Suplementos

Interpelación del realismo cínico

Como narradora, Catalina Murillo ha consolidado en esta, su tercera novela, un estilo fluido, claro y depurado.

Maybe Managua

Catalina Murillo

Novela

Uruk editores

2017

Esta es una novela de camino, sigue el periplo de un protagonista en su ruta de decadencia, renuente a asumir compromisos, defensor a ultranza de una libertad relativa con la que además no sabe qué hacer y que, más que una liberación, parece constituir su propia condena. La narración nos cuenta los personajes y vicisitudes que enfrenta en un viaje cuyo rumbo lo define el impulso obsesivo de alejarse de donde está.

Juan es un español de 44 años que esconde en su aspecto atractivo para las mujeres su profunda misantropía.

Incapaz de establecer algún compromiso afectivo, laboral o ético, dilapida las expectativas injustificadas que algunas personas han puesto en él. Se siente como un estafador cuyo timo consiste en venderse a sí mismo. Está en Costa Rica gastando los últimos dólares que algún amigo incauto le confió para un negocio que nunca despegó.

Aunque estudió arquitectura, huye de cualquier posibilidad del ejercicio de su profesión o de cualquier trabajo. Víctima de su propio cinismo, apenas logra sobrellevar su amargura con ególatra desprecio hacia los demás.

Catalina Murillo logra un atinado retrato psicológico del protagonista e incluso de algunos otros personajes secundarios, cuyos dramas existenciales apenas logran rozar la carcasa inexpugnable con que cubre sus sentimientos y azuzan a escapar sin miramientos.

Un guacamayo azul que está entrenado para abrir la puerta de su jaula y volar para no ser libre nunca, víctima de su propia autonomía, parece alter ego del protagonista, cosa de la que él jamás se percata.

Maybe Managua es la tercera novela de Catalina Murillo, luego de Marzo todopoderoso (2003) y Tiembla, memoria (2016), vuelve en ella a ese mundo de personajes a los que se les cae la máscara. Esta narrativa es como un carnaval fallido, el público, en este caso el lector, aplaude primero el humor aderezado de cinismo que le hace guiños desde las páginas, pero luego empieza a sentir el lugar incómodo a que lo han llevado sus propios pensamientos.

Los personajes de Maybe Managua se suman a la galería de antihéroes que Catalina Murillo ha creado en su narrativa descarnada. Con su humor tragicómico va desgranando el confort insulso del lugar común, de lo supuesto y dado por sentado, con más cinismo que sarcasmo la autora obliga a quien lee a mirarse a sí mismo desnudo de justificaciones; cuando no por las implicaciones de los personajes, por la voz oportuna del narrador omnisciente.

El estilo cuidadoso y la fluidez narrativa hacen que esta novela corta se consuma en un par de tragos entre dulces y amargos, y que dejan un gusto de reflexión en la memoria.

 

Suscríbase al boletín

Ir al contenido