El presidente ejecutivo de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), Román Macaya, aseguró este lunes en conferencia de prensa que 12% de los funcionarios de la institución que son positivos por COVID-19 fueron contagiados por pacientes.
De acuerdo con Macaya, en total 133 funcionarios de la institución se han infectado por el virus, la mayoría de ellos (34%) se contagió por contacto con otros funcionarios.
El otro 28,5% se encuentra en estudio, mientras que de un 15% se desconoce el nexo epidemiológico. El otro 10,5% corresponde a funcionarios que estuvieron de viaje y fueron contagiados.
El jerarca de la Caja resaltó el esfuerzo que se encuentra haciendo la institución para comprar el equipo de protección especial para los funcionarios, quienes se encuentran en l la primera línea.
En días pasados, tanto sindicatos como funcionarios en solitario, han solicitado a la Caja que los doten de mayor equipo para atender los pacientes.
El pasado 4 de abril, por ejemplo, el Sindicato de Enfermería (Sinae) denunció que se les estaba restringiendo el uso de los respiradores N95 y se les estaba indicando que debían utilizar las mascarillas quirúrgicas para atender a las personas confirmadas con COVID-19, pese a que la protección que ofrecen esas mascarillas es baja.
Consultado sobre el tema en conferencia de prensa a principios de abril, el gerente médico de la Caja, Mario Ruiz aseguró que “la mascarilla quirúrgica no protege contra el virus, lo que evita es que las partículas de tos o saliva se expulsen más lejos, pero no es protectora contra ningún tipo de virus. Cuando uno la usa es para evitar contaminar, no para evitar contaminarse”.
Este lunes por la mañana se confirmó el sexto deceso producido por COVID-19. Se trata de un médico de 54 años del Hospital de Alajuela, quien se infectó tras un viaje al exterior.
A este hombre se le conecta con el contagio de otras 81 personas, que se originaron por contacto directo e indirecto, varios de ellos funcionarios del Hospital de Alajuela.