Uno de los fundadores del grupo Costa Rica Próspera, el empresario arrocero Bernal Jiménez, declaró ante la comisión que indaga el financiamiento de los partidos políticos en la pasada campaña que las autoridades del Partido Progreso Social Democrático (PSD) intentaron evitar que se conocieran las donaciones que había realizado y las intentaron reportar ante el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) como si fueran compras de bonos de deuda política.
«Yo doné directamente al partido, en ningún momento quise comprar bonos, porque no quería lucrar con política. Lo que creo que pasó es que había una intención dentro de personas de la estructura, parece que en la Dirección de la Campaña, para que no se supiera cuánto estaba donando», declaró Jiménez.
Jiménez donó ₡32 millones a la campaña del PSD, además de ₡300 mil al fideicomiso Costa Rica Próspera, y ante los diputados de la comisión declaró que también le dió personalmente a Rodrigo Chaves $15 mil para el pago de un asesor político, el ex diputado Carlos Pérez, aunque insistió en que estos recursos se los entregó cuando no era candidato presidencial.
Empero, aunque admitió una amistad con Rodrigo Chaves, enfatizó ante las preguntas de los diputados que no influyó para la definición de la política del Gobierno «La Ruta del Arroz», y declaró en varias ocasiones que no se benefició con esa política, a pesar de que el diputado Ariel Robles del Frente Amplio recordó que alrededor de ₡19 mil millones dejaron de pagar los importadores de arroz por las modificaciones al arancel para este producto.
Jiménez indicó que conoció a Chaves en junio del 2020 «por casualidad», cuando caminaba por el vecindario donde vive el actual mandatario. «Quedamos en reunirnos, generamos una amistad», manifestó.
Declaró que estuvo en la fundación del grupo Costa Rica Próspera, alrededor de diciembre del 2020, conjuntamente con Chaves, Arnoldo André, Roberto Batalla y Adrián Torrealba, como grupo de estudio.
Ante las preguntas de Fabricio Alvarado, de Nueva República (NR), mencionó que los cohesionó la preocupación por el rumbo del país, por considerar que alrededor de 1970 se perdieron ventajas de Costa Rica y se tomaron direcciones equivocadas en educación, innovación y creación de empleo, por lo que empezaron a buscar una participación política para cambiar este rumbo.
Empero, indicó que era un grupo poco estructurado, que no tenía actas ni documentos. Esto provocó que Alvarado consultara qué ideas querían comunicar, si eran un grupo de estudio. Jiménez indicó que era mas bien un grupo informal, de personas con ideas, que querían un cambio.
En ese sentido, indicó que alrededor de enero del 2021 se contrató a Carlos Pérez, como asesor político, para que se reuniera con otros dirigentes políticos y agrupaciones, y analizara el entorno: que partidos estaban más avanzados, ideas que manejaban. «Nosotros éramos bastante poco conocedores de política, necesitábamos gente conocedora, que nos enseñara… Era un asesor que nos recomendaba qué hacer», dijo.
Fue en esta coyuntura que entregó $15 mil a Chaves, para que se pudiera realizar parte del pago a Pérez. Empero, insistió en que Chaves todavía no era candidato presidencial.
Esto provocó la crítica del diputado Robles. «No cuestiono que recibiera dinero para una cosa u otra, lo que cuestiono es que Rodrigo Chaves recibió dinero de un empresario y después sus decisiones políticos lo llevan a que parece que se pagó un favor político», señaló.
Fue aproximadamente por esa fecha que se mencionó el fideicomiso, como forma de transparentar el manejo de los recursos. Empero, no precisó quien propuso esta idea, ni tampoco quien administra el fideicomiso Costa Rica Próspera y la canalización de recursos: «éramos tan mal organizados, que no teníamos una estructura», declaró. Sin embargo, ante la insistencia del diputado Robles, indicó que «me parece que la persona que gestiona recursos era Arnoldo André».
Posteriormente vino la época de la campaña, en la que se presentó la polémica por la donación de recursos. Jiménez insistió en que siempre estuvo claro en el partido que sus aportes a la campaña eran una donación. Ante la mención de un audio sobre la exigencia de Jiménez de variar el destino de los fondos reportados por el PSD, enfatizó en que se había enterado que el dinero fue reportado al TSE como si hubiera realizado compras de bonos de campaña.
«Parece que la Dirección de Campaña tomó esa decisión, y lo presentaron de una manera que no había sucedido. Lo que me dijeron Stephen Brunner y el Director de Campaña Emanuel Figueroa fue que recibieron órdenes de cambiar la manera como yo había asignado el dinero. Pero advertí que mi voluntad debía respetarse, y ellos cambiaron eso, el TSE me preguntó a mí y eso se corrigió», expresó Jiménez.
Ante las preguntas de las posibles influencias de sus aportes en las políticas, insistió en que no asesoraba al presidente Rodrigo Chaves, ni que se había gestado algún acuerdo sobre políticas económicas en caso de que Chaves llegara a Zapote. «No he participado prácticamente en ninguna cosa, conversé con Rodrigo (Chaves) unas cuantas veces de una cosa o de otra», dijo.
