País Florida Ice and Farm movió el tipo de cambio con su reestructuración de deuda

Mercado cambiario tico mostró su vulnerabilidad

Compra de dólares obligó al Banco Central a intervenir nuevamente.

Reestructurar o ‘refundir’ deudas, para decirlo en lenguaje coloquial, es una operación común para la población costarricense que, por ejemplo, hipotecó su casa, se endeudó por motivos de salud y además se le fue la mano con el uso de tarjetas de crédito para consumo corriente.

Sin embargo, cuando una de las empresas más grandes del país compra dólares en el pequeño mercado local para pagar una importante deuda en el extranjero, la operación puede disparar el tipo de cambio si el Banco Central de Costa Rica (BCCR) no interviene a tiempo para impedir que las expectativas del público desaten una espiral de especulación.

Esto es lo que ocurrió la semana pasada, cuando los días miércoles 28 y jueves 29 de junio se observó, en el Mercado de Monedas Extranjeras (Monex), una demanda especialmente alta, que llevó al BCCR a ofrecer un mayor monto de divisas con el fin de que el precio del dólar no se disparara nuevamente.

Fifco es el ‘gigante’ que a finales de junio salió a comprar una suma importante de dólares. Sin embargo, otras empresas grandes podrían hacerlo en el futuro

Como informó este banco en un comunicado de prensa, en esos dos días se transaron US$43,8 millones, un monto que casi triplicaba el volumen promedio diario que suele negociarse en ese mercado, si nos guiamos por los últimos doce meses.

Según pudo determinar UNIVERSIDAD, el Banco de Costa Rica (BCR) realizó una compra de dólares para el conglomerado costarricense Florida Ice and Farm Sociedad Anónima (Fifco), con el fin de esa operación era que la empresa pagase una deuda bancaria en el exterior del país (ver el recuadro: “El gigante que salió de compras”).

Sobre esto, preguntamos tanto a la empresa Fifco como al BCR. De sus respuestas no se pudo establecer qué porcentaje de los $43,5 millones transados entre miércoles y jueves corresponden a la operación mencionada.

Gisela Sánchez, Directora de Relaciones Corporativas de Fifco, respondió escuetamente que “como parte de la estrategia de revisión continua de nuestro portafolio, esta semana se implementó una reestructuración de los pasivos de la empresa”, pero no reveló el monto de la deuda reestructurada ni confirmó que la operación se hiciera mediante el BCR.

Por su parte, Andrés Víquez, subgerente general del BCR, no rechazó que fuese este banco el ejecutor de la compra de dólares y se limitó a responder que “en relación con operaciones de clientes del Banco tenemos un deber de confidencialidad y no podemos referirnos a las consultas formuladas”.

Lo cierto es que la ágil y oportuna intervención del BCCR fue facilitada por un acuerdo de su Junta Directiva puesto en efecto en mayo, cuando ocurrió una gran alza especulativa del dólar. En ese momento, ya el Central anticipó que en el futuro intervendría colocando recursos de las reservas monetarias del país en dólares incluso en las operaciones diarias del Monex, si esto fuera necesario, para detener las espirales en el precio de la divisa.

¿Mercado vulnerable a los grandes?

A pesar de que la compra de dólares para Fifco no disturbó la normalidad del precio del dólar gracias a la intervención del BCCR, el acontecimiento sí desató varias preguntas. ¿Es correcto que un banco público realice transacciones por montos tan significativos para que un ente privado exporte esos dólares al extranjero para pagar deudas? ¿Y que para re-equilibrar el mercado cambiario local ante las consecuencias de esta operación, el Central deba utilizar las reservas en dólares del país? ¿Quienes conocen de antemano que una compra importante de dólares se realizará, no tienen acaso una ventaja sobre el resto de costarricenses para comprar los dólares al mejor precio y venderlos al alza?

El economista y expresidente del BCCR, Jorge Guardia, manifestó su preocupación por la participación del banco público.

“Se trató de una transacción legítima por parte de una empresa grande y recurrió para ello a un banco estatal. Pero debieron haberla previsto, tanto la empresa, para hacer la compra gradualmente, como el intermediario. ¿Hizo bien el Banco Central al intervenir? Sí, yo hubiera hecho lo mismo. Para eso son las divisas. Porque no se trata de un flujo de divisas permanente que vaya a afectar los términos de intercambio. Es una aplicación de una sola vez. Si se hubiera dejado subir el dólar, tres días después el precio hubiera bajado y se habría causado una gran conmoción en el mercado cambiario”, dijo en un comentario divulgado por Telenoticias.

Eduardo Prado, gerente del BCCR, coincidió con Guardia en que, al tratarse de una operación puntual, “no puede catalogarse como fuga de capitales”. Además, dijo que las reglas por las que operan los bancos públicos no son diferentes de las que siguen los bancos privados.

Esas reglas son las estipuladas en la muy reciente reforma del Reglamento para las Operaciones Cambiarias de Contado, aplicadas por el BCCR, “las cuales establecen algunas restricciones sobre la posición neta en moneda extranjera de los intermediarios cambiarios y su variación diaria, precisamente para evitar la especulación”.

“El Banco Central está atento a situaciones particulares como esta, con el fin de tomar medidas para que su realización no tenga efectos negativos sobre el comportamiento ordenado del mercado cambiario”, agregó el funcionario.

Aunque no caracterizó al mercado cambiario costarricense como particularmente vulnerable debido a su pequeño tamaño y al hecho de que pocos actores dominan el juego, sí se refirió a este como “poco competitivo”.

“Cualquier mercado puede ser afectado por transacciones que tengan en términos relativos un tamaño considerable. El mercado cambiario costarricense es poco competitivo y, por lo tanto, una operación que represente un alto porcentaje del volumen de negociación diaria como las observadas en los días 28 y 29 de junio anterior pueden afectar de manera importante los flujos y la determinación del tipo de cambio”, agregó.

Debido a lo anterior, explicó que el Banco Central “ha manifestado que intervendrá en el Monex cuando detecte un movimiento abrupto en el tipo de cambio y que este no sea consecuente con las variables de mediano y plazo que lo determinan, lo que entre otras cosas se podría dar por transacciones relativamente altas. Este fue el caso de las operaciones mencionadas, en las cuales al haber una demanda extraordinaria por parte de un intermediario cambiario, el Banco Central intervino para mantener el comportamiento ordenado del mercado”, respondió.

Además, hizo un llamado a la prudencia de los grandes participantes en la compra y venta de dólares.

“El Banco Central de Costa Rica es respetuoso de la relación que los intermediarios cambiarios tienen con sus clientes y la manera en cómo gestionan sus servicios; sin embargo, la prudencia llama a que tanto intermediarios cambiarios como clientes planifiquen su participación en este mercado tomando en consideración su volumen y los patrones de estacionalidad que le caracterizan”, dijo.

Javier Cascante, jefe de la Superintendencia de Entidades Financieras (Sugef), también aludió a que la reciente legislación del BCCR se estableció en previsión de operaciones como la ocurrida a finales de junio.

“De manera general, es correcto afirmar que la regulación financiera establece que las entidades financieras deben gestionar los riesgos de liquidez y el manejo de su tesorería. Es por ello que la reciente regulación de riesgo cambiario las obliga a que definan su posición “estructural” y su cartera de “negociación”. Esto definitivamente ayudará a mejorar la programación de sus necesidades de divisas y su oferta en el mercado cambiario”, afirmó.

Además, consideró que el mercado cambiario tico presenta riesgos particulares.

Eduardo Prado, gerente del BCCR: “El mercado cambiario costarricense es poco competitivo. Una operación que represente un alto porcentaje del volumen de negociación diaria puede afectar de manera importante los flujos y la determinación del tipo de cambio”

“Precisamente por la naturaleza del mercado cambiario es que el BCCR y la Sugef han emitido recientes regulaciones que se espera brinden mayor estabilidad al sistema financiero y a sus usuarios”, agregó.

Así las cosas, para la ciudadanía de a pie que no maneja información ‘de adentro’, es bueno el siguiente consejo: la próxima vez que el volumen de dólares transados en el Monex se dispare, no salga corriendo a comprar esa moneda creyendo que así le sacará el jugo a sus colones. Espere a que el Central intervenga y a que la marea baje.



El gigante que salió de compras

El conglomerado costarricense Florida Ice and Farm Company Sociedad Anónima (Fifco), con la cédula jurídica 3101000784, está constituido con un capital social de 93 mil 734 millones 43 mil 400 colones.

Su Junta Directiva está integrada Wihelm Steinvorth Herrera (Presidente), Rodolfo Jiménez Borbón (Vicepresidente), José Rossi Umaña (Tesorero), Arturo Loría Agüero (Secretario), Sergio Egloff Gerli (Vocal), Huber André Garnier Krusse (Vocal), Edna Camacho Mejía (Vocal), Roberto Truque Harrington (Fiscal propietario) y Maribel Mora Salazar (Fiscal suplente).

Su sitio web indica que está compuesto por las subsidiarias Florida Bebidas y Alimentos, integrada por Florida Bebidas, Industrias Alimenticias Kern’s, Musmanni y North American Breweries; Florida Inmobiliaria/Hospitalidad, que desarrolla proyectos inmobiliarios en Costa Rica, Reserva Conchal, North Peninsula Holdings, entre otros; y Florida Capitales, con inversiones en la producción de envases y negocios cerveceros en Centroamérica.

Opera en siete destinos: Ecuador, Estados Unidos, El Caribe, Colombia, Centroamérica, Australia y Suiza.

En conjunto, laboran allí más de 6.500 personas que producen o comercializan más de 1.500 productos. Cuenta con 2.200 accionistas.

En sus balances reportó que a setiembre de 2016 pagaría ¢10 mil 975 millones de impuesto sobre la renta, esto es, un poco más del doble de lo que habría pagado en setiembre de 2015, cuando la cifra fue de ¢5.665 millones.

Fuentes: Equifax y www.florida.co.cr



 

 

 

 

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