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El BCCR vuelve a subir la Tasa de Política Monetaria para tratar de contener la inflación

El banco también indicó que la Tasa Básica Pasiva (TPB) se ubica ahora en 4,58% lo que tendrá efectos al alza en los créditos en colones que tienen este indicador como referencia.

El Banco Central de Costa Rica (BCCR) acordó aumentar la Tasa de Política Monetaria (TPM) en 200 puntos base (p.b.), para ubicarla en 7,50% anual, como parte de lo que calificó como su “firme compromiso con el control de la inflación”, cuya última medición oficial la ubicó, en junio, en 10,06%.

Además, la entidad acordó fijar la tasa de interés bruta de los depósitos electrónicos a un día plazo (DON) en 5,56% anual. Ambos ajustes rigen a partir de hoy.

El banco también indicó que la Tasa Básica Pasiva (TPB) se ubica ahora en 4,58% (su valor anterior era de 4,32%) y que la Tasa Efectiva en Dólares (TED) se eleva a 1,48% (del 1,46% anterior).

La TBP es definida como “un promedio ponderado de las tasas de interés de captación brutas en colones, negociadas por los intermediarios financieros residentes en el país y de las tasas de interés de los instrumentos de captación del Banco Central y del Ministerio de Hacienda”.

En concreto, es “es el indicador referente para 694.000 préstamos en moneda nacional a interés variable”.

Al encarecerse el precio del dinero, el interés que recibirán los ahorros del público en las entidades financieras será mayor, pero también aumentará el costo de esos préstamos tomados por el público a tasas variables.

Desde diciembre pasado, la entidad inició un proceso de ajuste de su política monetaria con el fin  de reducir paulatinamente la cantidad de dinero en la economía y “anclar” -como dice la jerga económica- las expectativas inflacionarias.

Las medidas fueron decididas por el BCCR en un contexto en el que los principales mercados externos con los que comercia nuestro país -como los Estados Unidos y la Unión Europea-, también elevaron sus tasas para contener la inflación, que en nuestro país es causada principalmente como consecuencias de factores internacionales, es decir “importada”.

En el caso de los EE.UU, la Reserva Federal (equivalente al banco central) elevó  hoy su propia TPM en 0,75 puntos porcentuales (p. p.), para establecerla en un rango entre 2,25% y 2,50%.

En ese país la inflación alcanzó 9,1% en junio pasado.

“Las presiones inflacionarias observadas globalmente desde el 2021 se intensificaron en lo que transcurre del 2022, en buena medida como consecuencia del choque sobre los precios de las materias primas causado por el conflicto armado entre Rusia y Ucrania. Ambos países tienen una participación relevante en las exportaciones mundiales de combustibles, granos básicos y metales”, justificó el BCCR.

Además, informó que la encuesta dirigida a analistas financieros, consultores en economía y empresarios, realizada en junio, “denota el comportamiento creciente de las expectativas de inflación; la mediana registró valores de 6,6% y 5,0%, en ese orden, a 12 y 24 meses. Precisamente, ese comportamiento llevó al Banco Central a adoptar una postura de política monetaria más restrictiva, con el fin de aminorar o evitar efectos de segunda ronda que hagan persistir la inflación”.

La estimación del banco es que la inflación retorne al rango de tolerancia alrededor de la meta de inflación (3% ± 1 punto porcentual) en el 2024.

Sin embargo, también advirtió que existen tres factores que “introducen riesgos alcistas sobre la inflación”.

El primero es una prolongación de la guerra rusa contra Ucrania. “Esto acrecienta el riesgo de que la presión sobre los precios internacionales de las materias primas sea de mayor magnitud y persistencia a lo actualmente previsto”, dijo el BCCR.

El segundo es que los precios internos de la producción de manufacturas continúan al alza, con una variación interanual de 17,6% en junio último, “lo que indica que el efecto del choque inflacionario de las materias primas aún no ha completado su potencial transmisión hacia los precios al consumidor”.

Y, tercero, que “las expectativas de inflación se desanclen con respecto a la meta de largo plazo, lo que retardaría la convergencia de la inflación a dicha meta” añadió.

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