La Contraloría General de la República (CGR) identificó serias debilidades en los controles que deberían ejecutarse sobre los recursos para personas pobres que maneja el Fondo de Desarrollo Social y Asignaciones Familiares (Fodesaf).
Mediante una auditoría, la CGR halló problemas en el cumplimiento del marco legal y técnico del programa que para este año 2022 tenía presupuestados ₡336.366 millones para transferencias corrientes y casi ₡100.000 millones en transferencias de capital.
El informe DFOE-BIS-IF-00014-2022, con fecha 17 de octubre de 2022, señala que “los procesos de seguimiento, control y evaluación carecen de herramientas ágiles y eficaces, para identificar oportunamente si la gestión está orientada al cumplimiento de los fines institucionales, así como limitaciones en los controles relacionados con la normativa”.
Estos son elementos que se deben corregir para maximizar el uso de los recursos para hogares en pobreza y pobreza extrema, más aún en el contexto fiscal que vive el país en estos momentos, resaltó el informe de la CGR.
Estos señalamientos sobre problemas en la gestión de programa para asistir a hogares en pobreza llegan en momentos de alta presión sobre la población por el alto costo de la vida y la consecuente pérdida de poder adquisitivo, con la posibilidad de que el año cierre con un porcentaje nacional de pobreza superior al 23% actual.
En detalle, la CGR encontró que hay falta de lineamientos para situaciones como un bajo nivel de ejecusión, de los fondos, omisión de registro de beneficiarios o posibles reintegros del superávit al Fodesaf.
Además, Fodesaf tiene deficiencias en los programas de evaluación, al punto de que solo 8% de ellos han sido sometidos a los respectivos informes. Esto se suma a la carencia de regulación para la distribución del dinero y el registro de beneficiarios.
Por ello la Contraloría ordena el debido cumplimiento de las normas vigentes y pide al ministro de Trabajo y Seguridad Social interino, Luis Paulino Mora, incorporar los ajustes necesarios mediante un decreto, relacionados con la evaluación de programas. También el director general de Fodesaf, Luis Alberto Ávalos, deberá hacer una serie de correcciones y certificarlas ante la CGR antes de marzo del 2023.
