Como medida para prevenir la falta de capacidad hospitalaria en caso de un aumento en la propagación del coronavirus (COVID-19), la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) empleará las instalaciones del Centro Nacional de Rehabilitación (CENARE), ubicado en La Uruca, para atender a los pacientes confirmados con la enfermedad.
El presidente ejecutivo de la CCSS, Román Macaya, afirmó hoy que la medida se toma por la posibilidad de reprogramar intervenciones en el centro y la vulnerabilidad de los pacientes que allí se atienden.
“Tenemos que aprovechar las instalaciones del CENARE, porque en semana y media pasamos de 1 a 50 casos y no queremos que se saturen los servicios de los hospitales. No queremos que los intensivistas (personal de cuidados intensivos) tengan que tomar decisiones de Dios y por eso tenemos que tomar las medidas de crear más camas y más capacidad hospitalaria”, aseguró Macaya.
El CENARE atenderá casos que requieran hospitalización normal y cuidados intermedios. De momento, la CCSS contempla mover los trabajos de rehabilitación y las cirugías ambulatorias del CENARE al Hospital del trauma del Instituto Nacional de Seguros (INS). Una vez pasada la emergencia, el Centro volverá a funcionar con normalidad.