Centro de la Complejidad de las Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) tiene el objetivo de construir puentes entre las ciencias exactas, naturales, sociales y humanistas, mediante teorías, experimentos y simulaciones en computadoras.

Su finalidad es promover vínculos entre grupos académicos multidisciplinarios e instituciones de Gobierno, sectores productivos y sociales, para incubar proyectos que respondan a desafíos en salud, biología de los sistemas, inteligencia computacional y modelación matemática, retos ecológicos y ambientales, neurociencias y arte.

Brasil: democratización de la educación

Convencidos de que la educación superior es un derecho público y que es urgente lograr un mayor acceso, permanencia y éxito en la trayectoria de los estudiantes que ingresan en las universidades, en Brasil han impulsado un programa dirigido a establecer cuotas obligatorias del 50% de ingreso y permanencia para jóvenes que generalmente son más excluidos por su condición socioeconómica, por ser afrodescendientes, indígenas o mujeres en condiciones de precariedad.

Estas iniciativas han logrado una población multicolor en las universidades brasileñas y han abierto espacios para quienes antes no los tenían.


Retos de la educación superior

De acuerdo con los investigadores del informe “Educación Superior en el Mundo”, Axel Didriksson, Damián del Valle, Freddy Álvarez, Célia Caregnatto y Carmen Caamaño, los principales retos de las universidades públicas en América Latina son:

  • Afrontar los recortes en presupuestos universitarios.
  • Transformar los currículos universitarios para que sean más interdisciplinarios.
  • Resistir y salir en la defensa de la democracia y las universidades públicas, tan atacadas por los Gobiernos.
  • Buscar programas innovadores para enfrentar la desigualdad.
  • Establecer soluciones desde una visión que tome en cuenta el cambio climático y la sostenibilidad.
  • Mantener el vínculo con las comunidades, pues a nivel global se están experimentando recortes en esta área.
  • Cambiar la cultura de competencia por una cultura de colaboración.
  • Entender que desde la cultura y las disciplinas vinculadas con el arte se está generando conocimiento y conciencia.


 

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