Las empresas del sector industrial del país tienen la expectativa de que este 2016 será un poco mejor al año anterior, sin embargo, este es tímido entusiasmo y está condicionado a la mejora de las condiciones de competitividad que pueda impulsar el gobierno de Luis Guillermo Solís, según el más reciente estudio de la Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR), “Perspectivas empresariales y factores de competitividad del sector industrial”.
Esta encuesta que es realizada a un grupo de 119 empresas del sector industrial formal, inscritas en la Caja Costarricense de Seguro Social, entre ellas compañías grandes, medianas y Pymes.
Aunque con un poco más de entusiasmo, este año el estudio presenta una situación similar a la del año pasado, debido a que el país sigue experimentando las mismas problemáticas. Lo que si varió es que el año anterior, las empresas grandes eran las menos optimistas, y en esta ocasión se sienten más confiados, en contraste con la posición conservadora de las pymes.
Este indicador podría predecir que se de mayor actividad del sector, debido al peso que tienen las grandes y medianas empresas en la producción y el empleo nacional. Las empresas grandes son el 5% del Parque Industrial, pero representan el 70% del empleo formal y más del 65% del Producto Interno Bruto de la industria.
“La encuesta señala una situación muy parecida al año pasado, los problemas que el país enfrenta hoy siguen siendo los mismos, seguimos con problemas del empleo, necesitamos acciones para reducir desempleo y generar nuevos trabajos, que requieren sobre todo los jóvenes que se están formando en estos momentos”, explicó Enrique Egloff, Presidente de la Cámara.
En una valoración del 1 al 10, las empresas del sector consideran que este año podrían tener mejores resultados generales en sus operaciones, con una calificación de 7,3, mientras que en el 2015 su valoración era del 7,1. Como se puede observar la valoración es realmente leve.
En términos de producción, rentabilidad y empleo hay expectativas de crecimiento, un 55% del total de las empresas encuestadas considera que aumentará su producción, un 26,3% cree que habrá más empleo y un 62,7% asegura que mantendrá la planilla existente, pero no hará nuevas contrataciones en lo que resta del año.
“Si queremos avanzar como país es necesario convertirse en uno de mayor nivel de desarrollo, con índices de crecimiento superiores a los que tenemos en este momento. Somos optimistas, creemos que solo hay espacio para mejorar pero necesitamos que el gobierno cumpla con sus promesas para lograr más generación de empleo y se adopten acciones en materia de tarifas eléctricas, inversión en infraestructura, tramitología y financiamiento en condiciones competitivas”, añadió el Presidente de CICR.
Producción e inversiones
De acuerdo con los datos un 45,8% de las encuestadas consideran que podrán mejorar su producción durante este 2016, un porcentaje similar al expresado el año anterior (45,7%). No obstante, hay un mayor optimismo en las empresas grandes, que en 2015 solo un 19,5% aseguraba que tendría mayor producción y para el estudio actual subió a un 40,5%.
Las que no están muy convencidas de lograr un aumento de su producción son las pymes, pues en el estudio del año anterior tenían una valoración del 55,4% y ahora es del 44%.
“Mucho del incremento en la producción se estaría dando por mejoras en la productividad con la utilización de la capacidad instalada ociosa en las empresas y no por contratación. El incremento que esperamos en la producción sería significativamente mayor al año anterior”, detalló Pedro Morales, asesor económico de la Cámara.
En cuanto a los planes de inversión las empresas aseguraron en un 62% que es muy probable realizar inversiones en maquinaria, equipo y en planta, un dato superior al período anterior, cuando las compañías proyectaban invertir en un 57%.
Factores de incidencia
Las empresas del sector industrial tienen claras los principales factores que influyen negativamente en sus condiciones productivas, y el más destacado es el costo de la energía eléctrica, que consideran un elemento que limita la competitividad, en particular de las grandes empresas.
Este factor es destacado por un 72% del total de empresas, como la causa número uno, para las grandes compañías representa un 89,2% y para las pymes afecta en un 64,2%.
Según Morales, otro elemento que afecta fuertemente la competitividad del sector industrial son las cargas sociales, de acuerdo con un 70,3%, con mayor afectación a las pymes. Este factor es seguido por la competencia de empresas informales, el exceso de trámites y permisos, los impuestos, el precio de las materias primas, el costo de los combustibles y las carreteras, entre otros.
“El que los industriales definan las cargas sociales y los impuestos como factores importantes que merman la competitividad es coincidente con el estudio del Banco Mundial, contenido en el último informe del Doing Business, que señala que Costa Rica tiene una tasa impositiva total a nivel de empresas alta, de un 58%, ubicándose en el puesto 27 de 189 países para los que se realizó el cálculo de dicho indicador”, comentó Egloff.
Entrevista Enrique Egloff, Presidente de CICR
¿Los resultados de esta encuesta, en resumen, cuál es la realidad que muestra del sector?
Si Costa Rica quiere avanzar a un nivel mayor de desarrollo requerimos índices de crecimiento superiores a los que tenemos en este momento. El gobierno debe adoptar acciones y debe tener claro que el sector industrial es una parte importante del desarrollo económico del país.
No ocupamos incentivos del gobierno, lo que ocupamos es competitividad, que existan mejores condiciones en el tema de tarifas eléctricas, mayor eficiencia del Estado, menor tramitología, financiamiento en condiciones competitivas, como las que se dan en otros países que compiten con nosotros. Es vital tener reglas claras para poder dar espacio a la creatividad e innovación y por ende, al crecimiento del empleo.
¿Qué acciones se pueden tomar para mejorar la competitividad?
Es vital generar empleo, debemos crecer más del 4% que está proyectado, hay países que están evolucionando a niveles del 8%, pero nosotros no, por eso nos cuesta invertir en infraestructura, mejorar la educación, generar más recursos para atender problemas sociales, no hay capacidad de ahorro del gobierno.
¿Cuál es el mensaje que lanza al gobierno esta encuesta?
La encuesta da resultados de leve mejora, pero esa mejora está dentro del margen de error de la encuesta. Entonces no me atrevería a decir que hay una mejor perspectiva, y esto es una alerta para el gobierno.
Las metas tienen que ser más ambiciosas, con propuestas más agresivas para la generación de empleo y con trámites sencillos.
No es posible que para inscribir nuevos productos o materia prima para innovar en un proceso, la industria deba solicitar un permiso que tarda hasta dos meses. En otras naciones ese trámite no pasa de cinco días, incluso en otros países ni siquiera se debe hacer.
¿Ha sido fuerte el impacto de la pérdida de empleo en el sector?
Se ha perdido empleo y ya solo eso es grave. Muchas empresas han reducido sus planillas, incluso cerrado operaciones. No es posible que el gobierno diga que esto es producto de la globalización, porque en realidad se trata de un problema de condiciones para que las empresas puedan invertir, por ello, dichas compañías que sí están globalizadas, invierte en otras plantas y entonces se trasladan adonde son más competitivas.
