El presidente Rodrigo Chaves no parece dispuesto a mojarse en un intento de evitar el naufragio de la Junta de Administración Portuaria y Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (JAPDEVA), aunque aseguró que mantuvo una reunión para trabajar en la obligación, definida por ley, de reestructurar la entidad.
Consultado por el periodista Oscar Mantilla sobre la posibilidad de procurar recursos para evitar que JAPDEVA se fuera a pique, el mandatario aseguró durante la conferencia de prensa en Casa Presidencial que “habrá que buscar una solución”, pero dejó claro que no está pensando en buscar recursos para la institución limonense.
“Usted dice inyectar recursos”, respondió Chaves, “¿cuántos, por qué período, de qué fuente, para hacer qué, para que los pierdan? Decir meterle recursos a JAPDEVA no es una proposición obvia, dados los hechos reales”.
La Junta está en medio de un proceso de reestructuración, luego de que la Asamblea Legislativa aprobara en el 2019 la ley 9764, en la que se estableció que la entidad debía implementar una reorganización administrativa, financiera y operativa, para asegurar su equilibrio financiero y sostenibilidad, situaciones que empezaron a complicarse luego de que entrara a funcionar la empresa APM Terminals en Moín, en febrero del 2019.
Solo a manera de comparación, APM Terminals dispone de seis grúas pórticas y 29 grúas de patio, mientras que JAPDEVA apenas en el 2018 empezó a funcionar con dos grúas pórticas, y una de ellas está dañada. A esto se refirió Chaves. “Arreglar la grúa que se dañó vale $6,5 millones, y la grúa nueva vale $7,5 millones”.
El mandatario aseguró que está monitoreando esta situación, pero aseguró que el panorama es desafiante: “Estuvimos viendo que para llegar a un punto de equilibrio con los 200 y pico de empleados que quedarán, luego de la reestructuración a la que nos obliga la ley, debemos pasar de ingresos por aproximadamente ₡10 mil millones, a más de ₡25 mil millones. ¿De dónde van a salir los barcos, a cuál tarifa, solo para conseguir un equilibrio”, mencionó Chaves.
También evidenció que la posibilidad de volver a poner a flotar a JAPDEVA puede estar en discusión: “Tenemos una institución con casi 300 empleados, que solo 80 trabajan en temas de muelles. Bueno, habrá que empezar por ver cuál es la rentabilidad”.
A lo que si cerró la puerta con claridad fue a explorar posibilidades de revisar los contratos con APM Terminals, “No podemos devolvernos con estos contratos, están firmados, nos pueden llevar a cientos de millones de dólares en multas y sanciones en arbitrajes internacionales”, declaró. Una posición que contrasta con sus declaraciones con otros contratos, como el caso de Globalvía, (ruta 27 a Caldera), donde no se mostró resignado ante lo firmado, a pesar de que ese contrato rige hasta el 2033.
