Los 145 años de trayectoria y renombre del Banco de Costa Rica no pueden venderse “a cualquier postor” mientras se pone en riesgo la estabilidad laboral y económica de cerca de 4000 familias que dependen de la entidad, asegura la Unión de Empleados del Banco de Costa Rica (Unebanco).
El secretario del sindicato, Jonathan Blanco, conversó con UNIVERSIDAD y afirmó que el anuncio de las intenciones de vender el banco tomó por sorpresa a toda la población y causó zozobra.
En un comunicado de prensa este miércoles el BCR llamó a los diversos sectores a realizar “un análisis profundo sobre el alcance de la posible venta, así como de la afectación real que la medida tendría para el país en su desarrollo socioeconómico” y pidió a sus clientes y empleados mantener la “continuación confiando como lo han hecho a través de los años”.
Blanco coincidió en ese llamado a la clientela a “no salir corriendo”, pues según dijo, es comprensible que ante lo desconocido las personas sientan amenazados sus recursos o su relación con el banco. “Los clientes pueden estar tranquilos de que el banco sigue sin ningún inconveniente, su alta rentabilidad, su estabilidad y su trayectoria hablan por sí solas”.
El dirigente sindical afirmó que sus dos principales preocupaciones son justamente el golpe a los empleados y al banco mismo, pues el anuncio puede causar problemas en su imagen. “Desde el punto de vista de los empleados del Banco de Costa Rica, estamos hablando de 4000 familias y una venta de la entidad repercute inmediatamente sobre ese sustento, esa estabilidad laboral, máxime en tiempos donde nuestra economía está con tantos problemas. También podría haber repercusión hacia nuestros clientes, desde el punto de vista de la imagen del banco pero por eso hacemos un llamado a la tranquilidad y a seguir trabajando”, dijo.
En un comunicado dirigido a su afiliación, Unebanco dijo que en línea con su “responsabilidad de resguardar y luchar por la defensa férrea y a ultranza de nuestros empleos y el sustento de nuestras familias, así como la defensa de nuestra institucionalidad desde hace más de 145 años, de manera firme y definitiva nuestra línea de defensa será estar en contra de esta y cualquier otra propuesta que implique la venta del BCR”.
Blanco explicó que la primera acción ha sido mantener informados a las y los trabajadores, con el fin de que estén en pie de lucha cuando corresponda y en segundo lugar, tender y estrechar lazos con otras organizaciones para analizar y enfrentar las propuestas que puedan darse y desarrollar estrategias conjuntas de defensa.
Además, dijo, ya han identificado fracciones y diputaciones con quienes esperan reunirse, sea porque están en contra del proyecto o porque tienen dudas, e incluso porque creen poder convencer a quienes en este momento favorecen la venta del banco.
Finalmente, dijo que aunque aun no se tiene conocimiento de los alcances del proyecto, el sindicato estará “a la espera vigilantes de ese documento, necesitamos conocerlo a plenitud, para poder ir midiendo un poco las implicaciones que el alcance del proyecto pueda generar, aunque de manera responsable desde hoy en las primeras horas del día empezamos a tomar una serie de acciones, reuniones y coordinación para enfrentar este proyecto.”
“Es este interés nuestro conocer también esa es la postura de la Junta Directiva del banco”, por ejemplo, comentó.
Ante el anuncio del gobierno, el BCR dijo que considera que necesita conocer “con mayor detalle el contenido de la propuesta para emitir una opinión”.
