La Fiscalía General solicitó esta tarde al director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Walter Espinoza, que inicie de forma inmediata una investigación penal por la supuesta filtración de información sensible del caso UPAD, que se encuentra judicializado actualmente.
La petición se realizó luego de que el diputado independiente Dragos Dolanescu hiciera alusión a las contraseñas de los teléfonos celulares que el presidente de la República, Carlos Alvarado, tuvo que entregar como parte de la investigación que lleva la Fiscalía sobre el caso.
«¿Es verdad que la clave de su celular era 123456?», preguntó Dolanescu al mandatario, durante su comparecencia de este miércoles ante la Asamblea Legislativa.
La Fiscalía, mediante un comunicado de prensa, aseguró que buscarán determinar la identidad de la persona o personas que facilitaron al diputado «información privada del expediente». Eso sí, afirmó que la información no ha salido de su dependencia.
«El Ministerio Público garantiza a la población que, por su parte, no ha habido filtración alguna de datos sensibles del proceso de investigación 20-005434-042-PE. La institución señala que es la principal interesada en que se resguarden todos los detalles de la causa, a efectos de no poner en riesgo el correcto avance de la misma», indicó mediante un comunicado de prensa.
Según la institución, durante la audiencia de apertura de evidencia digital del expediente, un total de 55 personas que no forman parte del Ministerio Público tuvieron conocimiento de información relacionada con esa diligencia, entre las que se encuentran las personas imputadas, abogadas, técnicos y querellantes.
Video: Radio Asamblea Legislativa
