País

Errores y rechazo: el Gobierno activa el riesgoso cartucho de los impuestos

La promesa de campaña hablaba de no aumentar impuestos y la economía está “llena de buenas noticias”, pero igual Rodrigo Chaves ve necesario mandar a la escéptica Asamblea Legislativa una brasa fiscal de cinco proyectos, incluidos con errores, confusiones y confrontaciones.

“Hay buenas noticias” en la economía. “Prometí no subir impuestos y cumplo con mi palabra”. “Hoy podemos empezar a hablar de prosperidad (fiscal)”. “Por primera vez en décadas estamos abonando el principal (de la deuda pública) en vez de endeudarnos más”. “Lo estamos haciendo tan bien que hasta le estamos abonando a la tarjeta”.

Estas son frases que dijeron el presidente Rodrigo Chaves y su ministro de Hacienda, Nogui Acosta, en la cadena televisiva del domingo para ensalzar la propuesta de cinco proyectos fiscales presentada en el día 375 de gobierno y, fiel al discurso de toda la administración, para calificar como mentirosos o serviles a los que anunciaron su rechazo, incluidas las cinco bancadas opositoras.

Pese todas esas frases positivas del video grabado el domingo desembocaban en propósito de fondo: “presentamos a la Asamblea Legislativa una serie de proyectos y tendrán (los diputados) que decidir si vamos a construir infraestructura, reparar las más de 1.000 escuelas con problemas u órdenes sanitarias, o si vamos a invertir en seguridad los montos necesarios”.

Es decir, dos ideas en apariencia contradictorias: la situación fiscal es muy buena y ahora mismo no hay plata garantizada para carreteras, educación o lucha contra el crimen.

En ese marco presenta Rodrigo Chaves su apuesta en una materia de impuestos, que, más allá de las dificultades que implica para cualquier gobernante, eleva más el enfrentamiento con la Asamblea Legislativa donde la oposición domina el 82% de las curules y pone en peligro el apoyo de algunos sectores que aún forman parte del respaldo popular característico de esta Administración, que en la campaña tenía como una promesa prioritaria el no aumentar los impuestos.

Pero las dificultades no acaban ahí con el tema, pues tras el rápido rechazo desde todas las fracciones opositoras y de una inusual escasez de expresiones favorables en redes sociales, el ministro Acosta tuvo que poner la cara para advertir que hay errores en los proyectos presentados y que sí habrá una parte de los contribuyentes que deberán pagar más, y no solo los más ricos.

“Fue un error personal”, dijo al quinto día de presentados los cinco proyectos de ley, en referencia a reducir a ₡842.000 el mínimo exento de renta en el salario mensual, lo que hacía que miles de personas más tuvieran que pagar ese tributo y que aumentara, para los que ya lo hacen, uno de los principales puntos de crítica contra la propuesta.

Este supuesto error no lo señaló Acosta en el video que grabó desde su casa para que la Presidencia lo difundiera tras los primeros cuestionamientos, tampoco en la conferencia de prensa el viernes por la noche y tampoco en la cadena televisiva del domingo, en la que más bien Chaves llamó “mentirosos” a los que reprochaban el aumento en impuestos.

En ese mismo programa radiofónico, Nuestra Voz, el ministro reconoció que una persona que tenga salario y también reciba ingresos por aparte pagarán más “porque es lo correcto”. El jerarca también sostiene como correcto el aumento a 30% del impuesto de renta para empresas medianas y pequeñas (Pymes).

Improbable aprobación

“Eso no es ningún error”, dijo Acosta en referencia a la tasa del formato llamado “flat tax”, que fija una sola tasa fija para todas las sociedades. Sin embargo, la idea era equipararla bajándola a las empresas más grandes y no subiéndola a las más pequeñas. Incluso Otto Guevara, exdiputado que expresa frecuentes mensajes de apoyo a posiciones del Ejecutivo, criticó esa tasa y, en general, reconoció que la propuesta fiscal “no tienen ningún chance de ser aprobados”.

“No es el momento de bajar ese 30%. Cuando tengamos estabilidad fiscal deberíamos ir bajando el nivel”, dijo Acosta en el programa de la periodista Amelia Rueda junto a seis diputados, sin aludir a la prosperidad y bonanza que hacía sólo algunas horas había mencionado en la cadena junto al presidente.

En el espacio, los cinco diputados de las fracciones opositoras fueron claros: esto es un intento por aumentar los impuestos sin progresividad alguna y la mentira está del lado del Gobierno, que quita la mirada de la necesidad de reducir la informalidad y de mejorar la recaudación con las normas vigentes.

“Mucho cinismo”, dijo Eliécer Feizaig, del Partido Liberal Progresista (PLP). “No nos creamos el falso discurso de que no nos están metiendo más impuestos”, dijo Pablo Sibaja, de Nueva República. “Un golpe durísimo a las Pymes’”, señaló Alejandro Pacheco, del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC). Así se expresaron miembros de fracciones que más han apoyado al Gobierno en otros temas.

Sibaja y Feinzaig mencionaron el ejemplo de las sillas de ruedas o anteojos, dos de los implementos médicos que empezarían a gravarse si se aprobara la propuesta del Ejecutivo. Aunque Acosta dijo que sería solo 2% y no el 13% general, y que eso lo consumen sólamente las personas de más recursos, los legisladores le refutaron y advirtieron que la CCSS solo cubre a poco más de la mitad de la población, y no siempre con los requerimientos necesarios para los pacientes.

En la misma vía se expresó Sibaja sobre las fórmulas de nutrición infantil, que se gravarían con el 13%. “No solo es un error grave del ejecutivo, sino también una política más sin rostro humano”, añadió Sibaja.

A ellos se suman las bancadas del Partido Liberación Nacional (PLN) y Frente Amplio (FA), las dos a las cuales más ha confrontado Rodrigo Chaves por numerosos temas a los largo del año de convivencia, sin que hasta ahora se incluyera el impopular tema de los impuestos.

Sonia Rojas, del PLN, incluso expresó las dudas sobre el error señalado por Acosta, pues insinuó que más bien se debió a una propuesta real que debió revocar al verse envuelto en críticas, como ha ocurrido en el Gobierno con otras medidas en temas distintos.

Por eso, ahora la desconfianza, por las intenciones de los cinco proyectos, por la posibilidad de que contengan errores reales o por la probabilidad de que el Gobierno se desmarque de parte de esos contenidos atribuyéndolo a un supuesto error, además de los calificativos que lanzaron Acosta y Chaves en la cadena televisiva.

Se intentó consultar al ministro Acosta sobre asuntos que quedan pendientes de explicación, pero para este martes por la noche no fue posible obtener respuestas.

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