País

El dinero electoral detona en Restauración Nacional una gresca anunciada

El presidente de la agrupación denuncia “estructura paralela” de gastos en el partido donde su hijastra es la tesorera. El TSE ya encendió las alarmas.

El segundo partido opositor y protagonista de la campaña reciente, Restauración Nacional (PRN), vive una fuerte disputa interna (cuyas señales se venían asomando desde hace meses), por enormes sumas de dineros electorales.

El altercado llegó a un punto inédito esta semana, cuando el propio presidente de la agrupación, Carlos Avendaño, denunció públicamente la existencia de una “estructura paralela” para gastos en el partido donde la responsable legal es su propia hijastra, Jéssica Sequeira Muñoz, como tesorera.

El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) inició diligencias propias de una investigación por posibles anomalías financieras, después de que varios proveedores denunciaron el adeudamiento millonario de servicios efectuados y de la inusitada confesión del presidente Carlos Avendaño, actual diputado y jefe de la bancada de 14 diputados del partido donde fue candidato Fabricio Alvarado.

Las denuncias por impagos han surgido a pesar de que el partido podría tener derecho a casi ¢6.000 millones del Estado por la alta votación recibida en la primera ronda y porque obtuvo en marzo un fideicomiso del Banco Promérica por ¢1.500 millones.

Entre los acreedores se incluye la encuestadora Opol Consultores (¢18 millones), que realizó mediciones encargadas por el comando de campaña del PRN, como informó UNIVERSIDAD desde el 3 de mayo al reportar el pago ya hecho por ¢8 millones.

Las críticas aumentaron al conocerse las coincidencias de fichas y fechas entre las encuestas a destajo, así como las publicadas en medios de comunicación como si proviniesen de información independiente, señaló este 24 de mayo el diario La Nación.

También reclama su pago la compañía Crescendo Comunicaciones, del productor audiovisual Luis Alonso Naranjo, autor de la canción “Con las manos limpias” que coincide con el mensaje de campaña en contra de la corrupción.

En su caso, demanda el pago de ¢115 millones por decenas de videos, fotografías y transmisiones, como publicó en su perfil de Facebook.

Además, reclama su dinero el empresario Juan Carlos Campos, que actuó como jefe de la campaña publicitaria al margen de la cúpula formal del PRN y al mismo tiempo vendió los servicios de su compañía One Sports, como admitió el 21 de febrero en entrevista con UNIVERSIDAD.

El monto adeudado asciende a $300.000 (unos ¢170 millones), según una carta enviada por Campos a Jéssica Sequeira, en la cual le indica que hubo “un contrato verbal”.

Otros proveedores se suman a la lista de cobros que Avendaño se niega a reconocer, por considerar que se habrían brindado sin un respaldo que los certifique, lo cual implicaría falta de pruebas documentales para reportarlos al TSE y pedir reembolso con dinero de la deuda política.

Avendaño, fundador y presidente del partido, asegura que la campaña la manejaron otras personas y que se enteró “por la prensa” sobre la designación de Campos como jefe de campaña, aunque el manejo financiero siempre estuvo en manos de la cúpula formal cercana a él.

Tan cercana, como que su hijo, Juan Carlos Avendaño, también participaba de las decisiones.

A esto se refería el diputado actual cuando pronunció “estructura paralela”, ante lo cual en el TSE iniciaron gestiones tendientes a investigar de oficio al PRN, dijo este martes el director del Registro Electoral del TSE, Héctor Fernández, quien se reunió la víspera con el director del Departamento de Financiamiento, Ronald Chacón.

“Se deben reportar todos los movimientos, independientemente de si los pagaron o no.  Si no se pagó, debe ser reportado como donación”, explicó Fernández.

“Para nosotros es un motivo de interés para verificar qué ocurrió y quiénes son los responsables. Es una obligación investigar eso”, añadió después de reconocer como un hecho inusual que fuera el propio presidente del partido quien lo denunciara.

El excandidato presidencial por el PRN, Fabricio Alvarado, se sacudió de cualquier responsabilidad por los dineros. “Yo no formé parte de estructuras de pago ni de contratos en ningún momento”, comentó en sus redes sociales sin mencionar siquiera al presidente de su agrupación.

Este 30 de mayo vencía el plazo para que los partidos presentaran su liquidación de gastos correspondientes a la primera ronda, mientras el PRN y Acción Ciudadana tienen hasta el 26 de julio para entregar los de la segunda ronda, aunque esto no inhibe al TSE a actuar antes.

Los reportes provisionales de gastos del PRN han mostrado rubros de pago a Fabricio Alvarado y su esposa por supuesto alquiler de vehículo y servicios profesionales, por casi ¢10 millones.

También revelan pagos a Juan Carlos Avendaño, hijo del diputado, por casi ¢26 millones, por aparentes servicios de diversa índole; así como a otros familiares de los actuales diputados, sobre todo allegados al limonense Eduardo Cruickshank.

Sin embargo, el partido ha informado que algunos de esos rubros no serán reportados como gastos al TSE en las liquidaciones.

Los incidentes conocidos esta semana sobrevienen después de manifestaciones de enfrentamiento entre distintas tendencias internas, incluso desde la campaña, en la cual Avendaño casi no se comunicaba con el comando operativo que rodeó a Fabricio Alvarado.

Esto a pesar del éxito que representaba para el PRN el haber ganado la primera ronda, pasar de uno a 14 diputados, participar en una segunda ronda y a la vez obtener el derecho a reembolsar gastos electorales por montos que jamás imaginaron al inicio de la campaña.

 

Suscríbase al boletín

Ir al contenido