El Tribunal Supremo de Elecciones investiga el origen de los ¢300 millones que el dueño de Pedregal, Rafael Ángel Mora, inyectó al partido Nueva República y las razones por las cuales intermedió un pagaré que no corresponde en una venta de bonos de deuda política.
La investigación preliminar administrativa por parte del órgano electoral se abrió el pasado 7 de febrero bajo el expediente n.° DFPP-EE-003-2023.
Un pagaré es un documento formal en el que una persona deudora se compromete a pagar incondicionalmente una suma de dinero con motivo de un préstamo, mientras que la compra de bonos es una inversión de alto riesgo que pueden realizar personas físicas y que cobran valor cuando una agrupación gana votos suficientes para obtener financiamiento estatal.
En el pagaré firmado por NR, documento al que tuvo acceso UNIVERSIDAD, la agrupación negocia el pago de intereses anuales del 11% y del 20% por mora. Además, se establece que el pago debía realizarse antes de abril del 2022 y no se hace mención de una garantía por bonos de deuda política.
Tras la firma del pagaré el 14 de diciembre del 2021 -en medio de la campaña electoral- Zamora entregó el dinero por medio de un cheque con fecha de 21 de diciembre del 2021.
Sin embargo, falta de suficientes votos en las elecciones, los bonos de deuda política clase B que la agrupación reportó a nombre del empresario no cobraron valor.
El jefe del Departamento de Financiamiento de Partidos Políticos del TSE, Ronald Chacón, indicó que la compra y venta de bonos se considera un “negocio jurídico perfecto” por lo que “resulta improcedente” y “no tiene causa jurídica válida” la firma de un pagaré como el firmado por la agrupación.
“No viene al caso la emisión de un pagaré en el caso de la venta de certificados de cesión por parte de un partido político a una persona física” dijo Chacón.
UNIVERSIDAD consultó al diputado Fabricio Alvarado, por medio de su equipo de prensa, las razones por las cuales se firmó un pagaré -siendo que no es una práctica requerida- y si lo hacían con todos los compradores de bonos, pero se abstuvo a responder.
“No nos referiremos más al tema, pues ya dimos declaraciones al respecto, y el tema está judicializado. Dicho sea de paso, las autoridades judiciales tienen nuestras respuestas específicas a ese respecto” respondió Alvarado.
En múltiples declaraciones a la prensa, Alvarado ha sostenido que no existe tal préstamo (pagaré) y que lo que hubo fue una venta de bonos de deuda política por lo que “el cobro es ilegítimo”.
Este semanario también intentó contactar a Francisco Prendas, expresidente de Nueva República, y César Zúñiga, tesorero de la pasada campaña, quienes firmaron el pagaré con el dueño de Pedregal con fiadores, pero no atendieron las consultas.
El asesor político de la agrupación, Iván Barrantes, dijo que el equipo de campaña le solicitó firmar por ser de confianza y firmó por solidaridad con la agrupación, pero que desconoce detalles o las circunstancias de la negociación del préstamo.
En enero el dueño de Pedregal embargó las cuentas del NR por ¢502,4 millones por medio del Juzgado de Cobro de Heredia, en donde desarrolla una demanda legal contra la agrupación por el impago del pagaré, los intereses y las costas legales.
