El miércoles por la tarde, durante su visita sorpresa al Liceo Rural La Palma en Puriscal, el ministro de Educación Pública, Édgar Mora, señaló que abordará la brecha entre educación rural y urbana con el fin de que los jóvenes de ambas áreas puedan tener acceso a las mismas oportunidades académicas y se puedan insertar a un mercado laboral.
De acuerdo con Mora, la brecha educativa puede disminuir a través de la convergencia entre la producción agrícola, la tecnología y la educación, pues el problema que existe en el país es que no se tiene conocimiento de la demanda de empleo.
“Este es un país que se ha urbanizado muy rápidamente y hay cada vez más tendencia al uso de la tecnología. La tecnología no parece haberse engarzado bien con el proceso de producción agrícola o agropecuaria y eso quizá es un error tanto de la parte productiva como de la parte educativa en el mundo entero. En el mundo, una de las cosas que más incita a la innovación en términos tecnológicos es la producción agrícola y requiere de evolucionar los procesos productivos”, señaló el ministro.
Para el jerarca de Educación, la urbanización y la falta de oportunidades laborales en el lugar de nacimiento o crianza han hecho que los jóvenes se vayan hacia grandes ciudades lejos de su hogar.
“Suele suceder que aquellos que tienen más clara su línea académica y formativa buscan opciones más alejadas del lugar donde nacieron; y por otra parte la educación se queda con los chicos que se mantienen en la zona donde nacieron pero no proveyéndolos de todas las posibilidades laborales que el colegio y la escuela les ofrece”
“Si aquí hay personas jóvenes que podrían vivir bien en el lugar en que nacieron yo creo que lo harían. El asunto es que si no hay fuentes de trabajo cercanas en el momento en que ellos se emancipan se tienen que ir”, explicó Mora.
Mora además indicó que las escuelas y colegios deben generar conocimiento en habilidades especiales para poder insertarse en un mercado laboral y no solo preocuparse porque los estudiantes entren a la universidad.
Conversatorio en Puriscal
Durante su estancia, Mora ingresó a las aulas donde los alumnos un poco asustados -por su imprevista visita- contestaron sus preguntas. En un grupo de undécimo, el ministro les preguntó qué querían estudiar y les incitó a que continuaran estudiando.
Luego de su visita a las clases, tres funcionarios de Vida Estudiantil del Ministerio de Educación Pública (MEP) junto al ministro, realizaron también un conversatorio con 22 estudiantes del Liceo. Durante la actividad, los alumnos se presentaron e hicieron preguntas a Mora sobre su gestión.
Las preguntas iban y veían en el círculo que conformaron los jóvenes y el jerarca. Algunos de los cuestionamientos giraron entorno al ¿por qué decidió ser ministro?, ¿qué es lo que más le gusta de ser ministro?, ¿piensa hacer cambios?, ¿cuál es su objetivo principal? , y si ¿ha pensado cambiar la metodología de estudio en los colegios?, entre otros.
Entre las respuestas, el recién designado ministro de Educación comentó que “me encuentro feliz por el contacto con profesores y maestros”. Además, que sus prioridades radican en “cierta armonización en el sistema pues el sistema costarricense ha confiado más en el autoritarismo que en la unidad o la armonía entre unidades”.
Además les explicó que él tiene ideas, pero quería escuchar tanto las de ellos como la de profesores y directores y que se tiene “que dejar de ver esa separación entre lo urbano y rural, ahora deben de converger.
Asimismo, Mora también conversó con seis profesores del centro educativo, quienes le contaron algunas de sus experiencias trabajando en el colegio.
El director del Liceo, Luis Carlos Alpízar, comentó que un momento inolvidable fue “cuando vi a los estudiantes subirse por primera vez a la buseta”. Actualmente, la institución cuenta con un autobús que brinda servicio de transporte a 52 estudiantes que viven en lugares más alejados del colegio.
Por otra parte, uno de los profesores indicó que la mayor enseñanza que ha recibido de los estudiantes ha sido la tolerancia, sacrificio y deseo de superarse, etc.
El orientador mencionó que para muchos estudiantes del colegio su único sueño radicaba en “tener una motocicleta” y que era urgente cambiar eso.
No hay mucho mercado laboral
El director de la institución, tuvo una reunión con el ministro, en la que le mostró las estadísticas de la institución. De acuerdo con Alpízar, un estudiante que se gradúa del colegio no tiene un gran mercado laboral para desarrollarse y solo se puede dedicar a trabajar en agricultura o supermercados.
Alpízar indicó también que en solo 10 años, el porcentaje de alumnos que decidió ingresar a la universidad subió considerablemente.
En el 2007, solo 10% de los estudiantes que ganó bachillerato optó por estudiar en una universidad; mientras que el año pasado 57% de los graduandos decidió seguir con sus estudios universitarios.
Actualmente, el Liceo Rural La Palma cuenta con 80 estudiantes.
Visitas Sorpresa
La semana pasada, apenas unas horas después de haber iniciado su gestión, el ministro de Educación, decidió visitar de manera sorpresiva algunas instituciones educativas de la provincia de Puntarenas.
Durante los siguientes tres meses, el ministro prevé visitar otras instituciones del país para así conocer -de primera mano- las realidades de los miembros de los centros educativos.
