En una intensa sesión de jefaturas de fracción, la presidenta en ejercicio Rosalía Brown decidió que los diputados procurarán votar hoy la convocatoria del referendo solicitado por el presidente Rodrigo Chaves.
“Ya está marcada la ruta que definimos, por lo avanzado de la hora, solicitó a los asesores marcar la ruta para la sesión del martes 9 de julio” y levantó en la sesión, sin claridad al respecto.
Posteriormente, se aclaró que se mantenía la intención de votar un debate reglado para hoy, y dejar la organización de la agenda restante para después del receso.
En lo fundamental, la posición de la vicepresidenta Brown (Nueva República NR), apuntó a votar en esta tarde la convocatoria a referendo para el proyecto 24.364, la bautizada por el presidente Rodrigo Chaves como “Ley Jaguar”, alegando que se recibió el voto de la Sala IV en el que se declaró inadmisible la consulta de constitucionalidad que 22 diputados presentaron el 19 de junio.
«La resolución era esperar una sentencia de la Sala IV, ya llegó y debe votarse (la convocatoria). La consulta de constitucionalidad del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) es de otro proceso, la consulta ciudadana. A mi criterio, debe votarse si la Asamblea convoca o no a referendo», dijo Brown.
Se trata de una apuesta arriesgada, ya que el quórum legislativo es precario: la sesión de ayer no se pudo realizar por las ausencias de 20 diputados, entre permisos de viajes e incapacidades de salud, de cara al receso legislativo: los legisladores salen de vacaciones una semana, y regresarán hasta el lunes 8 de julio.
Empero, la intención de la fracción oficialista es votar hoy mismo la convocatoria del referendo, algo que es apoyado por las fracciones de NR y del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC). Sin embargo, su jefa de fracción, María Marta Carballo, alegó que le preocupa la insistencia de votar hoy, ya que las ausencias provocarían que no se cuente con los votos necesarios.
Por otra parte, el Partido Liberación Nacional (PLN), en principio se pronunció en favor de votar hoy, pero luego alegó que ante los argumentos del Partido Liberal Progresista (PLP) y del Frente Amplio (FA), en el sentido de que sería irresponsable votar un proyecto del que no se ha revisado su constitucionalidad, propuso una vía intermedia: esperar la consulta de constitucionalidad, o aprobar el proyecto 24.365 en primer debate, para poder consultarlo.
La oposición a una votación para hoy provino del FA, que cuestionó la decisión de la Sala IV de no permitir una consulta de los diputados, y del PLP, que incluso tiene lista una nueva consulta de constitucionalidad, con argumentos nuevos para justificar su admisibilidad.
“Votar un texto sobre el que hay dudas de su constitucionalidad es una absoluta irresponsabilidad”, afirmó el diputado Eliécer Feinzaig, quien resaltó que aunque haya dos procesos en marcha, en el caso del legislativo se está cercenando la posibilidad de consulta de los diputados.
Por su parte, la oficialista Pilar Cisneros enfatizó en que ya se cumplieron con los requisitos que se fijaron para la votación de la convocatoria, en el sentido de que se esperó una consulta de constitucionalidad, pero la Sala IV la rechazó. “No nos corresponde a nosotros decidir si es inconstitucional o no; lo que nos corresponde es decir si queremos que los ciudadanos se pronuncien”, dijo.
Se tratará de una sesión que se desarrollará calculadora en mano: el Gobierno requiere de mayoría simple para lograr el aval para el referendo, lo que implica la mitad mas uno de los presentes, algo a lo que los problemas de quórum agregan un desafío adicional.
A la sesión acudió previamente la ministra de la Presidencia Laura Fernández, quien se presentó ante los jefes para solicitarles audiencias bilaterales y anunciar que haría cambios con respecto al estilo de su antecesora, Natalia Díaz.
