País

Ahijada de Epsy Campbell renuncia como asesora de despacho en Cancillería

Catherine Rivera indicó que hay sectores “que no están conformes con que una mujer negra dirija las relaciones internacionales de este país”, por lo que no permitirá que usen su nombre “para que enciendan las voces de odio”.

Catherine Rivera,  ahijada de la canciller, Epsy Campbell, renunció a su puesto de asesora de despacho de la canciller luego de haber recibido fuertes cuestionamientos y críticas durante los últimos días por su nombramiento en ese puesto de confianza.

La Cancillería difundió la carta de renuncia de Rivera esta tarde de lunes, en la que afirma que la decisión se tomó tras haber sido víctima de una “campaña de desprestigio” por parte de algunos medios de comunicación.

El nombramiento de Catherine Rivera como asesora del despacho de la canciller saltó a la luz pública luego de que la ministra Campbell confirmó ante la Comisión de Ingreso y Gasto Público que era su ahijada

“En primer lugar, quiero aclarar enfáticamente que ni mi familia ni yo, tenemos algún grado de parentezco, por consanguinidad o afinidad con la señora Epsy Cambell Barr. Incluso debe aclararse que la señora Campbell no es mi madrina de bautizo, como consta en la Constancia de Sacramento recibidos, emitidos por la Iglesia Católica”, indicó Rivera en la carta.

“Desde hace meses he sido víctima de una campaña de desprestigio por parte de algunos medios de comunicación de circulación nacional, en donde injustamente se ha circulado información falsa cerca de mi integridad y recientemente, la de mi familia; todo esto con la clara intención de ensuciar mi imagen y desacreditar todo esfuerzo todo esfuerzo personal y profesional, al igual que el legado histórico de mi abuelo afrodescendiente  a través del apellido Mc Kinley, del cual me siento muy orgullosa y reivindico todos los días”, continúa.

En el documento, Catherine Rivera expresó que en el país hay distintos sectores “que no están conformes con que una mujer negra dirija las relaciones internacionales de este país”, por lo que no permitirá que usen su nombre como “para que enciendan las voces de odio”.

“Los puestos de asesores de confianza, no son sólo una práctica histórica y utilizada por los diferentes poderes de nuestro país, para brindar asistencia y apoyo técnico a los jerarcas; estas están autorizadas y reglamentadas conforme a nuestro ordenamiento jurídico(…)”, detalla.

“En este sentido, con profundo convencimiento en el trabajo que se está llevando a cabo desde la Cancillería, con la frente en alto, y el sentimiento del deber cumplido, me permito presentar mi renuncia irrevocable al cargo de asesora a partir del día lunes 29 de octubre del 2018”, añadió. 

Lluvia de críticas

El nombramiento de Catherine Rivera, saltó a la luz pública desde el pasado jueves 25 de octubre, día en el que la ministra Campbell compareció ante la Comisión de Ingreso y Gasto Público donde fue señalada por presuntos nombramientos irregulares dentro de la Cancillería y en el servicio exterior. 

En esta ocasión, uno de los diputados que integra la Comisión le consultó a la jerarca sobre el nombramiento de su ahijada y madrina de su nieto, como asesora. 

Campbell confirmó que la designación y defendió que su ahijada “era una asesora experta en los temas de apoyo”, así como otro grupo de profesionales que habían sido elegidos porque  tenían la idoneidad y los atestados académicos para ejercer el cargo. También argumentó pese a que era su ahijada, no tenían grado  de consanguinidad.

Durante esta sesión, los legisladores criticaron severamente a la canciller por los nombramientos de gente cercana. Incluso calificaron las designaciones como nepotismo, y alegaron a la jerarca estar incurriendo en acciones que ella mismo criticó al Partido Liberación Nacional (PLN) mientras fue diputada.

Por este motivo, la semana anterior trascendió la  noticia de que la Fiscalía General abrió una investigación a la canciller y vicepresidenta por presuntos nombramientos irregulares en puestos internos de la Casa Amarilla, así como en el servicio exterior.

El Ministerio Público aclaró que la investigación se abrió desde el pasado mes de julio bajo el número de expediente 18-144-033-PE para determinar si existe o no delito en estos nombramientos.

A lo que Campbell respondió que  celebrara la apertura de la investigación para que “se clara la legalidad de los actos y nombramientos realizados en el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto”.

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