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Proyecto de usura avanzará tras retiro de 22 mociones de diputada María Inés Solís

En discusión de usura, Comisión de Hacendarios negoció retiro del bloque de mociones para convocar audiencia con Sugef y otros tres jerarcas financieros

El proyecto de usura (expediente 20.861) tiene la vía libre para convocar cuatro audiencias de jerarcas financieros. Este miércoles, tras una negociación durante un receso, la diputada socialcristiana María Inés Solís acordó con la Comisión de Hacendarios el retiro de sus 22 mociones pendientes (en noviembre, Solís presentó un total de 27).

Antes de terminar la sesión, la diputada Solís llamó a la negociación un “pacto de damas y caballeros”.

“Me parece que es innecesario seguir hablando del mismo tema por dos horas más, un día más en el que vamos a tener todas las mociones denegadas. Les propuse que esperemos a la siguiente sesión, el próximo martes. Y, luego de esa sesión, tener otra mesa de trabajo para tratar de llegar a un acuerdo. El acuerdo, a este momento, yo lo veo larguísimo. Creo que tiene haber buena voluntad. Yo estoy dando esa muestra de buena voluntad”, explicó Solís, tras la sesión.

“No estoy de acuerdo con la regulación de precio y la regulación de tasas es otra regulación de precios más, pero entiendo la coyuntura política”, añadió.

Los jerarcas que presentarán sus criterios frente a Hacendarios son: el presidente del Banco Central (BCCR) Rodrigo Cubero; el superintendente General de Entidades Financieras (Sugef), Bernardo Alfaro; y el presidente del Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif), Alberto Dent; y el director ejecutivo de Banca para el Desarrollo, Miguel Aguiar.

A principios de diciembre, Cubero, Alfaro y Aguiar participaron de dos sesiones de trabajo con los diputados de Hacendarios.

En diciembre, Sugef ofreció una fórmula que suma cinco componentes hasta llegar al 43%.

El martes, el superintendente Alfaro amplió el criterio que entregó para un nuevo tope de 45%. Dentro del documento, aparece también una separación: ahora, la propuesta es un tope del 60,9% para el caso de los microcréditos (financiamientos que no exceden los ¢18 millones —40 salarios base— y que los solicitan “pequeños productores agropecuarios, microempresarios o emprendedores”).

De acuerdo con el superintendente Alfaro, tras una reunión con los diputados Welmer Ramos y David Gourzong, Sugef revisó el caso de los microcréditos por “temor de que pudiéramos estar excluyendo una parte de la población, precisamente la más pobre, y que usualmente se ubica en zonas rurales”.

“Conté con la suerte de que el gerente de (Banco) Grameen se enteró de que nos encontrábamos recabando información. Me contactó el domingo y nos reunimos el lunes.

“Me brindó gran cantidad de datos que me permitieron completar el informe el lunes en la noche. Lo remití a la Asamblea el martes a primera hora”, explicó Alfaro por mensajes de texto con UNIVERSIDAD.

En diciembre, después de revisar los criterios de BCCR, Sugef y Banca para el Desarrollo, la diputada presidenta de la Comisión, Ana Lucía Delgado, explicó a la prensa que aceptaron la metodología ofrecida por la Sugef para establecer un tope único para los créditos.

La proyección de Delgado era acoger una moción de consenso que, hasta ahora, no ha sido posible negociar.

Lea la entrevista: Diputada Ana Lucía Delgado: “Conmigo no se han reunido”

Diputada Solís pide criterios técnicos

En el centro de la discusión del proyecto de usura persisten diferencias por la fórmula con la cual se establecerá el límite penal para la usura.

El delito penal está consignado en el Código Penal, no obstante, no está tipificado y, por lo tanto, el Poder Judicial está inhabilitado para sentenciar bancos y entidades con tasas de interés de usura.

La diputada María Inés Solís presentó 27 mociones para considerar el criterio técnico del BCCR en el que, de forma estadística, se propone un tope promedio del 57%. En un análisis, la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) asegura que ese cálculo “genera un sesgo a favor de la usura”.

Este tope permitiría que muchas de las tasas preexistentes continúen siendo legales. Por ejemplo, el Ministerio de Economía y Comercio describe que el 70% de las tasas de interés en tarjetas de crédito son del 45% al 49,9%.

Lea: Bancos apuestan por tasas usureras para compensar créditos riesgosos

Este miércoles, Solís pidió a los diputados de Hacendarios que el tope de usura use los criterios de las entidades consultadas.

“Quiero que nos apeguemos a los criterios técnicos que nos está dando la Sugef, el Conassif y el BCCR. Son los entes autorizados para dar esos criterios técnicos y, además, me parece una barbaridad que a los diputados que no les gustan esos criterios técnicos y, simplemente, pretendan apartarse de ellos”, dijo la diputada a la prensa.

Posterior a la sesión de este miércoles, la socialcristiana aseguró a varios medios de comunicación que Sugef presentó un nuevo tope de usura a solicitud de una reunión que coordinaron los diputados que presentaron el proyecto 20.861 (Welmer Ramos del Partido Acción Ciudadana y David Gourzong del Partido Liberación Nacional).

No obstante, en la sesión del martes, el diputado Otto Roberto Vargas admitió que él realizó la solicitud escrita ante la Sugef para revisar el tope de usura del 42%.

Ramos y Gourzong explicaron que preguntaron por los microcréditos para buscar acoger el criterio de Banca para el Desarrollo y, así, poder bajar el tope de usura propuesto por Sugef.

La diputada Solís estuvo presente en esa discusión, igual que ocurrió este miércoles, para sustituir al diputado miembro de Hacendarios, Rodolfo Peña.

Varios miembros de Hacendarios acusaron a Solís de obstaculizar el dictamen por medio de las mociones. Asimismo, los diputados Ramos y Gourzong cuestionaron la fluctuación en los criterios de Sugef.

La tasa de usura de los microcréditos

UNIVERSIDAD consultó con el superintendente Alfaro sobre la tasa propuesta del 60%.

El nuevo cálculo cuenta con los mismos componentes que tiene la otra tasa de usura, no obstante, utiliza porcentajes más altos para los gastos administrativos (cuánto invierte el banco o entidad en toda su operación) y la utilidad.

Fórmula que Sugef entregó el 22 de enero

Componente  Máximo
Pérdidas crediticias esperadas (con información de tarjetas y consumo) 24,25%
Gasto administrativo  18%
Costo financiero 9,6%
Liquidez (respecto a encaje mínimo legal) 1,2%
Utilidad 8%
Tope sugerido 45,255%

Consultado sobre si mantener tasas de interés por encima del 40% para una población vulnerable y rural significa que estás personas estarán sobreendeudadas, el superintendente respondió que las operaciones de las microfinancieras son más costosas.

“Es que estamos hablando de costos administrativos muy altos que incluyen incluso asesoría básica en temas contables, administrativos y técnicos. Y es una población que no tiene otras opciones; difícilmente serían atendidos por la banca formal. Sería interesante que converse con el gerente de (Banco) Grameen, pues tienen una gran cantidad de casos de éxito: personas que empezaron con un crédito pequeño y ahora su negocio es mucho más grande y requieren más financiamiento, a pesar de esos niveles de tasa de interés”, escribió Alfaro.

Consultada con la misma pregunta, la diputada Solís reiteró que “No es lo que yo crea, es lo que dicen los criterios técnicos”.

“Puede ser que yo crea que hoy está muy soleado pero resulta que el (Instituto) Meteorológico dice que no está soleado y le creo más al Metereológico que a mí, que porque ando contenta, veo el sol donde no está el sol”, aseguró la socialcristiana.

La metodología de usura de la Sugef

Los cinco componentes en la fórmula original de la Sugef son: probabilidad de impago en créditos de consumo, gasto administrativo, costo financiero (la Sugef usó de referencia la Tasa Básica Pasiva, más un punto), la liquidez (calculada a partir de la reserva del encaje mínimo legal con la que cuentan las entidades) y un margen de utilidad (equivalente a un 15% de la suma de los factores anteriores).

Para la edición de este miércoles de UNIVERSIDAD, el economista Bernal Jiménez criticó la metodología porque utiliza el riesgo como un parámetro y no como una variable que podría cambiar con la propuesta de una tasa tope.

En la última versión de la fórmula, aparecen los mismos rubros, sin embargo, existen diferencias númericas en cada uno de ellos. De acuerdo con el documento que presentó Sugef, el cálculo de cada rubro se hizo diferente. Ahora, el riesgo de impago utiliza dos estadísticas para su estimación.

A continuación, puede ver un comparativo de las cifras utilizadas por la Sugef en las dos estimaciones que presentó a la Comisión de Hacendarios.

Fórmula que Sugef entregó en diciembre

Componente  Máximo
Incumplimiento histórico de créditos de consumo (datos del 2007 al 2018) 25,362%
Gasto administrativo  5,06%
Costo financiero 6,55%
Liquidez (respecto a encaje mínimo legal) 0,8%
Utilidad 5,7%
Tope sugerido 43,422%

Fórmula que Sugef entregó el 22 de enero

Componente  Máximo
Pérdidas crediticias esperadas (con información de tarjetas y consumo) 24,25%
Gasto administrativo  4,35%
Costo financiero 9,6%
Liquidez (respecto a encaje mínimo legal) 1,2%
Utilidad 5,9%
Tope sugerido 45,255%

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