El Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) detuvo la evolución que mostraba en el campo de la tecnología móvil en Costa Rica, que lo ubicaba en posiciones de liderazgo y con una creciente sintonía con los avances internacionales.
Jaime Palermo, exgerente de telecomunicaciones del ICE, confirmó que la institución se preparaba para incursionar en la tecnología móvil de quinta generación (5G), luego de inversiones que ya habían permitido el paso de 3G a 4G y allanaban la ruta para las evoluciones siguientes del mercado.
“Cuando empecé la gerencia de telecomunicaciones en el 2014, se tomaron las decisiones de invertir en fibra óptica, para iniciar la migración de 3G a 4G. Posteriormente, fuimos el primer operador de 4.5G en Centroamérica, hacia el 2018. Se hablaba mucho de 5G y en noviembre dejamos listas 600 radiobases, listas para migrar a 5G”, manifestó.
Se exploraron convenios y posibilidades con la CCSS y el Ministerio de Educación, y se tenía afinado el primer plan piloto para 5G, un proyecto de telemedicina, que se implementaría en el 2020.
Y se vino un enfriamiento en la inversión (ver recuadro). La inversión en telecomunicaciones, que del 2016 al 2019 fue en promedio de $326 millones, pasó en el 2020 a alrededor de $250 millones, según datos del Plan Operativo Institucional del ICE. Es claro que se tuvo el entorno de la pandemia, pero ello se sumó a un enfoque para tratar de ganar espacios en las finanzas de la entidad, ante la presión del endeudamiento.
UNIVERSIDAD intentó conversar con la anterior presidenta ejecutiva del ICE Irene Cañas, pero no atendió las llamadas.
Ahora que el presidente Chaves anunció que el ICE dará servicios en esta tecnología para el próximo año, también queda sobre la mesa la pregunta de si se tendrá la inversión requerida. Palermo comentó que, durante su gestión, se estimaba que se requerirían unos $200 millones para incursionar en este mercado. “Habría que revisarlo, porque en telecomunicaciones, en redes móviles, si no se hacen inversiones y mejoras en la red, se cae lo que se tenía”, dijo.
Evolución de tecnología móvil
La quinta generación de la tecnología inalámbrica o redes móviles (5G) es la última fase de una evolución que no se detiene
Primera generación: Primera fase de desarrollo de telefonía móvil, desarrollada en la década de los años 80. Tecnología analógica, básicamente solo permitía hablar.
Segunda generación: Introdujo la tecnología digital, desarrollada alrededor de 1990. Permitió los mensajes SMS, además de las primeras herramientas para permitir los teléfonos inteligentes.
Tercera generación: Permitió la conexión a Internet, lo que aumentó su velocidad casi 7 veces con respecto a la conexión telefónica estándar y la convergencia de voz y datos. La UIT definió las demandas de redes 3G en el 2000, con la norma IMT.
Cuarta generación: Basada en el protocolo IP, es un conjunto de sistemas que permiten el uso de la banda ancha, lo que permitió la reproducción de videos en tiempo real. Los primeros servicios con esta tecnología se lanzaron en el 2010.
Quinta generación: Fue presentado oficialmente en el 2019. Permite viajar a velocidades más rápidas que las ofertas de fibra óptica, permite una mayor latencia (tiempo de respuesta de la red) y lograr gran alcance y conexión de gran cantidad de dispositivos, mediante la combinación de frecuencias en tres bandas.
ICE aceleró el paso y luego se detuvo
El ICE enfrentó un fuerte cambio en las condiciones en las que debía funcionar luego de que el referendo sobre el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos fuera aprobado en octubre del 2007. Eso obligó a la aprobación de la Ley General de Telecomunicaciones del 2008, en la que se abrió a la competencia este mercado en el país.
Inicio encendido con 3G El ICE demostró que podía mantener el paso para el desarrollo del sector de telecomunicaciones. Apenas un año después, en el 2009 anunció que incursionaba con la tecnología móvil de 3G, a nueve años del lanzamiento de este nuevo estándar en el mercado. Con esta red también se lanzó al mercado la marca Kӧlbi.
Acelerar con 4G Para el 2013, anunció su incursión en la tecnología de 4G, a tres años de su aparición en el mercado internacional. Y solo cuatro años después, en diciembre del 2017, lanzó la tecnología 4.5G. En los siguientes seis meses, aumentó en un 600% la cantidad de radiobases, mientras consolidó sus redes 3G y 4G como las más veloces del país.
Paro de inversión con 5G. Y, entonces, cuando el ambiente era propicio para migrar a la 5G, que se lanzó en el mundo en el 2019, vino un paro. Según palabras del exgerente de telecomunicaciones Jaime Palermo, la administración del ICE detuvo toda clase de proyectos, bajo el argumento de que se debía mejorar las condiciones financieras.