El empréstito con el Fondo Monetario Internacional (FMl), estimado en $504 millones, fue aprobado en primer debate este lunes, después de extensas manifestaciones contrarias desde las curules opositoras. Finalmente, recibió el apoyo de 37 legisladores y la negativa de otros 15.
Para el segundo debate, el jueves 27 de agosto, el proyecto de ley necesita 38 votos afirmativos.
Este lunes, quienes votaron en contra fueron: Shirley Díaz, Pablo Heriberto Abarca y Pedro Muñoz del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC); Patricia Villegas y Wálter Muñoz del Partido Integración Nacional (PIN); José María Villalta del Frente Amplio; Daniel Ulate de Liberación Nacional; y los independientes Harllan Hoepelman, Nidia Céspedes, Carmen Chan, Marulin Azofeifa, Ignacio Alpízar, Jonathan Prendas (los seis organizados en el bloque Nueva República); Dragos Dolanescu y Erick Rodríguez.
La discusión de este préstamo inició el jueves con argumentos de los legisladores Wálter Muñoz, Carmen Chan y José María Villalta.
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Este lunes, hablaron en contra del proyecto los diputados Nidia Céspedes, Dragos Dolanescu, Patricia Villegas, Pedro Muñoz, Erick Rodríguez, Jonathan Prendas y Harllan Hoepelman.
Argumentos en contra de la aprobación de este proyecto versan sobre cuestionamientos al nivel de endeudamiento planificado por Gobierno; dudas sobre el plan de pago y requerimientos que pide el FMI por los $504 millones; así como críticas a otras políticas del PAC en el marco de la pandemia.
Dolanescu dijo que en el marco del COVID-19, se están tomando estas decisiones “a la carrera”.
“Ni la fracción oficialista, y otros diputados que parecen de Gobierno y no de oposición, detallan ni explican ampliamente que este instrumento de financiacion rapida que pretenden a la carrera, lo que hace es abrir una línea de crédito adicional por más de $.1750 millones con el FMI, bajo el mecanismo de stand-by. Sumados, nos generan una deuda superior a los $2.250 millones. ¿A cambio de qué? ¿De nuestra soberanía y autodeterminación?”, dijo Dragos Dolanescu.
“Existen aún caminos menos invasivos para obtener riqueza para nuestra Nación, con nuestros propios recursos. ¿Por qué no el reinicio de una readecuación de la actividad minera en Costa Rica. Una grandísima oportunidad frente a la crisis económica severa que se aproxima. El Gobierno tiene la potestad de tomar posición inmediata con la mina de Crucitas, promoviendo una ley que permita que el Banco Central compre ese oro”, afirmó la legisladora Patricia Villegas.
Por otro lado, solamente los legisladores Yorleny León (PLN) y Erwen Masís (PUSC) hablaron positivamente sobre sus votos.
Aún así, León cuestionó la “capacidad del Gobierno” para finiquitar la negociación de este préstamo.
“El equipo de Gobierno no ha entendido que la aprobación de este préstamo debe ser la base para generar un voto de confianza con los diputados. Continúan los reclamos sobre un Gobierno que le cuesta informar del desempeño global y específico que han tenido los préstamos ya aprobados”, dijo León.
“No estamos aprobando impuestos. No se está aprobando una nueva obligación porque es para pagar la deuda vieja que existe. Es para pasar de pagar deuda cara a pagar deuda barata. Es ilógico no aprobarlo”, explicó Masís.
