Universitarias

Compra de equipo generó controversia entre Administración y Consejo Universitario

Órgano colegiado exigía mayor información sobre unas líneas del presupuesto extraordinario.

La solicitud de compra de un equipo para el posgrado de Ingeniería Eléctrica causó recientemente una controversia entre la Administración y el Consejo Universitario (CU), así como un retraso en la aprobación del presupuesto extraordinario #1.

Dicho presupuesto incluía la solicitud de insumos que requieren las unidades para su adecuado funcionamiento, tanto en docencia, investigación, acción social, programas de Vida Estudiantil, administración, dirección superior, desarrollo regional e inversiones como en su etapa previa, pues debe ser aprobado por el (CU) para su traslado a la Contraloría General de la República.

La dinámica normal para elaborar los presupuestos es que cada unidad formule sus necesidades y las justifique. De ahí se elabora el presupuesto general, que primero pasa a la Comisión Permanente de Asuntos Financieros y Presupuestarios del Consejo Universitario, la cual al revisarlo lo eleva al órgano colegiado para su aprobación en plenario.

En el caso específico de este presupuesto extraordinario, se presentó una situación con la solicitud de compra de un equipo para el posgrado de Ingeniería Eléctrica.

La información trascendió en varios artículos de opinión publicados en UNIVERSIDAD, en los que se evidenciaba una disputa que no quedaba muy clara, pues algunos atacaban al Consejo Universitario de extralimitarse en sus atribuciones, al improbar el presupuesto para la adquisición de estos equipos; mientras los miembros del CU indicaban que era un asunto de transparencia.

La Administración, a través del vicerrector de Investigación Fernando García y de otros miembros, publicó artículos en los que señaló que las decisiones de otorgamiento de equipos son una función de orden administrativo, que se gesta y concreta en el ámbito académico, por lo que les preocupa que el Consejo Universitario tome este tipo de decisiones.

Desde el CU consideran que cumplieron con su responsabilidad, pues tenían una serie de dudas, que aseguran no fueron evacuadas en su totalidad, ni prontamente, por lo que debieron sacar estos equipos de este presupuesto, para incorporarlos en el próximo.

El presupuesto mencionado incluía una serie de equipos que se utilizarían en un proyecto interdisciplinario que abandera el posgrado de Ingeniería Eléctrica, el cual incluye dispositivos para imagenología preclínica óptica avanzada, un escáner de láminas en campo claro y FISH, un equipo de microscopía digital automatizada, un microscopio invertido y un sistema de anestesia para plataforma de imagenología.

Administración defiende compra

El vicerrector de Investigación Fernando García fue enfático en que la duda que se tenía sobre el equipo para el posgrado de Ingeniería Eléctrica debió ser evacuada en la Comisión Permanente de Asuntos Financieros y Presupuestarios del Consejo Universitario.

La principal duda a la hora de discutir este presupuesto, contó García, estuvo relacionada con el lugar en el cual se instalaría uno de los equipos, pues se llevaría a un laboratorio de Microbiología.

Para el vicerrector resultan alarmantes los cuestionamientos de algunos de los miembros del CU sobre por qué Ingeniería Eléctrica solicitó, dentro de este presupuesto, equipos que deberían ser operados por personal médico.

“Uno de los miembros del Consejo sacó su objeción, a pesar de haber sido visto el presupuesto en la Comisión, basado en un documento de la oficina de suministros, en el que se indica que uno de los equipos se debe trasladar y poner en coordinación con un profesor de la Facultad de Microbiología, por ese detalle objetan el presupuesto y sacaron la partida para aprobarlo”, explicó García.

El vicerrector consideró que estos cuestionamientos, justificados por un respeto a la departamentalización, lesionan las iniciativas interdisciplinarias que se realizan en la Universidad, que son parte de las tendencias en la investigación científica y la formación universitaria.

Afirmó sentirse muy molesto y defraudado, como investigador y profesor catedrático de la UCR y también como miembro de la Asamblea Plebiscitaria, con algunos miembros del Consejo Universitario, que no hicieron “un sano ejercicio de responsabilidad”, como afirman.

“Solo bastaba una llamada de teléfono, que no hicieron, para resolver una trivialidad administrativa, como es la ubicación de un pequeño equipo de laboratorio. Por el contrario, prefirieron improbar el presupuesto para la compra de ese equipo, causando una afectación muy grave a grupos de investigación y estudiantes de posgrado de nuestra institución”, indicó García.

Para el jerarca, esto no es fiscalización de la gestión universitaria, sino una intromisión en procesos académicos de investigación de alto nivel, multi- y transdisciplinaria.

CU se defiende

Consultada la directora del Consejo Universitario, Teresita Cordero explicó que inicialmente el presupuesto no presentaba muchos detalles de los rubros que se establecían, sobre todo de aquellos que se ubican en el concepto de dirección superior; entre los que se ubican los equipos del posgrado de Ingeniería Eléctrica.

Cordero comentó que en una primera sesión, cuando se vio el presupuesto se solicitó aclarar a qué correspondían esos montos de la dirección superior. Cuando se aclaró que era para equipo científico y tecnológico y se establecieron con claridad los datos de los montos y equipos fue posible observar la solicitud que hacían desde el posgrado.

“Ahí vimos que se solicitaban equipos que parecían ser para el área médica, de ahí la primera preocupación. Cuando se nos aclaró el tema, se solicitó la información de dónde se ubicarían dichos equipos y en una carta indicaron que sería en la Escuela de Ingeniería Eléctrica, pero nos enteramos por la publicación de un concurso que uno de ellos iría a un laboratorio de Microbiología”, detalló Cordero.

Fue entonces cuando algunos miembros del Consejo sintieron una alerta, dijo la directora del CU, pues no solo había una polémica en la ubicación de los equipos, sino que el concurso para la compra de este equipo (fondos transitorios) se realizó antes de ser aprobado el presupuesto por el órgano colegiado, a pesar de que hay una normativa que establece que debe cumplirse este requisito.

“Al observar las incongruencias, para mayor sanidad y no perjudicar a los demás proyectos, sacamos estos rubros y aprobamos los otros del presupuesto, de manera que no nos pueden achacar a nosotros el atraso en tiempos, porque debieron esperar la aprobación del presupuesto por parte del CU para abrir el concurso”, indicó Teresita Cordero.

La directora del Consejo indicó que como órgano se quiere que exista la investigación en la Universidad, pero que es necesario respetar los procedimientos en todos los proyectos pues es una forma de cuidar la sana administración.

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