El presidente Rodrigo Chaves y su homólogo salvadoreño, Nayib Bukele, sellaron este lunes con un abrazo un mensaje de alianza que podría plasmarse en el nacimiento de un nuevo grupo de países con una agenda común y en el intercambio de experiencias como el consejo que el invitado lanzó para Costa Rica: dar un apoyo absoluto a los planes que tenga el Gobierno en materia de seguridad, sin que se salga de la línea ningún poder del Estado y ni un solo jerarca público.
Durante una hora de declaraciones sin preguntas de la prensa tras casi una hora y media de reuniones bilaterales en la Casa Presidencial, Chaves y Bukele mostraron su comunión, se dieron alabanzas recíprocas, exhibieron la condecoración al salvadoreño y compartieron ideas para el futuro. Entre ellas el señalamiento de Bukele de que para contener la inseguridad es necesario que la sociedad se pliegue de manera total a las acciones del Poder Ejecutivo, sin frenos ni contrapesos de otras instituciones.
“No había una (institución pública) que no estuviera de acuerdo en combatir el crimen así. No hubo un funcionario en contra que estuviera en contra”, dijo Bukele antes de permitirse dar el consejo: “ponerse todos detrás del plan o no va a funcionar”.
Así, dejando ver ante la cámara un pin en forma de jaguar (el animal elegido por Chaves para simbolizar a su movimiento político), sugirió el mandatario salvadoreño al que se le acredita haber reducido la violencia asociada a las pandillas, aunque con métodos cuestionados por violar derechos humanos y por ejercer un poder totalitario más allá de la seguridad.
“No hay forma de que un Gobierno pueda competir (contra los criminales) en incentivos, por eso el Gobierno debe intervenir y hacer valer su monopolio de violencia. Nadie puede ser violento más que el Estado. Ahora actividad pandillera en El Salvador no hay, no hay homicidios y no hay extorsión (…) Se necesita que la sociedad total en su conjunto esté detrás del plan”, enfatizó Bukele después de recibir la condecoración oficial Juan Mora Fernández en el Grado de Gran Cruz Placa de Oro, por decreto de Chaves.
Minutos antes de esa referencia de Bukele, Chaves se había adelantado en mencionar la necesidad de mayor poder para el Ejecutivo. La experiencia salvadoreña reciente “demostró la necesidad que en momentos históricos claves tienen los pueblos para no diluir en exceso el poder que dan a los gobernantes. Es necesario otorgar en democracia suficiente poder a quienes gobiernan, porque de otra manera el pueblo no puede demandar cuentas ni cambios”, dijo el anfitrión, quien en otros momentos hizo alusión a un marco democrático.
“Esa lección valdría la pena valorarla mucho aquí en Costa Rica, que debe tomar lo mejor de esas experiencias y fortalecer la lucha que estamos librando por la paz de nuestra gente. Estamos sufriendo la fragmentación del liderazgo político en otras partes de nuestras instituciones”, agregó Chaves en línea con los mensajes dados desde la Presidencia contra las entidades públicas ajenas al control desde Zapote, como la Contraloría, el Poder Judicial y la Asamblea Legislativa.
Chaves ha reconocido como válida la discusión sobre los métodos de Bukele contra las pandillas, aunque este lunes se limitó a comentarios elogiosos, condiciones que quisiera que emule Costa Rica y el afán de trabajar juntos.
Bukele cumple una visita oficial este lunes y martes a pesar de las reticencias de diputados y magistrados que impidieron recibirlo en sesiones formales respectivas en ambos poderes. Chaves lo presenta como aliado suyo y abunda en elogios a las acciones salvadoreñas contra las pandillas desde 2019, cuando llegó Bukele al poder. Por las lluvias debieron concentrar las actividades en Casa Presidencial y este martes ambos visitarán la cárcel conocida como ‘La Reforma’ en San Rafael de Alajuela.
Chaves y Bukele acordaron fundar una alianza de países para trabajar en propuestas de interés común ante el nuevo gobierno de Estados Unidos, con Donald Trump, y la comunidad internacional.
«Empezamos El Salvador y Costa Rica, no vamos a ser un club muy grande precisamente por ser un club muy distinguido, seguridad y prosperidad obviamente en el marco de democracia», dijo Chaves, quien adelantó esfuerzos en materia de inversión extranjera, comercio internacional, seguridad transfronteriza, lucha antidrogas y manejo de las migraciones.
«Vamos a construir una liga e invitar a países que piensen como los nuestros», dijo Bukele en la declaración pública, quien aludió a la necesidad de aprovechar la crisis en países desarrollados que no mencionó. Sobre Costa Rica señaló el liderazgo que ha tenido en educación, salud, economía y turismo, aunque evitó referencias directas a la creciente violencia asociada a bandas de narcotráfico internacional.
Bukele y Chaves, que se habían reunido el 1 de junio en San Salvador, prometieron cooperación mutua en diversos temas, según el reporte de la agenda oficial que cumplieron pese a la situación de emergencia en Costa Rica por inundaciones en varias regiones del país.
Para esto Chaves anunció que pidió colaboración de Estados Unidos y aceptó de El Salvador un avión con ayuda que España no recibió para atender los estragos por riadas en la región de Valencia, explicó Bukele al mencionar como una idea espontánea.
