En el presupuesto para el 2023, el Ministerio de Hacienda le está asignando ₡98.425 millones al Banco Hipotecario de la Vivienda (Banhvi), en recursos destinados a bonos de vivienda; sin embargo, el monto que le corresponde por ley de transferencias del Gobierno Central es de alrededor de ₡119.985 millones, según datos confirmados por el Banhvi.
Es decir, el Banhvi está dejando de percibir aproximadamente ₡21.560 millones para ser usados en construcción de vivienda social.
Así lo confirmó Dagoberto Hidalgo, gerente general del Banhvi en entrevista con UNIVERSIDAD.
“Este presupuesto es prácticamente el mismo que el año anterior (₡98.431 millones). En lo que sí hay una diferencia es en cuanto al monto que por ley se debería de transferir”, dijo Hidalgo, quien confirmó que las diferencias están en los montos que corresponden por ley provenientes del Fondo de Desarrollo Social y de Asignaciones Familiares (Fodesaf) y del “impuesto a casas de lujo”.
El Banhvi se financia con recursos provenientes de tres fuentes. Primero, le corresponde un 18.07% de lo recaudado por Fodesaf, fondo que recibe un 5% del total de salarios que pagan mensualmente los patronos públicos y privados a sus trabajadores. Para el 2023, este monto ascendería a ₡113.479 millones, según el Banhvi. Pero en el Presupuesto Ordinario de la República —presentado el pasado 1 de setiembre— solo se le asignaron ₡96.487 millones.
Segundo, se financia con el llamado “impuesto a las casas de lujo” o la Ley de Impuesto Solidario para el Fortalecimiento de Programas de Vivienda, que pagan propietarios de casas con un valor fiscal igual o mayor a ₡137 millones (monto actualizado a 2022). Para el 2023, lo recaudado por este impuesto es ₡5.217.754.861 según el presupuesto 2023. No obstante, solo se asignó al Banhvi ₡649.300.000.
Y tercero, del llamado “bono colectivo”, una transferencia que hace el Ministerio de Hacienda para financiar proyectos de infraestructura pública en las comunidades. Para el 2023, el Banhvi recibirá ₡1.289.448.420.
¿Por qué no se les girarán los recursos?
Hidalgo afirmó que desconocen por qué no les están presupuestando todos los recursos que corresponden por ley.
“No, esa información todavía no la tenemos porque recién se presentó el presupuesto. Más bien es parte de la discusión que tendremos que tener durante las siguientes semanas con los jerarcas de Hacienda. Por ahora, lo que se nos ha informado es que esto responde a la situación económica y fiscal que atraviesa el país y las necesidades que tiene el Gobierno”, señaló el gerente.
UNIVERSIDAD consultó al Ministerio de Hacienda y la Dirección General de Presupuesto Nacional explicó que había tres razones “por las cuales no es posible presupuestar todos los recursos que según las proyecciones corresponderían por ley”. Todas se refieren a la Regla Fiscal.
La primera es que la deuda es mayor al 60% del Producto Interno Bruto (PIB), por lo que el crecimiento interanual del gasto total no puede sobrepasar el 65% del promedio del crecimiento del PIB nominal, según el título IV de la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas.
La segunda es que si la deuda del Gobierno central supera el 50% del PIB nominal, “el Ministerio de Hacienda podrá presupuestar y girar los destinos específicos legales considerando la disponibilidad de ingresos corrientes, los niveles de ejecución presupuestaria y de superávit libre de las entidades beneficiarias”, según la misma ley.
Y la tercera es que todas las instituciones sujetas a la Regla Fiscal deben deben cumplirla.
Hidalgo, por su parte, recordó lo que el Banhvi ha señalado en relación con el tema presupuestario y “es que la construcción, además, de atender un derecho fundamental, es importantísimo desde el punto de vista de la reactivación económica y la generación de empleo que tanto necesita nuestro país”.
Reapertura de ventanillas para fin de año
El gerente del Banhvi adelantó que la reapertura de las ventanillas, donde se reciben las solicitudes de bonos de vivienda, podría ser a finales de año.
Con respecto a los bonos de vivienda, Hidalgo declaró: “Terminaríamos el 2022 tratando de atender las solicitudes que están rezagadas y la reapertura de ventanillas estimamos que podría ser hacia finales del año; pero pensando ya en la ejecución del presupuesto 2023”.
Hidalgo estimó que el próximo año se podrían otorgar entre 8.500 y 9.500 bonos de vivienda.
De acuerdo con una revisión realizada por este medio, del promedio de bonos de vivienda otorgados durante los últimos años hasta el 2020, se otorgaban entre 11.000 y 12.000 bonos por año, según datos del Banhvi.
Actualmente, nadie puede solicitar un bono familiar de vivienda, ya que desde junio de 2021, el Banhvi cerró todas las ventanillas donde se tramitan y anunció la suspensión inmediata, y hasta nuevo aviso, de toda recepción de solicitudes.
Las ventanillas funcionan en instituciones como Mucap, Mutual, Banco Nacional, Fundación Costa Rica-Canadá, Banco Popular, Coopenae, Coopeande, que tienen autorización de recibir expedientes de solicitudes de bonos o de proyectos.
Aumenta costo de la vivienda social
Asimismo, Hidalgo reconoció que podría haber un impacto en la cantidad de soluciones de vivienda que se puedan hacer.
Primero, porque el pasado 1 de setiembre el Impuesto al Valor Agregado (IVA) para los servicios de ingeniería, arquitectura, topografía y construcción de obra civil, aumentó de un 4% a un 8%.
Y segundo, por el aumento en los costos de los insumos y materiales de construcción.
“Sí, es probable que tengamos un efecto en la cantidad de soluciones que podamos hacer. (…) Se estima que el costo de la vivienda social ha aumentado entre un 18% y un 20%, de manera que esos dos elementos combinados necesariamente van a impactar en la cantidad de soluciones que podamos hacer”, indicó Hidalgo.
Como reportó UNIVERSIDAD, según el índice de precios de vivienda social del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), entre enero y julio, este índice aumentó un 10,6%, y un 13,44% en comparación con el mismo periodo del 2021.
