Como medida económica para enfrentar la crisis por el COVID-19, la ministra de Planificación Nacional y Política Económica, Pilar Garrido, anunció que el sector público no contará con el aumento salarial de este periodo, con excepción de las fuerzas policiales.
“Esta medida requiere un sacrificio de todas las personas servidoras públicas. Necesitamos asegurar que todos los recursos estén llevados para atender la emergencia, tanto en la parte sanitaria como en las ayudas sociales, y confirmar que se están dando recursos a aquellas personas que no cuentan con oportunidades suficientes”, justificó la ministra.
Además, las instituciones públicas deberán emplear únicamente al 20% de su planilla, de manera que se garantice la continuidad de aquellas tareas estrictamente necesarias.
“Este plan debe ser redirigido a Mideplan, en un plazo de 48 horas desde el momento en el que se ponga en vigencia la directriz. El personal no requerido deberá aplicar la modalidad de teletrabajo u otorgar vacaciones a todas aquellas personas servidoras que cuenten con periodos acumulados de vacaciones”, explicó Garrido.
Regla fiscal se mantiene
La ministra de planificación señaló que, de momento, no se valora hacer una excepción a la aplicación de la regla fiscal en las instituciones públicas, pero que seguirá bajo análisis, según avance la realidad nacional.
“La ley 9635 señala dos condiciones para poder levantarla: la primera es la declaratoria de emergencia, que ya se hizo, y la segunda es que el gasto por la declaratoria supere el o,3% del PIB. Si se levanta sería para las instituciones que están abocadas a la atención de la emergencia, no para todo el sector público”, concluyó Garrido.