El presidente Rodrigo Chaves anunció este martes la firma de un decreto que duplicaría el salario base de sus ministros y viceministros, con el argumento de ganan poco para las responsabilidades que tienen y que “este es el momento” de cambiar el congelamiento que atribuyó a razones políticas.
El anuncio lo hizo Chaves a pesar de su posición de defensa de la “regla fiscal”, el instrumento que prohíbe aumentos de salarios cuando la relación deuda/PIB sobrepase el 60%, como es el caso actualmente, sin que se establezca en esa norma excepción alguna para los jerarcas.
Los ministros actuales, que tienen un salario base de 1,3 millones, aceptaron sus cargos a pesar de esa “remuneración absurda”, según Chaves, quien opina que es muy bajo considerando los requisitos que cumplen, sus responsabilidades y hasta la posibilidad de demandas penales en contra.
Aunque esos montos se aplicaban desde gobiernos anteriores y Chaves criticó con dureza acciones del pasado, el aumento del salario no aparece dentro de las propuestas de campaña del ahora mandatario, quien aduce que el salario fue un obstáculo fuerte al momento de reclutar a ministros. Sin embargo, no dijo si les había prometido el aumento al momento de nombrarlos.
Ahora los ministros quedarían con una base de 2,6 millones y los viceministros con 2,5 millones, dijo el presidente, lo que evita que sigan ganando hasta un 30% que otros funcionarios subordinados suyos.
“Llegamos a una situación insostenible. Yo hago las cosas que tengo que hacer en el momento en que tengo que hacerlas y este es el momento”, dijo Chaves sin referirse a las circunstancias actuales de fuerte presión económica, de incrementos en el costo de la vida y de deterioro de ingreso de los hogares.
Consultado por la prensa, Chaves dijo que esos aumentos de los jerarcas deberán ser compensados con reducciones en la planilla del ministerio correspondiente.
Un periodista también le preguntó a Chaves si ese incremento salarial cumple con la ley y él contestó de manera categórica que sí, aunque sin mencionar la “regla fiscal” contenida en la Ley 9635.
Consultado el economista y exviceministro de Hacienda Fernando Rodríguez, dijo que la ley no prevé excepción alguna a la prohibición de aumentos salariales cuando haya circunstancias como las actuales, aunque reconoció que el impacto financiero del incremento anunciado es bajo si se le compara con el total de la planilla estatal.
“No se realizarán incrementos por costo de vida en el salario base, ni en los demás incentivos salariales, los cuales no podrán ser reconocidos durante la duración de la medida o de forma retroactiva, salvo para lo relacionado con el cálculo para determinar las prestaciones legales, jubilaciones y la anualidad del funcionario”, dice el artículo hoy del título IV de la ley vigente 9635, refiriéndose a escenarios en que la deuda pública supere un 60% del PIB, rubro que actualmente es 66,5%.
