La empresa constructora Also Frutales S.A., un brazo de Constructora H Solís SRL, contaba con la asesoría legal de ni más ni menos que un juez del Tribunal Administrativo de Transportes del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT).
Se trata del juez instructor Mario Quesada Aguirre y la relación con la empresa consta en el expediente del caso Cochinilla.
A través de varias intervenciones telefónicas, se estableció la relación de Juan Carlos Abraca Quesada (gerente de operaciones), Alejandro Acosta Mora, Sonia Solís -todos de la empresa Also Frutales-, y Mario Quesada Aguirre, quien ofreció asesorías “para beneficiar a los empresarios en licitaciones con el Estado, a cambio de una retribución económica”.
En la acusación se señala que entre los meses de abril y agosto de 2020, Quesada Aguirre “aprovechando ilegítimamente el ejercicio de la función pública, que conlleva el pago de prohibición” para su cargo de juez, “acrecentó su patrimonio, ya que brindó servicios profesionales privados remunerados de abogacía a la empresa Also Frutales, con el agravante de que algunas veces lo hizo con superposición horaria”.
El trabajo de Quesada para Also Frutales S.A. incluyó la formulación de documentos relativos a impugnaciones o peticiones ante el Conavi o la Contraloría General de la República, a propósito de las licitaciones de obra pública en las que participaba la empresa, la cual pertenece a Alejandro Acosta Mora y Sonia Solís Vargas, ambos hermanos respectivamente de Roberto Acosta Mora y Mélida Solís Vargas, dueños de la conocida empresa constructora Hernán Solís.
La acusación apunta que Juan Carlos Abarca, gerente de Also Frutales, fue “enlace directo entre los dueños de Also Frutales y Mario Quesada Aguirre”. Entre los trabajos de asesoría, se apunta la contestación de una apelación planteada por constructora Hermanos Herrera contra una adjudicación en favor de Also Frutales, así como varias apelaciones, respuesta a reclamos por un caso de tala ilegal “y hasta la modificación de un contrato entre MECO y Also Frutales que no es más que una colusión de empresas”.
“Abogado de planta”
Mario Quesada Aguirre era “el abogado de planta” de Also Frutales, pues “sin estar en planilla por razones lógicas, es quien se encarga de litigar en favor de la constructora dentro de los procesos de contratación donde esté involucrada”.
Un ejemplo de ello es una intervención teléfónica de abril de 2020, en que Juan Carlos Abarca llamó al teléfono de la esposa de Mario Quesada, quien atendió. Abarca lo trata de “Marito” y le plantea los resultados de una reunión que tuvo con funcionarios del Banco Nacional, respecto a un diferendo por cambios en un trabajo contratado.
“Finalmente, Mario siguió aconsejando a Juan Carlos y le indicó que tenía que decir en razón de todo lo conversado que todo eso les generaba daños y perjuicios y que en razón de eso les tenían que pagar la utilidad que estaba, además lo que habían dejado de hacer, los gastos administrativos, así como el pago del personal que contrató para hacer esos trabajos aunque no los hicieran”, consigna el informe.
Posteriormente el mismo día, Abarca llamó a Alejandro Acosta, uno de los dueños de Also Frutales, y le expuso lo conversado con Quesada.
Ese mismo mes se da otro ejemplo de asesoría legal, cuando Juan Carlos Abarca le informó a Alejandro Acosta que ya había conversado con Mario Quesada, quien le había informado “con base a los documentos que él (Juan Carlos) le había enviado”, que existían anomalías con respecto a la participación del Director Ejecutivo del CONAVI, Mario Rodríguez, en la anulación de una licitación que ya les había sido adjudicada. Por ello Mario Quesada “elaboraría una nota en la que contestaría esa serie de anomalías cometidas y que estaban afectando a la empresa Also Frutales, con el fin de evitar que se llevara a cabo esa anulación”.
