“Vigilancia excesiva de nosotros. Reuniones todos los días. Por más mano dura, si usted no se pone las pilas, no se puede hacer más porque ustedes no son empleados de nosotros. Aunque nosotros llevemos los controles e insistamos con la empresa, esta es la que no cumplió el contrato en forma y tiempo. Son ellos”.
Apuntando, siempre y únicamente, las culpas de los sucesivos retrasos en obra de la Constructora Vidalco, así reaccionó en agosto pasado el director del Hospital México, Douglas Montero, cuando se le preguntó quién era el responsable del fracaso de la construcción de los cinco quirófanos en el centro médico.
Sin embargo, la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) decidió quitarle la supervisión de la obra y trasladó esta responsabilidad a la Dirección de Arquitectura e Ingeniería de la institución (DAI).
No sin antes haber pagado a Vildalco $2.018.165 por concepto de avances de la obra pese a que la entregó inconclusa.
Tras tomar el mando de la construcción, la DAI contrató a la Constructora Estructuras S.A., empresa que en el pasado construyó los quirófanos del Hospital San Juan de Dios y que también ha trabajado bajo la modalidad de contratación por reintegro de costos y un porcentaje; es decir, se les paga por trabajo ejecutado.
Ahora, esta empresa será la encargada de construir el 30% restante de la obra que intentará disminuir la lista de 8.777 pacientes que esperan por una cirugía en ese hospital.
De acuerdo con el director de Ingeniería y Arquitectura de la CCSS, Jorge Granados, la construcción ahora es supervisada por un equipo de la DAI, que se encarga de verificar avance y presencia de trabajadores.
“Antes no estábamos porque el proyecto no era nuestro, lo estaba desarrollando el hospital. Sin entrar a plantear si lo que se hizo está bien o mal, ahora hay un equipo de profesionales que va a verificar si hay un avance, que se estén haciendo los trabajos que se tienen que hacer y también hay un enlace en el hospital que se encarga de ver que los materiales entren y que los trabajadores estén”, señaló Granados.
Diagnóstico
Luego de realizar un diagnóstico de la obra, la DAI señaló que los sistemas de gases médicos, aire acondicionado y eléctricos de los cinco quirófanos en construcción estaban inconclusos.
“En general, el problema es que no se terminó el proyecto, quedó a medio camino. Ahora hay que llegar a terminarlo. Son muchísimas cosas que hacen falta… Además falta hacer acabados arquitectónicos y algunas obras civiles”, indicó el ingeniero.
Por su parte, la gerente de Infraestructura y Logística, Gabriela Murillo, indicó incluso que hay que rehacer varias obras pues la ejecución técnica no está bien.
El director de la DAI aseguró que la empresa maneja un cronograma de ejecución y que, hasta el momento, se ha cumplido al pie de la letra en tiempo y forma. Sin embargo, la importación de materiales ha perjudicado la construcción.
“Lo que nos está afectando a nosotros más es que hay elementos de importación que no se habían comenzado a importar ni se habían traído”, explicó Granados.
Hace pocos días, Estructuras S.A. presentó también un nuevo cronograma de trabajo, donde reducen el tiempo de importación de materiales de 14 a 8 semanas. La idea, ahora, es traer los materiales vía aérea y no marítima.
UNIVERSIDAD intentó conversar con los representantes de Estructuras S.A. para obtener más detalles sobre el cronograma; no obstante, Edwin Hernández, ingeniero a cargo de la obra, prefirió no dar declaraciones sobre el tema y refirió que todas las informaciones sobre el avance de la construcción las efectúe la DAI de la Caja.
Costo y plazo
El contrato inicial del “Proyecto 5/30” se firmó por un monto de $2.440.433, que incluían la rehabilitación provisional de cinco salas de cirugía, la adecuación de un área de recuperación para 20 encamados y la creación de un área de hospitalización para 30 pacientes.
Sin embargo, a medida que avanzó la obra y se acumularon los incumplimientos, el costo fue aumentando y ahora la construcción –preliminarmente– terminará costando $600 mil más de lo previsto.
De acuerdo con el ingeniero Granados, la DAI estima que el 30% faltante de la obra tendría un costo de $900 mil; no obstante, este monto podría variar y al final ser menor.
Por otra parte, pese a que la obra –según el contrato con la empresa Vidalco– debió ser entregada en diciembre del 2017, la misma ni siquiera será concluida este año debido a los constantes atrasos de entrega por parte de la antigua constructora y los largos tiempos de importación de materiales.
Se prevé que las áreas de quirófanos y recuperación sean entregadas el próximo 22 de febrero del 2019 y el área de hospitalización en mayo.
“El proyecto está dividido en tres áreas que son: quirófanos, recuperación y hospitalización. El hospital tenía que desalojar el área de recuperación para hacer los trabajos; entonces la empresa anterior hizo un trabajo provisional de hospitalización, y la gente de recuperación se pasó a hospitalización. Cuando nosotros terminemos recuperación esa gente tiene que bajar y ese área de arriba hay que terminarla porque los trabajos que se hicieron eran provisionales”, señaló Granados.
Proceso administrativo
A finales de julio, el entonces presidente ejecutivo de la CCSS, Fernando Llorca, anunció que la institución iniciaría el procedimiento de resolución de contrato con la constructora Vidalco, encargada de hacer los quirófanos en el Hospital México.
“Hemos tomado estas medidas excepcionalísimas y extraordinarias ante el grave acúmulo de problemas externos que hemos tenido, ya que nuestra preocupación es la mejor atención que le debemos a los pacientes que llevan mucho tiempo esperando”, explicó Llorca en esa ocasión.
Por su parte, en agosto, el director del Hospital México, Douglas Montero, señaló a UNIVERSIDAD que “lo que corresponde es hacer una investigación administrativa a la empresa, para definir cuál es el monto que le debe a la institución por daños; y además podría ser sancionada para trabajar en el sector público durante algunos años, según el grado de sanción que se demuestre en la investigación”.
Ahora, dos meses después de que se resolviera (rompiera) el contrato, el gerente médico de la Caja, Roberto Cervantes, aseguró que ya se inició el proceso administrativo contra la constructora Vidalco.
Además, indicó que la Gerencia Médica avaló la ejecución de la cláusula de garantía contractual que corresponde a un 10% del monto total; es decir, unos $244 mil.
La gerente de Logística, Gabriela Murillo, se pronunció sobre el tema y aseguró que “probablemente este proceso administrativo terminará en vía judicial”.
UNIVERSIDAD intentó conversar con el representante legal de Vidalco, Eloy Vidal; sin embargo, al cierre de edición no respondió nuestras llamadas ni mensajes de WhatsApp.
Crisis de quirófanos
La crisis de quirófanos en este centro médico inició en el 2014, cuando una serie de fallos eléctricos provocaron que de 14 salas de operación quedaran solo seis funcionando, de las cuales apenas cuatro pueden ser utilizadas para programar cirugías y las otras dos funcionan para el servicio de emergencias.
Tras la difícil situación, la CCSS ha tomado distintas medidas con el objetivo de operar a los pacientes del centro médico que esperan una cirugía; sin embargo, a la fecha ninguna de las decisiones ha solucionado el problema.
Luego del incumplimiento de entrega de los cinco quirófanos, el Hospital México anunció también que alquilaría cuatro salas de operación en hospitales privados, para lo que deberá invertir otros ₡1.500 millones, adicionales a los costos extra de la construcción.
Estos quirófanos deberán estar aprobados por el Ministerio de Salud, tener una adecuada área de recuperación, área de encamados, una unidad de cuidados intensivos y deben estar ubicados en el área metropolitana.
Nueva torre
Aunado a esto, en junio de este año, la Junta Directiva de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) adjudicó la construcción de una nueva torre de quirófanos, que tendría cuatro pisos. Sería adicional a los quirófanos actuales y se construirá en un edificio anexo al Hospital México.
El nuevo edificio, que tendrá 21 quirófanos, una unidad de cuidados intensivos, servicio de obstetricia y atención de partos, estará listo en el 2020.
La obra fue adjudicada también a la constructora Estructuras S.A. y tiene un costo previsto de ₡25.530 millones (unos $43 millones al cambio actual).
