El presidente Rodrigo Chaves golpeó la mesa de la Corte Plena al señalar una serie de deficiencias que cree padece el Poder Judicial, expresadas en la impunidad en casos de corrupción, en la falta de respuestas de justicia en la población y en el aumento del costo de ese poder de la República, pero también en las numerosas denuncias contra políticos motivadas por “intereses canallas”, según su propia frase.
En un discurso de poco más de 20 minutos, Chaves aprovechó una invitación a la sesión de lunes de la Corte Plena para echar en cara a los magistrados problemas del Poder Judicial, por considerar que su gasto es desproporcionado frente a la calidad de los servicios a la ciudadanía, con la que el mandatario comparte la corrupción por la posibilidad de que “el cáncer de la corrupción” se haya colado también en ese poder del Estado.
Un ejemplo de esos problemas es el año que ha transcurrido sin que el cuerpo de magistrados haya nombrado aún a la persona sustituta de Emilia Navas en el cargo de Fiscal General de la República, quien renunció en el contexto del caso “Cochinilla” y cuya ausencia afecta el trabajo de persecución de casos penales, además de generar “zozobra” en el pueblo, según Chaves.
Mencionando en varias ocasiones la palabra “pueblo” y diciendo encarnar las preocupaciones populares, Chaves leyó su discurso escrito poniendo sus conocidos énfasis en las palabras más fuertes y guardando incluso silencios retóricos, como cuando dijo indicó la existencia de una “herramienta de la politiquería burda y barata”, en alusión a las denuncias penales que abundan contra miembros del Poder Ejecutivo y que por ley debe tramitar el Ministerio Público.
Este último punto, el de la “judicialización de la política”, se conecta con los hechos de la semana pasada, cuando Chaves acudió al Ministerio Público para conocer detalles de cinco denuncias de tipo penal en su contra, las que consideró “absurdas” y atribuyó a intereses “canallas”, una de sus palabras favoritas para criticar a quienes considera adversarios políticos.
“Esta insigne institución que ustedes representan no debe permitir que individuos y grupos malintencionados continúen utilizando a la Fiscalía General de la República o al Sistema Judicial en general como obsceno cañón para disparar balas de odio, para avanzar sus intereses canallas. Sí, sus intereses canallas. La corte no merece darle vitrina y espacio a esos individuos”, dijo antes de pedir a magistrados y magistradas presentar reformas legales para solucionar eso, antes de que lo hagan otros sectores.
Chaves, sin embargo, no se refirió en esta ocasión a su propuesta de crear incentivos económicos para las personas que denuncien a otros funcionarios por casos de corrupción.
El mandatario cumplió este lunes seis semanas de funciones tras una campaña electoral en la que convirtió en bandera sus críticas contra la corrupción en funcionarios públicos de alto rango y mandos medios. Ahora presiona a magistrados para que atiendan con agilidad esos procesos judiciales, pero al mismo tiempo pide que no den cabida a otras denuncias que considera están motivadas por razones políticas.
Fernando Cruz, presidente de la Corte Plena y anfitrión de turno de Chaves, agradeció los señalamientos pero no dejó de contestar mediante una alusión a Montesquieu (padre del concepto de separación de poderes). También hizo una referencia a la necesidad de investigar también las denuncias de posibles anomalías en el financiamiento de campañas electorales, sin mencionar que ese es uno de los motivos por los que está denunciado Chaves, debido a presuntas irregularidades que detectó el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) en el Partido Progreso Social Democrático (PPSD) y que remitió al Ministerio Público para la investigación penal.
