Los diputados del bloque independiente afín al excandidato Fabricio Alvarado, autodenominado Nueva República, aseguraron sentirse molestos por una supuesta “falta de cortesía parlamentaria”, palabras con las que describieron su exclusión de los acuerdos legislativos para nombrar las presidencias y las secretarías de las comisiones parlamentarias.
En los últimos días, los congresistas eligieron a los diputados que dirigirán los foros legislativos durante el próximo año.
Estos nombramientos se repartieron entre congresistas de todas las fracciones, con excepción del Frente Amplio (FA), del Partido Republicano Social Cristiano (PRSC) y del bloque fabricista.
En parte, esto se debió a que la repartición de los puestos la dominaron los legisladores del Partido Liberación Nacional (PLN), del Partido Acción Ciudadana (PAC) y de Restauración Nacional (PRN): las tres agrupaciones que se unieron el 1 de mayo pasado, a través de un acuerdo de prioridades, para dominar el Directorio legislativo, bajo la batuta del verdiblanco Carlos Ricardo Benavides.
No obstante, la queja de los fabricistas fue más allá de la repartición de estos puestos estratégicos, y más bien se centró en que no fueron ni siquiera avisados sobre los nombres que se colocarían en cada puesto, “en un 99% de los casos”, según indicó el diputado Jonathan Prendas.
Estas quejas ademas las manifestaron en dos de las votaciones por presidencias: la primera cuando los diputados de la Comisión para el Control de Ingreso y Gasto Público decidieron remover a Prendas de la presidencia del foro este miércoles y, la segunda, cuando se reeligió al oficialista Enrique Sánchez en la dirección de Derechos Humanos, algo que ocurrió esta misma tarde.
En este último de los casos, la diputada Ivonne Acuña subrayó que no se les había “tomados en cuenta en la negociación previa”, motivo que argumentó para votar aparte por otra diputada para el puesto. Para ello propuso a la integracionista Patricia Villegas, quien solo recibió el voto de Acuña, pues ella misma votó por el diputado del PAC.
Algo similar pasó cuando se escogió a la presidenta de Ingreso y Gasto Público, donde Prendas se postuló y recibió solo dos de los ocho votos totales, para expresar su disgusto.
Ante estas declaraciones de los independientes, el presidente del Congreso, Carlos Ricardo Benavides, evitó hacer mayores aclaraciones.
Para el liberacionista, quien impulsó el acuerdo ganador del 1 de mayo, “pudo ser que en algunos casos puntales los integrantes de las comisiones no hubiesen comentado con anterioridad el propósito específico para nombrar presidencias”, pero que “en una Asamblea Legislativa tan pequeña como la nuestra casi todo se sabe”.
“Más bien sorprendería que no estuvieran enterados de cuál iba a ser el destino final de las votaciones”, apuntó.
Jonatthan Prendas: “Nada costaba decirnos”
De cualquier manera, el fabricista Jonathan Prendas lamentó que no se les hubiese comentado oficialmente las decisiones de las otras fracciones, pues —desde su punto de vista— “nada costaba” decirle a su bloque cuáles eran los acuerdos que existían para cada puesto.
Según comentó el legislador, en su bloque ya sabían que posiblemente serían excluidos de los puestos de poder de los miniforos; sin embargo, esperaban al menos saber las opciones elegidas por el grupo ganador del 1 de mayo.
Los fabricistas, en aquella ocasión, se habían aliado con el Partido Unidad Social Cristiana (PUSC) para buscar los puestos del Directorio legislativo, en contra del grupo liderado por Benavides, motivo por el que finalmente quedaron fuera de la dirección del debate.
Eso sí, incluso los diputados del PUSC finalmente lograron concretar negociaciones para alcanzar las presidencias de las comisiones de Turismo y de la Mujer a través de sus diputados, Pablo Heriberto Abarca y Shirley Díaz; algo que ni siquiera fue una opción para los diputados del bloque independiente.
Al respecto, el diputado Prendas el independiente dijo que sus quejas y las de su bloque tampoco buscaba sobredimensionar lo ocurrido, sino simplemente señalar “un asunto de cortesía parlamentaria”.
En esa línea, concluyó que ahora lo que deberán hacer es “seguir construyendo” y “buscando conciliaciones”, pues “a fin de cuentas el presidente (de las comisiones) lo que hace es dirigir los debates pero no puede impedir que se ejecute el reglamento legislativo”.
El diputado además descartó que en su bloque se sientan diezmados por haber sido desplazados de comisiones como Asuntos Económicos, pues ganaron representación en otros foros que —según dijo— deben ser tomados con la misma relevancia.
“Nos han dicho que perdimos, pero no se puede perder algo por lo que no aspiramos. Nosotros casi no buscamos aspirar a ningún puesto, con excepción de algunos casos puntuales, como la presidencia de Ingreso y Gasto”, subrayó.
Sobre el resto de las comisiones, en las cuales obtuvieron más o menos representantes, indicó que obtuvieron los mínimos establecidos por reglamento para cada diputado, por lo que no realizarían mayores reclamaciones. Asimismo, señaló que cada puesto en cada comisión es valioso, pues así debe comprenderse “por respeto con el país”.
“Nosotros no sentimos que nos hayan relegado. Nosotros sabíamos que nuestra decisión era fundamentada, que la íbamos defender hasta el final y así fue”, concluyó, en relación con su pérdida del 1 de mayo, cuando plantaron cara al resto de fracciones junto con el PUSC.
