El presidente de la Asamblea Legislativa, Carlos Ricardo Benavides, no ve mayor problema en acatar las correcciones que envió la Sala IV el pasado viernes al proyecto de reforma de huelgas.
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Los magistrados encontraron dos vicios de constitucionalidad en el proyecto. El primero se relaciona con la disolución de sindicatos por las conductas delictivas de sus dirigentes “en vista de que no se puede trasladar la responsabilidad penal personal y personalísima de los dirigentes sindicales a todo el sindicato”.
“Siendo que esa ha sido la consideración de la Sala, lo que procede es eliminar ese párrafo”, dijo el liberacionista Benavides.
En cuanto a la segunda corrección, los magistrados constitucionalistas señalaron que se debió consultar a la Corte si afecta o no al Poder Judicial que se declaren como servicios esenciales los juzgados de trabajo, pensiones alimentarias, violencia intrafamiliar y la morgue judicial.
“La Sala IV dijo que esa condición que no permite la huelga en esos servicios debió habérsele consultado a la Corte. Difiero porque es claro que ahí no hay una afectación al funcionamiento de la Corte, más bien, la huelga misma afecta el funcionamiento del Poder Judicial”, dijo Benavides.
En el caso de ese artículo, el presidente legislativo se inclina por eliminarlo, pero asegura que se tendrá que analizar el voto completo de la Sala IV y la opinión de los otros diputados en comisión.
Benavides aseguró que en caso de que la Corte diga que ese artículo sí afecta el funcionamiento del Poder Judicial, bastaría solamente con suprimirlo. “Es una cosa que podría subsanarse en un proyecto aparte”, agregó.
Una vez que se hagan las correcciones en comisión, el proyecto llegará a Plenario para recibir una segunda votación definitiva. Posterior a esto, sería firmado por el presidente Carlos Alvarado y publicado en La Gaceta. La iniciativa contó con el aval de 40 diputados en su primer debate.
