El historiador Manuel Araya, presidente de la Academia de Geografía e Historia de Costa Rica, criticó esta tarde el proyecto de “Ley para el Fortalecimiento y Modernización del Ministerio de Cultura”, promovido por el gobierno, por plantear un “modelo centralizado de autoridad y gestión”.
Araya compareció ante la Comisión Permanente Ordinaria de Asuntos Sociales para compartir su criterio y dijo que en la academia están “preocupados” por ese y otros proyectos de ley que pretenden recortar la participación popular en entidades púbicas.
El historiador indicó que este proyecto, así como otros que lo complementan -entre los que mencionó el 23.105 Ley de Recuperación de Competencias y Fortalecimiento de las Jerarquías de los Ministros- no fomentan una modernización del Ministerio de Cultura ni del sector y que tampoco aseguran “la promoción de una estructura que garantice una gestión de las políticas culturales desde el Estado que retengan un carácter participativo y de carácter democrático”.
El estudioso afirmó que ambos proyectos pretenden eliminar órganos de participación ciudadana y propone un modelo centralizado de gestión de las políticas culturales. “Es decir un modelo que reúne en la autoridad de la persona que ocupa la titularidad de la cartera de Ministerio de Cultura la capacidad de decidir y no solo de decidir en lo que compete al propio ministerio”, sino de otras instituciones del sector que pasarían a convertirse en programas ministeriales.
“La persona ministra van a tener de una enorme concentración de responsabilidades”, dijo y eso preocupa gravemente.
Araya recordó que la cultura entendida “es el resultado de la creatividad humana, por lo que no es el Estado y mucho menos el gobierno el ente que debe de crear la cultura y agregó que el gobierno de Costa Rica es, por Constitución Política, “popular, representativo participativo, alternativo y responsable”.
El gobierno conformado justamente por el pueblo y los tres poderes, aseguró, está muy bien reflejado en la forma en que funcionan las instituciones del sector cultura pues distintos grupos están representados en los cuerpos que las dirigen,.
Sin embargo, ahora se plantea un “modelo centralizado de autoridad y gestión” que requeriría que quien lidere el ministerio tenga un amplísimo expertise.
La liberacionista Kattia Rivera señaló la paradoja de que se plantee este proyecto en un gobierno en el que la ministra de cultura -Nayuribe Guadamuz- no tiene experiencia alguna en el sector.
Araya también criticó que en el proyecto se plantean fuentes de financiamiento que son prácticamente inexistentes, como un canon a las chequeras. “En un proyecto de Ley de Modernización están incluyendo una figura que ya casi que está en la arqueología de la historia financiera”, dijo.
Al cierre de su intervención, el historiador dijo que es importante entender que la cultura tiene “una capacidad de control sobre los individuos y sobre las sociedades” por lo que sus instituciones deben ser protegidas.
