La defensora de los habitantes, Montserrat Solano, dejará su puesto a inicios de marzo ante “propuestas de carácter laboral fuera del sector público”, informó esta tarde la propia Defensoría.
Ahora, Solano deberá redactar un informe de su gestión como defensora que deberá entregar a la Asamblea Legislativa, que le nombró en el puesto.
Al mismo tiempo, la Defensoría indicó que Solano continuará atendiendo la revisión de expedientes en trámite, así como el liderazgo de la institución como directora de la misma.
Solano calificó el ejercicio de su cargo como como un motivo de “honra” y “compromiso” con la realidad de “muchos costarricenses con quienes el Estado, históricamente, ha quedado en deuda”; algo que pudo enfrentar desde el 9 de septiembre de 2014, cuando fue seleccionada por el Congreso.
“La Asamblea Legislativa me honró con la posibilidad de poder servir al lado de un equipo ejemplar, en particular con un Defensor Adjunto excepcional (Juan Manuel Cordero), y quienes confío continuarán resguardando el mandato de la institución de defender los derechos humanos de todas las personas y frente a cualquier vulneración”, apuntó.
Solano asumió sus funciones el 22 de septiembre, cuando llegó para suplantar a la también exdiputada y exviceministra de Vivienda, Ofelia Taitelbaum; quien dejó el cargo en julio de 2014 ante cuestionamientos que desembocaron en investigaciones judiciales y la acusación de la Fiscalía por 104 delitos.
Durante su gestión, Solano enfrentó conflictos en distintas materias, especialmente en materia de tarifas, poblaciones minoritarias y trabajo.
Ante estas materias, la Defensoría indicó que la funcionaria “procuró dejar preparada a la institución para el abordaje de situaciones que atentan contra los derechos humanos mediante el uso de instrumentos del derecho internacional de los derechos humanos”.
En su periodo también se designó a la Defensoría como en la Secretaría de la Alianza Global de Instituciones Nacionales de Derechos Humanos (GANHRI) hasta marzo de 2019.
Según la entidad estatal, Solano además coordinó acciones en conjunto con la sociedad civil en campos como la violencia obstétrica, la educación vial en los colegios, los mecanismos de consulta a pueblos indígenas y campañas contra el acoso callejero.
También se realizaron trabajos en el plano ambiental y para la vigilancia de la calidad de los servicios públicos, como fue recientemente el caso de la liberación del mercado en términos de telefonía e internet móvil.
Datos de la encuesta de opinión política del Centro de Investigación y Estudios Políticos (CIEP) de la Universidad de Costa Rica (UCR) (en enero 2016) destacaron a Solano como la funcionaria pública con una mejor imagen, aunque su reconocimiento público era menor que el de otras figuras.