La baja vacunación para sarampión, rubéola y paperas es consecuencia de la falta de políticas en salud pública por parte del Gobierno. Así lo señaló a UNIVERSIDAD el epidemiólogo de la Universidad Nacional (UNA), Juan José Romero.
De acuerdo con Romero, previo a la pandemia, la vacunación contra varias enfermedades del esquema oficial había disminuido “levemente”; sin embargo, durante y después de la crisis sanitaria, esta bajó aún más.
“La inacción es evidente respecto a las vacunas. El hecho de que se haya cuestionado tanto a la Comisión Nacional de Vacunación y Epidemiología y sus decisiones respecto a la vacuna contra el COVID-19, es poner en duda todo el programa de inmunizaciones. Eso mete bulla”, señaló Romero, quien recordó las críticas a esta Comisión por parte del presidente de la República, Rodrigo Chaves y la exministra de Salud, Joselyn Chacón.
Romero agregó también que en medio de la campaña electoral, el mandatario Chaves también tuvo reuniones con grupos antivacunas, quienes en ese momento se oponían a la aplicación de la vacuna contra el COVID-19.
“Se le dio cabida a antivacunas y en el imaginario de la gente la vacuna contra el COVID-19 no debía aplicarse a la población. Luego surge el primer pseudo decreto en el que hay un mensaje en contra de esta vacuna y su obligatoriedad; sin embargo, lo que queda en la gente es la aversión a la inmunización”, añadió.
El pasado lunes por la mañana, autoridades del Ministerio de Salud, la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), el Ministerio de Educación Pública (MEP) y el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) hicieron un llamado a los padres de familia y encargados a vacunar a las personas menores de edad contra sarampión, rubéola y paperas ante la baja vacunación.
Romero considera que este mensaje por parte del Gobierno llega “tarde”; sin embargo, afortunadamente, a la fecha, no se han presentado brotes de estas enfermedades entre la población.
Según datos suministrados por la CCSS, hasta el 22 de abril se habían aplicado en el país 327.800 dosis de esta vacuna; es decir, 235.215 niños aún no habían recibido el biológico.
La provincia que reporta la menor vacunación para estas enfermedades es Heredia con un 49.4%, seguido de Alajuela con un 53.4% y Guanacaste con 55.7%.
El sarampión, la rubéola y las paperas son enfermedades causadas por diferentes virus muy contagiosos y se transmiten fácilmente al toser, estornudar o hablar.
Actualmente, personal de salud está visitando tanto centros educativos públicos como privados como parte de esta jornada de vacunación que inició en el mes de abril y continuará, de ser necesario, hasta junio.
