A la nueva técnica de grabado desarrollada en la Facultad de Artes de la Universidad de Costa Rica (UCR), el Coriumgrabado, el Registro Nacional le otorgó la primera patente en artes de la universidad el pasado 17 de diciembre.
La técnica fue desarrollada por el investigador y artista Salomón Chaves, y es considerada como una innovación mundial al ser una opción de grabado no tóxico, más sencilla y menos peligrosa por su manejo.
Con la otorgación de la patente, el proyecto de Coriumgrabado tiene más posibilidades de realizar huecograbado con procesos no nocivos para el medio ambiente ni para la salud, puesto que los artistas que trabajan técnicas de este tipo sufren consecuencias por el uso de químicos.
“El otorgamiento de esta patente significa un reconocimiento a la calidad inventiva que evidencia la calidad, importancia y relevancia de la investigación desde el campo de las artes, especialmente el impacto positivo en la sociedad”, aseguró Cynthia Céspedes, Gestora de Innovación en la Unidad de Gestión y Transferencia del Conocimiento para la Innovación (Proinnova UCR).
Para el artista, la patente representa un estímulo para seguir desarrollando proyectos que permitan poder democratizar el acceso al conocimiento.
“En mi caso se donaron los derechos a la universidad, justamente para que no se pueda lucrar con esta técnica y más bien de enseñe y comparta con todos los artistas y personas interesadas”, aseguró Chaves.
El Coriumgrabado nació como parte de la tesis doctoral de Chaves en la Universidad Complutense de Madrid, y fue gestionada por Proinnova en 2011. En 2012, se presentó la solicitud de patente ante el Registro Nacional, la cual, cinco años después, resultó en ser la primera que se le otorga a la UCR en el campo de las artes plásticas.
“Esto demuestra que es posible innovar en el conocimiento artístico y en los procesos técnicos que muchas veces se cree que son muy estandarizados. En el sector de las artes creo que puede ser un estímulo para que más creadores se interesen por desarrollar su obra en grabado ya que el desarrollo de este tipo de técnica es simple, económico y rápido”, declaró Chaves.
El coriumgrabado fue llevado a Guanajuato, México, y a Granada, Nicaragua, para que más artistas plásticos conozcan la técnica.
Chaves realizó una transferencia de demostración en el Departamento de Arte y Diseño de la Universidad de Guanajuato mediante un taller impartido del 14 al 18 de mayo pasado en el que participaron 15 personas, entre estudiantes y docentes.
“Las reacciones fueron muy positivas en cuanto a lo innovador y accesible de la técnica, bajo costo de materiales, la simpleza de los procesos, efectos plásticos logrados y la rapidez con que se logra generar la matriz estampable en relación con otras técnicas calcográficas”, contó Chaves.
Ahora, empieza a desarrollar una investigación sobre la conservación y restauración de obras de arte en papel, con la idea de analizar y desarrollar técnicas adaptadas al contexto y recursos disponibles en el país.
“Como gestora de innovación, este proyecto permite considerar la importancia de la participación del sector artístico en la generación de proyectos innovadores y ser parte importante del desarrollo económico de nuestro país; y asimismo facilitar el trabajo de los artistas, promover la investigación y la acción social, y el fomento del arte entre niños y jóvenes”, aseveró Céspedes.