La detención de un ciudadano de apellido Sandoval el pasado domingo no fue por estar sin mascarilla en la vía pública, sino por “la obstrucción y los insultos que constantemente realizó contra los oficiales de policía”, explicó el director de la Fuerza Pública, Daniel Calderón.
La entidad emitió un video del comisario para explicar los hallazgos de la “investigación preliminar” que realizaron en torno al incidente, denunciado en redes sociales.
Según trascendió, un hombre de apellido Sandoval fue detenido la mañana del domingo en Mozotal de Ipís de Goicoechea.
En el video de la detención, un oficial de policía -que lleva el rostro cubierto por un pañuelo- le indica a Sandoval que está violentando un decreto por no usar la mascarilla, aunque la lleve consigo y la muestre al oficial. “La ley establece que tiene que andar puesta mascarilla y no la andaba puesta”, le insiste, antes de detenerlo. Al esposarlo, el oficial le indica “dese vuelta, mi amigo, usted está en calidad de investigado”.
Sin embargo, Calderón indicó a la prensa que “la razón para la detención en primer lugar no fue el uso o el no uso de la mascarilla, pese a que esta persona se encontraba en un lugar público, específicamente una parada de buses y el lineamiento del Ministerio de Salud exige para estos lugares el uso de la mascarilla, que en ese caso, lo que procede es un informe de salud y probablemente la aplicación de una multa por el incumplimiento de una medida sanitaria”.
“Pero esa no fue la razón de la detención. Esta persona interviene en un procedimiento que estaba realizando Fuerza Pública y policía de tránsito. Ellos estaban en un control de carretera en la zona, de manera que ellos lo intervienen por esa razón y finalmente lo trasladan a la delegación para confeccionar el respectivo informe policial”, dijo.
El comisario agregó que el sujeto fue presentado ante el Segundo Circuito Judicial “por la obstrucción y los insultos que constantemente realizó contra los oficiales de policía que estaban realizando su trabajo en esa zona”
UNIVERSIDAD consultó a varios abogados penalistas, quienes explicaron que si bien la resistencia o desobediencia a la autoridad constituyen delitos así como las amenazas a un funcionario público, es necesario considerar el contexto de lo sucedido para verificar si constituye un delito de acción pública y por tanto, si corresponde una detención. Por ejemplo, explicaron los especialistas, el acto sólo de “insultar” a un policía -sin amenazar o desobedecer- constituiría un delito de acción privada, al igual que insultar a cualquier otra persona.
Calderón explicó que “como corresponde siempre en esos casos y porque todos nuestros procedimientos están sujetos a revisión” la dirección de apoyo legal está recogiendo todos los antecedentes del caso para iniciar una investigación que determinará “si procede o no la apertura de un procedimiento disciplinario”.
“Estos videos reflejan solamente una pequeña parte de lo que en realidad ocurrió. Sin embargo, insisto, vamos a proceder con esta otra investigación para para determinar lo que corresponda en adelante”, concluyó el funcionario.