La Defensoría de los Habitantes informó este lunes que el Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) y la Caja Costarricense Costarricense de Seguro Social (CCSS) encabezan la lista de las instituciones más denunciadas con 4.039 y 2.400 quejas respectivamente.
Así lo revela el Informe Anual 2018-2019 de la Defensoría de los Habitantes, el cual detalla que la institución recibió un total de 26.600 denuncias por falta de respuesta oportuna de las entidades públicas que ofrecen servicios.
En el caso de la CCSS, se presentaron denuncias por poca agilidad en el aseguramiento de personas en el Régimen No Contributivo (RNC) y por los largos tiempos de espera por procedimientos y cirugías en los hospitales públicos.
En este último punto, la Defensoría se encuentra trabajando junto a las autoridades del Ministerio de Salud y la CCSS para encontrar un plan remedial a la situación que aqueja a miles de ciudadanos.
En cuanto a las solicitudes de pensión por RNC, la defensora indicó que los plazos de respuesta en múltiples casos exceden el año y medio.
En el IMAS las quejas de los ciudadanos se encuentran relacionadas con la falta de respuesta formal de la institución a solicitudes de beneficios.
“El IMAS tiene problemas con falta de respuesta a los habitantes o tiempos excesivos para darlas. Por ejemplo, para mejoramiento de vivienda tarda entre 6 y 8 meses”, señaló la defensora de los habitantes, Catalina Crespo.
El Ministerio de Educación Pública (MEP) continúa en la lista con 1.441 denuncias. De acuerdo con la defensora, las quejas en la institución se relacionan con problemas de infraestructura en los centros educativos y en los pagos de los profesores.
“Hay varios problemas que tiene el MEP. Aquí en la Dirección de Laborales estamos lidiando con problemas de que el MEP no le está pagando a los maestros pluses, anualidades. En cuanto a infraestructura está en mal estado y eso es un tema de gestión. No es que no está la plata sino que no se gestiona bien y a veces hay que devolver dineros”, externó.
“La Escuela de Bahía Drake tiene una montaña que en cualquier momento se le cae encima. La Escuela de La Florida en Isla Venado, después del terremoto, quedaron huecos entre la pared y el piso e inclusive hay unas paredes que se mueven y los niños reciben clases. Mi preocupación es que algo grave pase”, añadió.
La defensora indicó también que han identificado problemas en el funcionamiento del Patronato Nacional de la Infancia en oficinas centrales, donde se observa lentitud en la atención de casos y falta de seguimiento de las medidas de protección adoptadas.
“En el PANI hemos visto gran problema en funcionamiento de oficinas locales y hemos recomendado capacitación. Los fines de semana hay oficinas que no responden, entonces ¿qué se hace con niños?”, acotó.
Además destacó que existe un albergue en Guápiles donde los niños viven hacinados, y esto la Defensoría ya lo comprobó.
