Cinco personas fueron detenidas esta mañana por su vinculación al caso “Recope-Soresco”, relacionado con el frustrado proyecto de refinería conjunta entre Costa Rica y la República Popular China que tuvo una inversión conjunta de $100 millones y nunca se concretó.
La Fiscalía investiga la posible comisión del delito de peculado, la figura legal que se aplica cuando funcionarios públicos que tienen bajo su responsabilidad dinero o bienes públicos y le dan fines distintos a los previstos por las leyes o reglamentos.
Los hombres de apellidos Trejos Gómez, Naranjo Sánchez, Edward Early, Ulate Padget y Xu (este último es de nacionalidad china), están en las celdas del Organismo de Investigación Judicial (I Circuito Judicial de San José) y podrían rendir declaración durante esta tarde, confirmó la Fiscalía Adjunta de Probidad, Transparencia y Anticorrupción tras una consulta de este semanario.
Las detenciones de los costarricenses se dieron en vía pública frente a los domicilios en Escazú, Barva de Heredia, Curridabat y Montes de Oca, mientras a Xu se le abordó frente a un colegio privado en Lindora, Santa Ana. No hubo allanamientos de por medio.
La Fiscalía informa de un posible perjuicio por $50 millones para el Estado costarricense por el acuerdo de cooperación suscrito entre RECOPE y la empresa estatal de la República China Nacional Petroleum, después del establecimiento de las relaciones diplomáticas bilaterales, en 2007, decidido por los presidentes nacionales Óscar Arias y Hu Jintao.
El objetivo de Soresco era remodelar las instalaciones de la refinería de Recope (Refinadora Costarricense de Petróleo) ubicada en Moín, Limón, pero numerosos obstáculos administrativos y legales hicieron imposible concretar el proyecto y ahora también hacen imposible disolver esa empresa binacional llamada Soresco.
Por este mismo caso la empresa energética china demandó a Recope en un arbitraje internacional, aunque en semanas recientes ha habido acercamientos políticos para disolver el proyecto. El embajador de China en Costa Rica, Tang Heng, dijo que su gobierno está dispuesto a buscar una salida política y que es consciente de que a Costa Rica no le interesa continuar.
