Los diputados de Restauración Nacional calificaron como un aspecto inaceptable que se quiera gravar con el Impuesto al Valor Agregado (IVA) los alquileres de organizaciones religiosas que superen los dos salarios base (poco más de ¢850.000).
Así lo hicieron saber en medio de una conferencia de prensa que utilizaron para reiterar su desacuerdo con varias medidas del plan fiscal, incluidos los impuestos reducidos en materia de educación, salud, alquileres, medicamentos (4%) y la canasta básica (2%).
Sobre las iglesias, los auriazules se quejaron específicamente del artículo 8 del primer capítulo en el texto sustitutivo presentado este jueves por el Gobierno, espacio en el que quedó plasmada la excepción para dichas organizaciones.
“Eso no puede ser”, afirmó Eduardo Newton Cruickshank, el limonense que es uno de los dos diputados de Restauración en la comisión dictaminadora del texto junto con su jefe de fracción, Carlos Avendaño.
Desde su punto de vista, “la labor que hacen las iglesias” es suficiente argumento para dejarlas exentas, pues -a pesar de que reciben donaciones- “ninguna realiza actividades lucrativas”.
“Ninguna iglesia, llámese Católica, Evangélica, Mormona, o de cualquier denominación, realiza actividades lucrativas. Lo que realizan las iglesias son actividades de tipo espiritual, de tipo social, que van en beneficio de la condición de vida de las personas que participan en ellas”, señaló.
“Las iglesias lo que hacen es trabajar con las almas. No hacen actividad lucrativa, las donaciones que se reciben son para el mantenimiento y la labor cotidiana que realizan”, puntualizó.
Por último, apuntó que muchas de estas organizaciones más bien realizan “grandes esfuerzos para pagar sus mesadas”, por lo que “no se vale que por exceder dos salarios base se les grave” el alquiler del lugar en el que realizan su culto.
Ante estas y sus otras inquietudes, la fracción indicó haber respondido con distintas mociones para modificar el expediente, de modo que “se lleve el mayor peso en la lucha contra la evasión y elusión fiscal”.
Así mismo, informaron sobre una consulta al defensor de los Habitantes, en la que lo instaron a pronunciarse sobre los efectos del proyecto en las cifras de pobreza. Su hipótesis: que incrementarán.
Al respecto, el jefe de fracción auriazul, Carlos Avendaño, subrayó que “los impuestos a la canasta básica, medicamentos, servicios médicos o de salud irían sobre la clase trabajadora, cuando los impuestos deben recaer sobre aquellos que tienen mayor capacidad para pagarlos”.
