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Carmilla

Si lo que buscas es una buena historia de vampiros, el librero acabará recomendándote Drácula.

Si lo que buscas es una buena historia de vampiros, el librero acabará recomendándote Drácula. Lo que probablemente no sabías es que su autor, Bram Stoker, se inspiró en otro manuscrito escrito 25 años antes para crear su gran obra literaria. Se trata de una novela corta escrita por Sheridan Le Fanu en 1872. Su protagonista, Carmilla, es el antecedente femenino del famoso conde de Transilvania.

Lo cierto es que ambos personajes guardan cierto parecido. Pertenecen a la nobleza, están sujetos al sepulcro, tienen costumbres nocturnas y presentan una palidez extrema. Por no hablar del carácter epidémico del fenómeno pues, desde su llegada, los habitantes de sus respectivas ciudades empiezan a caer enfermos. Eso sí, para combatirlos cuentan con un experto cazador de vampiros. En Drácula era Van Helsing. En Carmilla, el varón Vordenburg.

También los dos necesitan chupar la sangre a sus víctimas para permanecer vivos y jóvenes. Sin embargo, existe una ligera y llamativa diferencia. El cuento de Le Fanu representa el amor lésbico entre la vampiro y su víctima, lo que sitúa la historia en una temática erótica homosexual además de gótica. Y es que Carmilla no ataca aleatoriamente. Solamente muerde en el cuello a jóvenes de extrema belleza. Una dinámica que repetirá su colega un cuarto de siglo más tarde.

El lector conoce la leyenda de la vampiresa de la mano de Laura, una joven inglesa de dieciséis años que vive con su padre en un castillo cercano a Estiria (Austria). Una noche, un carruaje tiene un accidente cerca de su schloss. En él viajan dos mujeres: la joven Carmilla y su madre, que pide asilo al padre de Laura para cuidar a su hija mientras ella prosigue su viaje sin dar motivos de su apresurada marcha.

La joven muchacha entabla una amistad con Laura y no tarda en mostrar algunos de sus extraños hábitos, como el de no levantarse antes de mediodía. Poco tiempo después de su llegada, Laura empieza a sufrir pesadillas y cae enferma. Su padre está convencido de que algo extraño sucede y decide investigar las causas, aunque solo podrá salvar a su pequeña si descubre la verdadera identidad de Carmilla.

Tomado de La Vanguardia

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