Javier Mora Montero
La noche del jueves 7 de noviembre se firmó un preacuerdo que podría llevar al fin de la toma de la Sede del Pacífico de la Universidad de Costa Rica (UCR)
Desde horas de la tarde, el Vicerrector de Administración de la Universidad de Costa Rica, Carlos Araya, se reunió con representantes del grupo de estudiantes que mantiene tomadas las instalaciones de la Sede del Pacífico de la UCR desde el 16 de octubre anterior, para negociar el cese de la toma de esta instalaciones.
Durante esta reunión se firmó un preacuerdo que, de ser ratificado este fin de semana en una asamblea de los estudiantes que se encuentran dentro del edificio, pondría fin a la ocupación de las instalaciones.
Al mismo tiempo, permitiría que se reanudaran con normalidad todas las actividades de la Sede, para el día martes 12 de noviembre. Así lo confirmó el mismo Vicerrector de Administración.
Araya explicó que volvería a trasladarse a Puntarenas el lunes 11 de noviembre en horas de la mañana para firmar el acuerdo final.
“Ellos (los estudiantes) se comprometieron a verlo (el acuerdo) hoy en la mañana en la asamblea de estudiantes para aprobarlo y el lunes a las 10:30 de la mañana estaría yo en Puntarenas firmando el acuerdo y entregando los muchachos la Sede”.
El Vicerrector Araya explicó que este preacuerdo se logró gracias a que la administración accedió a cumplir con las principales solicitudes de los estudiantes.
“La principal demanda que hacían era el compromiso por parte de la administración para apoyar con tiempos docentes a la Sede, de manera que no haya cierre de cursos y de que haya mayor flexibilidad en la programación de los mismos”, dijo.
Para esto, explicó que se asegurará una cantidad mínima de tiempos de apoyo, para que la Sede pueda realizar su actividad académica de manera adecuada.
Araya dice que para la parte de infraestructura, los estudiantes querían tener una fecha de finalización establecida para los proyectos que actualmente se están desarrollando en las instalaciones, y así se les otorgó.
Otro de los aspectos, explicó el Vicerrector, era el hecho de no tomar represalias contra los estudiantes que han participado de la toma.
“No habrá represalias en la medida en que no hayan daños a la infraestructura, pues la protesta social no la criminalizamos, no es motivo para generar sanciones”, aclaró Araya.
La tensión que se vive en la Sede del Pacífico se intensificó luego de que el pasado miércoles 6 de noviembre, Mario Solera, el director de la Sede, decidió cerrar el acceso a las instalaciones del otro campus del Pacífico, ubicado en Nances de Esparza, en lo que denominó como una “toma por parte de la administración”. Aparentemente, lo hizo acompañado de oficiales de la Fuerza Pública.
Con respecto a esta situación, el Vicerrector explicó que esta acción se realizó como “medida preventiva ante una amenaza de toma del campus”. También dijo que se trató de un cierre momentáneo, y que para el día de ayer, volvieron a reanudarse con normalidad las actividades en este recinto.
La toma de las instalaciones de la Sede del Pacífico se ha mantenido por 23 días. Inició la mañana del miércoles 16 de octubre, luego de que en una asamblea de estudiantes se decidió tomar la Sede, ubicada en El Cocal de Puntarenas.Esta acción se realizó, entre otras razones, como protesta ante los problemas de presupuesto que afectan a la misma.
En vista de esto, los estudiantes reclamaban la aprobación de un presupuesto de cargas académicas para el 2020 que permitiera atender la creciente demanda de cupos y el correspondiente nombramiento de docentes.
