¿Está en camino un acuerdo entre el Gobierno y el Partido Liberación Nacional (PLN) para aprobar el paquete fiscal que involucre la distribución de puestos del próximo directorio legislativo?
Voces de la bancada liberacionista, la mayor de oposición, niegan que haya negociaciones en esa vía. Pero el comportamiento y hasta el lenguaje corporal delata a los liberacionistas quienes se ven confiados en que los traspiés del gobierno del Partido Acción Ciudadana (PAC) y la desilusión con el cambio prometido los llevará de nuevo al poder en las elecciones del 2018.
Como cualquier partido que aspire a ganar las próximas elecciones presidenciales, al PLN le interesa que allane el terreno fiscal para gobernar con mayor facilidad, y si el costo político de las reformas se lo echa encima el actual Gobierno, miel sobre hojuelas.
Circunstancias que abonan el terreno a las especulaciones en los corrillos políticos sobre presuntos acercamientos que permitan reunir los 18 votos del PLN a los 13 del PAC para aprobar el plan fiscal que impulsa la administración de Luis Guillermo Solís.
Un acuerdo nada fácil de lograr, sin embargo, en momentos en que ya hay aspirantes a la presidencia del Congreso, tanto en Liberación como en la Unidad Social Cristiana. Estos partidos, al igual que la mayoría de la oposición, han hecho del ataque a la creación de nuevos impuestos su caballo de batalla contra el gobierno, en competencia por la simpatía popular.
Con ese panorama parece difícil hallar una salida para el atascadero en que se encuentra la reforma fiscal, de cuya urgencia nadie duda, por la necesidad que tiene el país de detener el creciente déficit fiscal, que va por un 6,2% del Producto Interno Bruto (PIB) y apunta hacia un 7% este año, pero en las soluciones que proponen unos y otros se distancian.
A la idea del posible pacto en torno al plan fiscal abonó el que el PLN empezara el año pidiéndole públicamente al gobierno a que haga una campaña explicándole a la gente la necesidad y los alcances de la reforma.
Rolando González, voz cantante en la bancada liberacionista, negó no obstante que estén en negociaciones para aprobar el plan fiscal y repartir puestos del directorio legislativo.
Lo mismo afirmó Ottón Solís, fuerte crítico del gobierno dentro del PAC pero partidario en primera línea de la reforma fiscal.
González atribuyó esas versiones a un invento de algunos integrantes de la Unidad Social Cristiana “que están desesperados por salir en los medios de comunicación”.
El tema, sin embargo, ha sido comidilla del día también en otras tiendas políticas, incluidas las verdiblancas.
URGENCIA
Como quiera que sea, en el arranque del año las reuniones y debates en Cuesta de Moras y Zapote han estado centrados en el tema fiscal.
De vuelta de vacaciones de fin de año el presidente Luis Guillermo Solís insistió ante la prensa, la semana pasada, en la urgencia de que la Asamblea Legislativa apruebe los proyectos para conjurar la brecha fiscal que el país arrastra desde gobiernos anteriores.
Insistió que la solución debe darse por la vía de aumentar los ingresos tributarios del gobierno, mediante impuestos y mejoras en el cobro de estos; la racionalización del gasto, en lo cual el gobierno ha tomado medidas de contención, afirmó.
Y añadió a esto la necesidad de una política fiscal que distribuya de una manera más justa la riqueza que se ha venido concentrando de manera escandalosa.
El país está en alerta roja por el déficit fiscal y las medidas correctivas deben tomadas durante este semestre, para evitar un descalabro de las finanzas públicas que se volvería inmanejable para el gobierno que llegue en el 2018, advirtió el mandatario.
Solís se mostró dispuesto a involucrarse en las conversaciones con las diferentes bancadas legislativas, que serán invitadas a la Casa Presidencial.
El primer encuentro fue con los diputados del gobernante Partido Acción Ciudadana (PAC), que le ofrecieron al mandatario total apoyo para el plan fiscal, dijo el jefe de fracción, Marco Vinicio Redondo.
Las demás bancadas aún no habían sido convocadas, pero el ministro de la Presidencia, Sergio Alfaro, se reunió primeramente con la fracción liberacionista, la mayor de las nueve bancadas que componen el actual Poder Legislativo (de 57 curules).
Mientras tanto, el jefe de fracción del PAC atizó las especulaciones al declarar en una entrevista que darían los votos para quien quisiera ser presidente del parlamento el próximo 1 de mayo a cambio del compromiso de votar el paquete fiscal.
En el plenario legislativo el socialcristiano Luis Vásquez aprovechó para acusar a la bancada oficialista de venderse al mejor postor a fin cargar nuevos impuestos al pueblo.
“Cada ladrón juzga según su condición”, le contestó Redondo, refiriendo a ciertos comportamientos políticos “históricos”.
El diputado oficialista puntualizó que sus palabras había que entenderlas “en el contexto de la gobernabilidad”.
“Queremos que esto funcione, y si para que esto funcione nosotros no debemos tener el directorio (legislativo), pues así será”, determinó.
Y es que para el PAC es remota ahora la posibilidad de retomar el control de la presidencia legislativa que perdió en la actual legislatura, debido al escaso número de votos que tiene la fracción, debilitada además por divergencias internas.
Mientras tanto, el panorama visto con lente liberacionista lo dibujó en el plenario Antonio Álvarez Desanti, diciendo que “Liberación Nacional ha sido un partido responsable y se prepara para ser gobierno de la República a partir del año 2018, y no queremos recibir un gobierno que vaya a estar en situación difícil”.
“Por eso estamos dispuestos a poner el grano de arena que sea necesario para solventar la situación fiscal del país, pero con una visión integral de lo que debe ser esa reforma en materia de finanzas públicas”.
Y para avanzar la reforma fiscal en Costa Rica, es fundamental la reforma en materia del gasto.
“Esa es la parte que estamos echando de menos, porque no hemos visto la decisión del Gobierno de la República para avanzar en la reforma de empleo, ni en la reforma de pensiones”, una condición indispensable para poder avanzar en el cambio de los impuestos existentes en Costa Rica, remarcó Álvarez.
El ministro Alfaro reconoció que los proyectos de transformación del impuesto de renta y el impuesto al valor agregado (IVA) requieren de una discusión más profunda, por lo que no esperan una pronta aprobación. Pero sí esperan que avancen pronto otros cuya discusión está adelantada en comisión legislativa, como el combate al fraude fiscal.
El viceministro de Hacienda, Fernando Rodríguez, recordó que en el Congreso están presentados ocho proyectos para atacar el problema fiscal, de los cuales solo ha sido aprobado el de lucha contra el contrabando.
De los restantes siete, como el proyecto contra el fraude fiscal, algunos llevan bastante avance en su discusión con los diputados, por lo que esperarían que se logre aprobarlos pronto, ojalá este mes, comentó Rodríguez, figura clave del Ministerio de Hacienda en las negociaciones para impulsar estos proyectos.
Entre los “detalles” que han generado dudas mencionó el acceso al registro de accionistas de sociedades que se busca lograr con ese proyecto, y que resulta crucial para un control efectivo de la evasión y el lavado de dinero tal y como lo señalan organismos internacionales.
Una mención que enfureció a las cámaras empresariales, que en conferencia de prensa conjunta la semana pasada lo acusaron de haber mentido al decir que esa era una exigencia de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos), a la que aspira entrar Costa Rica. Por tal motivo le “retiraron la confianza” al funcionario y anunciaron que no se sentarán más con él en mesas de negociación.
Mientras tanto, Gerardo Vargas, jefe de fracción del Frente Amplio (FA), fue el siguiente líder parlamentario en reunirse con el ministro de la Presidencia.
Vargas dijo que el trabajo legislativo está enfocado en el tema fiscal, que es lo que está convocado en las actuales sesiones extraordinarias del Congreso (en las que el Poder Ejecutivo define la agenda).
Sin embargo, el FA aspira que se pueda avanzar también en otros proyectos de su interés. Tales son el proyecto de salario mínimo, el de arrendamientos y el fortalecimiento de la inspeccion laboral, que “son sumamente importantes para el país”.
En cuanto a las leyes fiscales dijo haber sentido un ambiente muy positivo, “con ganas de aprobar cosas”, en la Comisión de Hacendarios, encargada de dictaminarlos.
VÍA RÁPIDA
Respecto a la polémica propuesta que hizo el diputado Ottón Solís, de que la reforma fiscal se apruebe por vía rápida en el plenario legislativo, Vargas dijo que el FA nunca ha estado anuente a la vía rápida, “que es un procedimiento que se utiliza para atropellar los proyectos”. No obstante, esperaría a ver si el Gobierno respalda esa posición de Ottón Solís, y a partir de ahí valorarían su posición.
La idea de la vía rápida en cambio recibió un rotundo no de parte del liberacionista Rolando González, que la catalogó de “absurda”.
“No hay ninguna condición para que la Asamblea le de vía rápida a un paquete de impuestos, ni siquiera está en consideración en este momento”, aseguró.
Primero contención del gasto
El jefe de fracción del PLN, Julio Rojas, afirmó que antes de ver impuestos, quieren ver acciones concretas del Gobierno en contención del gasto y “ver el liderazgo de ellos aquí generando consenso en la Asamblea Legislativa”.
“Tenemos claro que el tema de los impuestos no es un tema que vayamos a abordar prontamente, en el tanto no sepamos cuál es el pensamiento que tiene el Gobierno en cuanto a empleo público, pensiones, salarios, estrategia de contención del gasto; entonces, falta mucho por hacer por parte del Ejecutivo para llegar a ese punto (impuestos)”, consideró.
¿No están ya las propuestas del Gobierno en los proyectos de ley presentados?
-Es que es una lista de proyectos que están en la Asamblea Legislativa. Ahora, la explicación y la exposición de motivos de por qué quieren más impuestos y por qué envían esos impuestos me parece que no solo los diputados deben saberlas, sino la ciudadanía costarricense.
¿El Ejecutivo no les ha expuesto a ustedes eso?
Creo que están en esos procesos y esperamos que cuando llamen a las fracciones será para explicar.
Avances y espectativas
De acuerdo con el ministro de la Presidencia, Sergio Alfaro, el Gobierno es consciente de que los proyectos de impuestos de renta e impuesto al valor agregado (IVA) requieren una discusión más profunda, y por ahora no espera que sean aprobados pronto en la Asamblea Legislativa.
Sí espera avance en otros que están bastante discutidos y solo tienen pendientes algunos “poquitos” detalles, como el proyecto contra el fraude fiscal.
Otro de los proyectos que impulsa el Ejecutivo y podría tener consenso suficiente para ser votado, “ojalá en el presente mes”, es el de caja única. Con este se busca optimizar el manejo de los superávits contables de las instituciones, los cuales hoy se acumulan en el tiempo y se vuelven superávits acumulados de miles de millones de colones, y eso afecta las cuentas nacionales.
Pero entre las prioridades de Zapote no solo están las leyes fiscales, sino que otro proyecto importante para el Ejecutivo es el de modernización del Instituto Costarricense de Ferrocarriles. El objetivo es darle a la entidad la libertad de ejecución y las herramientas necesarias para devolverle al servicio de ferrocarril la agilidad que fue perdiendo tras su cierre técnico en 1995, explicó el jerarca.
Por otro lado, el Gobierno ha propuesto la elaboración de un proyecto de ley sobre empleo público, que regule el otorgamiento del beneficio de las anualidades, a lo que se suman otras propuestas de ley que están en la corriente legislativa, como la que busca ponerles tope a las pensiones, y otra de la Unidad Social Cristiana para ponerles un tope a las remuneraciones de los funcionarios, señaló Alfaro.
A su vez, Fernando Rodríguez, viceministro de ingresos, recordó que en la Asamblea Legislativa hay siete proyectos presentados para resolver el problema fiscal.
“Hemos puesto una serie de proyectos en manos de los diputados para que se discutan y se aprueben, ojalá pronto, y ahora esperamos que sea el proceso de negociación el que venga y esos proyectos se vayan concretando”, comentó.
Informó que falta por presentar un proyecto más, el de responsabilidad fiscal, que estaría para febrero.
Fila de proyectos
El gobierno ha presentado a discusión de la Asamblea Legislativa ocho proyectos relacionados con materia fiscal, de los cuales solo se ha aprobado uno: el de lucha contra el contrabando.
Están en discusión el proyecto de lucha contra el fraude fiscal, el proyecto para volver a crear el impuesto a las personas jurídicas (la Sala Constitucional anuló el que estaba vigente), el proyecto para regular las exoneraciones fiscales, otro para controlar las transferencias que se hacen a través del sistema de caja única del Estado; un proyecto para reordenar las pensiones con cargo al presupuesto nacional, y los proyectos de impuesto a la renta e impuesto al valor agregado (IVA) que sustituiría el actual impuesto de ventas.
