Los diputados Johanna Obando del Partido Liberal Progresista (PLP), Daniel Vargas y Jorge Antonio Rojos y David Segura del Partido Progreso Social Democrático (oficialismo) y Nueva República enterraron la posibilidad de que los trabajadores del sector privado tuvieran tres semanas de vacaciones, al votar en contra del proyecto N°23.904 en la Comisión de Asuntos Jurídicos de la Asamblea Legislativa.
La iniciativa que fue presentada por el diputado del Frente Amplio, Ariel Robles y apoyada por toda su bancada, pretendía otorgar tres semanas de vacaciones después de 49 semanas laboradas, en contraposición con las dos semanas después de cada 50 semanas que establece actualmente el Código de Trabajo.
El proyecto contemplaba la adecuación de varios artículos del Código de Trabajo, sin embargo, con cuatro votos a favor y cuatro en contra (de los diputados señalados), el proyecto deberá ser archivado.
De acuerdo con cifras de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) un trabajador asalariado formal con más de un año de antigüedad en América Latina tiene en promedio unos 14 días de vacaciones pagadas al año, en contraste con el promedio de 20 días en los países de altos ingresos de la OCDE, organización a la cual pertenece Costa Rica.
Pero más allá de OCDE, estudios de OIT indican que en Brasil, Panamá y Perú cuentan con treinta días de vacaciones pagadas, y en otras naciones, el promedio son 14 días, pero conforme el trabajador cumple años de servicio se incrementan los días otorgados.
Por ejemplo, bajo la jurisdicción hondureña es de 10 días de vacaciones tras la finalización del primer año de empleo, 12 días tras el segundo año, 15 días después de tres años de servicio y 20 días hábiles a partir de cuatro años de servicio.
O en Paraguay, las vacaciones son un derecho que nace después de cumplido el primer año de trabajo, y se incrementan con la antigüedad. Para trabajadores de hasta cinco años se otorga 12 días corridos; entre 5 y 10 años de antigüedad, 18 días corridos y con más de diez años de antigüedad, 30 días corridos.
De acuerdo con el diputado Ariel Robles este proyecto tendría un impacto en toda la población costarricense y una discusión sobre una iniciativa que beneficia a la totalidad del país, merecería al menos es tener justificación de fondo de los motivos por los cuales, los diputados de la comisión votaron en contra.
“Me pregunto, cuáles son los razonamientos que los hace desistir de una oportunidad para que el sector trabajador de este país tenga tres semanas de vacaciones y no dos como se establece desde los años setenta en el siglo pasado. Los diputados sí nos damos una semana a medio año de receso, a finales de año nos aprobamos tres semanas, más tres días de Semana Santa, me pregunto por qué nosotros sí tenemos el derecho y el resto de los trabajadores no”, cuestionó Robles.
