La inseguridad y la delincuencia saltaron en este año al primer lugar de los mayores problemas del país y duplican en menciones al costo de la vida y al desempleo, situaciones de índole económica que siguen causando preocupación en las personas y que han ocupado las principales posiciones después del shock de la pandemia en 2020.
Un 35% de las personas encuestadas por CIEP-UCR indicaron que la inseguridad es la mayor angustia nacional en este momento, mientras 18% señaló que es el costo de la vida y la situación económica y un 16% apuntó a la falta de trabajo, ahora que el desempleo está en 11% y miles de costarricenses han declinado de buscar un puesto laboral.
La última vez que la inseguridad se situó como principal problema del país fue a finales del gobierno de Luis Guillermo Solís, en marzo de 2018, según el historial de encuestas del CIEP-UCR.
Después de comprobarse que el 2022 fue el año más violento de la historia del país y que este 2023 lo va superando en cifras de homicidios, la inseguridad por la criminalidad dejó de ocupar el tercer lugar o cuarto y se registra ahora como la mayor angustia de la gente, a pesar de los mensajes oscilantes que ha dado el gobierno de Rodrigo Chaves.
La encuesta se realizó en la semana entre el 12 y 21 de abril, durante la cual el presidente Chaves anunció un plan para combatir la inseguridad, centrado en una medida de aumento de policías en las calles que 48 horas después debió suspender por las protestas de oficiales enojados con la intención de recortarles días libres.
Esto ocurrió después de que la Unión de Cámaras Empresariales (Uccaep) pidió declarar “emergencia nacional” por la criminalidad y advertir los perjuicios que tiene también para la actividad económica, por la mala imagen para potenciales turistas y por asaltos en los negocios o costos en que deben invertir para su seguridad.
Además, la Embajada de Estados Unidos recordó en marzo que advierte a sus ciudadanos sobre la necesidad de tomar medidas en Costa Rica para evitar ser víctimas del crimen, mientras en la Asamblea Legislativa el diputado presidente Rodrigo Arias convocó a un grupo para plantear reformas legales necesarias contra la delincuencia.
Chaves reconoció en 2022 que la criminalidad “se nos salió de las manos”, pero después dijo que su gobierno no tiene responsabilidad por los indicadores de ese año y en 2023 ha dicho que el problema viene del pasado y señala culpas del Poder Judicial y de la Asamblea Legislativa, además de culpar a medios de comunicación porque “quieren hacer ver una crisis”.
La capacidad del Gobierno de resolver este y otros problemas fue el objeto de una de las preguntas de la encuesta y los resultados muestran que seis de cada días desconfían (23% dice que confía nada y 38% dice confiar poco), mientras 26% dice tener “alguna” confianza y solo 13% contestó que “mucha”.
“Este indicador se ha deteriorado, porque según los datos de noviembre 2022, el 49% indicaba ninguna o poca confianza, frente a un 51% (que) señala 2 tener mucha y algo de confianza en que el gobierno actual pueda resolver los principales problemas del país”, señala el informe de la encuesta CIEP-UCR de este mes abril.
En agosto era un 41% de encuestados el que creía que el gobierno de Chaves podría resolver los problemas y un 33% indicaba que los podrá resolver parcialmente, ante un 26% que señalaba que de ninguna manera.
Solo PPSD y FA tienen saldo positivo en opiniones de la población sobre la criticada Asamblea Legislativa
La bancada de Progreso Social Democrático (PPSD) y Frente Amplio (FA) son las únicas que reciben un saldo favorable entre opiniones positivas y negativas de la ciudadanía sobre una Asamblea Legislativa hundida en la desconfianza popular y lejana a la población, al punto de que solo uno de cada diez ciudadanos sabe identificar algún diputado con su provincia correcta.
Con opiniones favorables de parte del 29,6% la población, los diputados y diputadas de Frente Amplio superan incluso a la bancada representante de Rodrigo Chaves, Progreso Social Democrático (PPSD), que recibe un 25,6%, seguida de cerca por el Partido Liberación Nacional (PLN, con 25,1%) y Partido Unidad Social Cristiana (PUSC, con 24,7%), mientras Nueva República (PNR) y Liberal Progresista (PLP) quedan atrás con 21,3% y 15,6% respectivamente.
Sin embargo, FA obtiene también un mayor porcentaje de reprobación, lo que hace que el saldo sea de 1,4 puntos, frente al PPSD con 3,4, tras casi un año desde que asumieron sus curules los nuevos diputados, según el estudio de opinión pública de CIEP-UCR. La agrupación con mayor reprobación es PLN, pues 37% dio opiniones desfavorables.
De esta manera evalúa la población a las seis bancadas que conforman la Asamblea Legislativa, que en términos generales recibe una nota promedio de 5,4, por debajo de casi todas las instituciones públicas del país y solo por encima de los partidos políticos.
El equipo de investigación de CIEP-UCR consultó a las 1.000 personas encuestadas por el nombre de algún diputado o diputada y a qué provincia representa, pero solo una de cada diez respuestas fue correcta, pues la gran mayoría (80%) dijo no conocer a ninguno.
“Esta información pone a discusión como las percepciones negativas de la Asamblea prevalecen aún sin conocer con exactitud quién integra dicha institución. En particular, es relevante cuestionar el contacto que se mantiene entre la población y las y los legisladores una vez que se terminan los procesos de campaña electoral”, indica el informe.
La diputada que más mencionó la población fue Pilar Cisneros, de provincia de San José, jefa de fracción del PPSD y figura clave en el ascenso de Rodrigo Chaves al poder, pues él era un desconocido hasta hace dos años y ella era reconocida como una periodista famosa de Telenoticias, Canal 7.
A pesar de que pasó casi la legislatura completa sin presentar un solo proyecto de ley, Cisneros ha sido protagonista como principal figura oficialista y por cuestionamientos en la comisión que investiga el financiamiento electoral del PPSD, así como algunas discusiones con otros diputados, incluida una compañera de bancada.
Las valoraciones populares sobre las fracciones legislativas se corresponden con el ambiente ya establecido de desafiliación partidaria de los últimos años, que ahora se refleja en el dato de 79% de la población que asegura no tener simpatía por ninguna agrupación.
Más que ese distanciamiento, la encuesta señala que hay desconfianza en el trabajo de las bancadas, pues la mayoría (56,5% de los entrevistados) considera que el criterio de los diputados en la elaboración de las leyes son “sus propios intereses”, seguido muy de lejos (14%) por el factor de coincidencia con las propuestas del presidente y solo 12% dice que buscan satisfacer los intereses de la población.
Encuesta CIEP-UCR: el desgaste tampoco perdona a Chaves al quitarle en ocho meses el 20% del apoyo popular
El 79% de la población respaldaba a Chaves en agosto, el 68% en noviembre y el 63% ahora que se acerca el primer año del gobierno, todavía con alta aprobación, mientras la inseguridad se coloca como el mayor problema del país y la mayoría de la gente duda de la capacidad de soluciones por parte del gobierno.
¿Miedo a perder el trabajo o el dinero? Sí, pero el mayor temor de los costarricenses es más amplio
Entre las preocupaciones de la población y las presiones económicas, entre las urgencias del presente y las advertencias sobre un futuro adverso, o incluso frente al peligro por el crimen, lo peor que podría ocurrir en Costa Rica es dejar de ser el país tal como lo asumimos, según la encuesta CIEP-UCR.