País Alrededores del sitio donde se realizan labores de ampliación del acueducto

Vecinos de Sardinal denuncian masiva presencia de antimotines

Una serie de enfrentamientos se dieron entre la policía y los vecinos de la zona el día de ayer. Oficiales lanzaron gases lacrimógenos.

La comunidad de Sardinal amaneció rodeada de policías antimotines, quienes acudieron a la zona luego de que varios manifestantes se opusieran al avance de las obras de construcción del acueducto el día de ayer martes. La manifestación terminó en violencia, luego de que vecinos lanzaran piedras a los oficiales y ellos respondieran con el uso de gases lacrimógenos.

“Hay como un toque de queda aquí en Sardinal, no podemos salir porque nos agarran”, contó Eunice Contreras, presidenta del Comité por la defensa y conservación del agua en Sardinal.

Contreras manifestó que incluso algunas personas se mantienen dentro de sus hogares por el temor a que los oficiales los agarren. Agregó que el día de ayer unas seis personas del lugar fueron detenidas y llevadas a las Fiscalía de Santa Cruz tras los acontecimientos.

“Ya nosotros pusimos un Habeas Corpus ante la Sala Constitucional  para que dejen libres a los que se llevaron presos, algunos de los que nos han ayudado han sido diputados”, agregó la vecina.

Pos su parte, el Ministro de Comunicación, Mauricio Herrera, quién se encuentra en el lugar, argumentó que la policía tenía instrucciones de no hacer ningún uso de la fuerza en la zona, más allá de proteger a los trabajadores del AyA que están haciendo la obra.

Sin embargo, explicó que el uso de los gases lacrimógenos fue en defensa propia y espera que no se vuelva a dar.

El Ministro dijo que la presencia de los antimotines el día de hoy se debe a una decisión de las autoridades policiales, por si algún hecho como  el de  ayer pudiera repetirse.

“La policía identificó a algunos sospechosos de haber participado en el lanzamiento de piedras, los detuvieron y los presentaron ante el Ministerio Público para iniciar un debido proceso judicial. Quedará en manos de ellos”, explicó Herrera.

Ambiente en Sardinal 

Esta mañana una Comisión de Gobierno conformada por el Ministro de Comunicación, Mauricio Herrera, un equipo de funcionarios técnicos de Casa Presidencial y del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA), se desplazaron hasta el lugar para conversar con los vecinos.

Manuel Salas, Gerente General de AyA resaltó que por parte de la Institución hacen un llamado a los vecinos a no utilizar la violencia como instrumento de  manifestación.

Salas agregó que desde el AyA también se mantiene un espacio para dialogar y poder ceder ante algunos de los aportes de la ciudadanía.

“Si tenemos que ceder,  cedemos. Todos tenemos derecho al agua. Pero tenemos que ceder de las dos partes, tampoco se vale imponer por la fuerza un criterio u otro”, explicó el Gerente.

Entre las acciones planeadas según el jerarca, figura la apertura de un espacio de diálogo con la Defensoría de los Habitantes el próximo lunes 11 de diciembre en San José, con la finalidad de converger con los grupos opositores y discutir del tema.

“Seguimos dispuesto a hablar con ellos, porque siempre hemos querido conversar, pero ese grupo se ha negado sistemáticamente a recibir información. El Gobierno ha estado totalmente anuente a conversar durante años”, expresó el ministro Herrera.

Polémica Existente

Los vecinos de Sardinal se oponen a la construcción de acueducto que dotaría de agua el Coco y Ocotal, además de la zona de Sardinal, en Carrillo de Guanacaste.

Tras largos años de la oposición de los vecinos, el  AyA sostiene que ha mantenido un proceso de diálogo y negociación con la comunidad de Sardinal y -producto de esa apertura-  el diseño de acueducto fue modificado para incorporar las solicitudes de la ciudadanía.

Sin embargo, los vecinos insisten en un diálogo directo con las autoridades competentes para llegar a un acuerdo, ya que una de las disconformidades que alegan es que  el proyecto pretende  privatizar y tener fines específicos para el sector  turismo y no tanto para la población.

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