El presidente Carlos Alvarado anunció este viernes, a las 7:15 p. m., que vetó el decreto de Ley 9909, que fue aprobada por el congreso el jueves 22 de octubre. La información fue primero difundida en sus redes sociales.
En mi deber de promover el bien común y asegurar el equilibrio entre actividad productiva y sostenibilidad, y además, en cumplimiento de mi palabra, hoy he vetado totalmente el decreto de ley 9909 sobre la pesca de camarón.
— Carlos Alvarado Quesada (@CarlosAlvQ) October 31, 2020
La ley se tramitó en la Asamblea Legislativa con 28 votos a favor. Los diputados aún pueden resellar el veto del Presidente para mantener la vigencia de su decisión, no obstante, necesitan 38 votos (o sea, 10 legisladores más de los que votaron en el segundo debate).
En un comunicado de prensa que se envió a medios, Presidencia afirma que faltan “elementos científicos y estudios técnicos que respalden la sostenibilidad de la pesca de camarón con la técnica de arrastre”.
“Al no ser categórica la evidencia, debemos proteger al ambiente y a las poblaciones que se verían más afectadas. Cualquier decisión que tomemos sobre el aprovechamiento de recursos naturales debe ser basada en ciencia y puede ser desarrollada por los órganos competentes”, dicen las declaraciones de Alvarado.
“Con los elementos disponibles, aportados por muy distintos sectores académicos productivos y políticos, prevalece el criterio sobre un impacto ambiental y socioeconómico negativo con el restablecimiento de esta técnica de pesca, en sectores como pesca artesanal, en la biodiversidad y también sobre la actividad turística de la cual dependen tantos empleos”, asegura también.
La aprobación de la ley, de hecho, contó con desaprobación de sectores ambientalistas, científicos y, también pesqueros.
«Es una actividad depredadora y dañina que atenta contra todo criterio de sostenibilidad de los recursos marinos» , de acuerdo con el Consejo Universitario de la Universidad de Costa Rica.
“La pesca de arrastre desobedeció los llamados de la sociedad civil, y agravó la situación cuando sus ingresos principales, cambiaron de la especie objetivo (camarón) por los peces de interés comercial que capturaban (pargos, corvinas, cabrillas, robalos), afectando los ingresos del sector de pescadores artesanales, sumándose a la carencia de Incopesca para vigilar y sancionar las actividades ilegales, no declaradas, no documentadas”, según la Rectoría de la Universidad Nacional.
La Cámara Nacional de Turismo alegó que se afectarían diversas actividades como pesca deportiva, buceo, tours de avistamiento de especies como delfines, ballenas, tortugas, rayas, moluscos y crustáceos.
En el comunicado de prensa, el mandatario Alvarado dice que seguirá trabajando en zonas costeras “para concretar una fuerte inversión en infraestructura, como la construcción del nuevo hospital Monseñor Sanabria y la ampliación de La Angostura. Así como hemos impulsado la reactivación del turismo y el empleo mediante la campaña ‘Jale al Puerto’, el parque del Muellero, el Parque Mora Cañas, el Plan Maestro del Puerto Caldera y la reapertura de la isla San Lucas, ahora hecho Parque Nacional”.
Diputados reaccionan al veto
La oficialista Paola Vega, una de las más reacias opositoras a la pesca de arrastre, envió un audio con una declaración.
“No puedo más que agradecerle al Presidente de la República por su coherencia, compromiso y la valentía de saber tomar decisiones que equilibren el bien de la mayoría en primer lugar. Esta es una muestra de compromiso con el ambiente, con el empleo sostenible y la sostenibilidad de la producción y pesquerías. Sin duda alguna, las futuras generaciones van a agradecer este gesto y nunca lo van a olvidar. Toca, ahora, que la Asamblea Legislativa se comprometa y no reselle esto. Que de una vez por todas, entiendan que no hay pesca de arrastre sostenible y que tenemos miles de opciones más para las comunidades pesqueras del país”, dijo Vega.
Su compañero de bancada Luis Ramón Carranza también envió declaraciones en un audio.
“Me siento muy complacido de que el Presidente de la República haya escuchado la voz del pueblo. Fui uno de los diputados que, inmediatamente después de la votación en plenario, le pedí al Presidente al veto. Es respetar no solo el sentir del pueblo sino estar acorde con la naturaleza y el ambiente, no permitir un retroceso en materia ambiental como estos. Nos encargaremos como diputados de lograr que esto no sea resellado. Hay la consciencia suficiente en el plenario legislativo”, afirmó.
El liberacionista Roberto Thompson, parte de la minoría de su bancada que rechazó la iniciativa, también colgó declaraciones en redes sociales.
“Celebro la decisión del Presidente de vetar la ley que pretendía restablecer la pesca de arrastre y reafirmo mi voto negativo a todo intento de resello,comprometiendo mis esfuerzos en la búsqueda de soluciones integrales y sostenibles a las necesidades de nuestras zonas costeras”, escribió Thompson en Twitter.
La legisladora Zoila Volio, quien fue una de las 28 diputaciones que votó a favor de la pesa de arrastre, aseguró en su Twitter que respetará el veto.
“Respetuosa de la institucionalidad de la República, y siendo el veto un mecanismo democrático, acepto la decisión del Presidente y espero se dé un plan de generación de empleo en Puntarenas”, escribió.
