Los niveles de participación en el mercado laboral costarricenses continúan cayendo y alcanzaron en el pasado trimestre (diciembre 2023-enero y febrero 2024) su nivel más bajo en, al menos, diez años.
Así lo evidenciaron los resultados de la Encuesta Continua de Empleo que fueron divulgados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).
En este último período, en que solamente el 55.8% de la población mayor 15 años estuvo ocupadas (tienen un trabajo o empleo) o desempleada, pero buscando empleo.
UNIVERSIDAD comparó los resultados de la reciente encuesta con los mismos rubros trimestrales desde el 2014 y encontró que el nivel más bajo de participación en el mercado laboral, es el actual.
De hecho, si se consideran sólo las tasas anuales de participación en relación con este último trimestre, el país está en su punto más bajo jamás registrado, de acuerdo con los datos que analiza y hace públicos la Organización Internacional del Trabajo y el Banco Mundial.
Cabe señalar además que estos bajos niveles de participación están afectando especialmente a las mujeres, de quienes solamente el 42,7% están ocupadas o buscando empleo, mientras que el 68,9% de los hombres participa del mercado laboral.
El INEC informó en su comunicado de resultados que la disminución interanual de estos indicadores es estadísticamente significativa y representa un 2.5% y para las mujeres de 3.5%.
En correspondencia con esta reducción del mercado laboral, que implican que miles de costarricenses salieron de la fuerza laboral – pues por ejemplo, dejaron de buscar empleo tras mucho tiempo de no encontrar o debieron dedicarse a labores de cuido de familiares – las tasas de desempleo y subempleo se han disminuido.
Así, desde esta caída constante de la participación -que empezó a mediados del 2022- los niveles de desempleo han caído y la tasa se ubicó en el pasado trimestre en 7.8%, mientras en el mismo momento del año pasado estaba en 11%. También, el nivel de subempleo pasó del 7.8% al 3.6%.
Es necesario recalcar que estos resultados aparentemente favorables sólo se explican por la reducción de la participación pues en la práctica, el año pasado había 124.734 personas menos fuera de la fuerza de trabajo y entre año y año la cantidad de población ocupada solamente aumentó en 9.981 personas.
