Al pensar en innovación, desde una institución como la Universidad de Costa Rica (UCR), es imprescindible pensar en la importancia de lo social, visualizar el aporte de distintos sectores de la sociedad en proyectos colaborativos, fortalecer la generación de ideas al servicio de otras personas; porque hay gran capacidad de innovar entre comunidades, y crear soluciones creativas de alto impacto.
De acuerdo con la CEPAL (2008) innovación social se refiere a “(…) nuevos procesos, prácticas, métodos o sistemas para llevar a cabo procesos tradicionales o tareas nuevas que se hacen con participación de la comunidad y de los beneficiarios. Para otros también incluiría aquellas iniciativas originales que mejoran la eficacia de la acción pública. Muchos identifican la innovación social con las aplicaciones sociales de la innovación tecnológica e incluso la parte de ésta que corresponde a la participación y la gestión del talento humano”.
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“Lo que hace distinta esta sociedad no es que el conocimiento sea un recurso, sino que es el recurso”
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La innovación social es un fenómeno que ha contribuido en una diversidad de prácticas tales como: economía colaborativa, emprendimientos sociales, innovación abierta, dando impulso a la creatividad colaborativa en diversas comunidades.
Por otra parte, las diferentes problemáticas sociales, el calentamiento global, el cambio en el ambiente y las crisis económicas en diversos países han evidenciado la gran necesidad de generar aportaciones a soluciones diferentes y novedosas, cuya principal motivación es la de tipo social de manera colaborativa con diferentes grupos comunales.
En nuestro país se han venido desarrollando iniciativas desde diferentes entidades interesadas en la promoción de la vinculación de diversos sectores de la sociedad; un ejemplo de ello, fue la firma del manifiesto firmado, en abril del 2018, liderado por el Gobierno de la República, en el cual varias organizaciones públicas y privadas adquirieron el compromiso de diseñar, incentivar, propiciar, apoyar e implementar iniciativas en innovación social mediante el trabajo en varias líneas de acción.
Este compromiso es de suma importancia porque con ello se visualizan propuestas a cambios positivos con gran impacto en el ámbito social, interconectando diferentes esferas sociales. Cuanto más profundo y difundido sea el cambio social mayor será la capacidad de transformación social.
Ahora bien, desde la Universidad se ha venido trabajando en diversas iniciativas en múltiples ámbitos y Proinnova-UCR, a través de la gestión de casos de innovación, se ha dado a la tarea de identificar proyectos dirigidos hacia la innovación social y considerando que el accionar se realice de manera colaborativa.
En estos proyectos el componente social, el trabajo colaborativo y la generación de propuestas participativas son el objetivo principal. Actualmente, en Proinnova-UCR, se gestionan 15 proyectos de innovación social.
Un ejemplo de esto lo constituye el caso de IyöKË, que es un juego de mesa desarrollado por la Dra. Vanessa Fonseca, investigadora de la Escuela de Comunicación Colectiva y del Instituto de Investigaciones en Educación de la UCR, el cual pretende, de manera lúdica, dar a entender y poner en práctica el adecuado manejo de los residuos y el conocimiento de las 4 Rs: responsabilizarse, reutilizar, reducir y reciclar.
Para poner este juego a disposición de las personas, primeramente se inició con un mapeo de oportunidades con el fin de visualizar diferentes escenarios de trabajo, donde se generó una serie de contactos especialmente en zonas rurales.
Producto de este mapeo se realizó una alianza con el Recinto de Guápiles de la UCR, el cual pareció sumamente interesante ya que, a través del TCU 663 “Acompañamiento y fortalecimiento de capacidades en las instituciones públicas, las organizaciones y las comunidades frente a los retos socioambientales, en los cantones de Pococí, Guácimo y Siquirres”, el cual tiene como objetivo acompañar y fortalecer especialmente a las comunidades, organizaciones e instituciones públicas, para la búsqueda conjunta de soluciones a los problemas socioambientales y visualiza que el trabajo comunitario es un proceso de transformación desde la comunidad… “soñado, planificado, conducido, ejecutado y evaluado por la propia comunidad”.
Desde la coordinación de la profesora Karla Cruz, encargada de este TCU, y junto con el grupo de estudiantes de diferentes carreras, quienes mediante contactos y trabajo previo con las Municipalidades, escuelas públicas, el PANI e incluso algunas empresas de la zona realmente comprometidas con el ambiente, se ha venido trabajando en diferentes comunidades mayormente bananeras y piñeras afectadas por la contaminación ambiental.
La profesora Cruz junto con sus estudiantes de TCU generaron una estrategia que incluye iniciativas educativas diseñadas para el abordaje de la gestión ambiental, dirigidas a escolares, docentes y funcionarios de diferentes organizaciones. Como parte de esta estrategia, se distribuyó el juego IyöKË el cual permite trabajar con esta población, que a este momento ha alcanzado una población de alrededor 3.850 personas en el Atlántico.
Asimismo, Proinnova-UCR participó, el año pasado, en un concurso de fondos del programa Miniproyectos Comunales de Coopeande R.L. con lo que se obtuvo el financiamiento para la impresión del juego. Con esta alianza público-privada se logró el objetivo inicial del proyecto: la entrega del juego a diferentes escuelas públicas, organizaciones públicas y privadas interesadas en el bienestar del ambiente.
La gestión de alianzas público-privadas primeramente busca provocar el desarrollo del país y en acciones primordiales como el manejo, la gestión integral de los residuos sólidos, la mitigación y adaptación al cambio climático, asimismo fortalecer el desarrollo local mediante la articulación y colaboración de los actores del territorio para promoverlo.
A finales del 2019, se trabajó en Coordinación con la Municipalidad de Santo Domingo de Heredia con quienes, a través de su proyecto Gestión Ambiental, se coordinó la entrega del juego a diferentes escuelas de la zona con el fin de utilizarlo como herramienta de los diferentes programas de trabajo en pro del ambiente.
En este momento se trabaja, además, con la Sede del Sur de la UCR en conjunto con la Coordinación de Acción Social, la carrera Turismo Ecológico y el Proyecto TC-657 El Sur Emprende. En la misma línea se está trabajando con la Fundación Corcovado y la Empresa de Servicios Públicos de Heredia, con el fin de seguir una estrategia similar y compartir el juego en varias comunidades.
Todos estos ejemplos permiten visualizar la interacción de los actores de la Quíntuple Hélice y como se pone en marcha un proyecto para generar un impacto positivo en diversas áreas como la educación, el fomento de la colaboración, el cuido del ambiente y el fortalecimiento de las comunidades.
Es necesaria la intervención de los ciudadanos, de las diferentes organizaciones públicas y privadas y gobiernos para poder materializar proyectos con las comunidades, para fortalecer las capacidades de las instituciones, estudiantes, investigadores y gestores de innovación mediante el trabajo colaborativo, para que sean líderes de la creatividad y la innovación y así poder construir juntos un mejor país.
Sobre la autora:
Cynthia Céspedes es Gestora de Innovación de Artes, Letras y Ciencias Sociales en Proinnova. Además, apoya las áreas de Ciencias Agroalimentarias e Ingeniería. Cuenta con conocimientos en el área de administración y con amplia experiencia en la gestión de proyectos innovadores, especialmente aquellos de impacto social. Asimismo, es facilitadora de capacitación en propiedad intelectual, creatividad e innovación; brinda asesoría en análisis de estudios de inteligencia competitiva y en propiedad intelectual a la comunidad universitaria y al público en general. Céspedes es Máster en Administración Pública de la Universidad de Costa Rica.
