El proyecto de ley aprobado por los diputados para recortar más de la mitad del dinero público disponible para la campaña presidencial y legislativa del 2022 recibió este miércoles la firma del presidente Carlos Alvarado y solo resta la publicación en el diario oficial La Gaceta para que quede en firme.
Se trata de la ley 9934 que reduce en 36.000 millones el monto conocido como “deuda política”, el aporte estatal máximo para que los partidos políticos hagan su campaña electoral o paguen después los gastos hechos en ella. Eso obedece a que el presupuesto total ya no será de 0,19% del PIB, sino de 0,085% del PIB.
La reforma legal, aprobada en el marco de impulsos a medidas de austeridad estatal, rige también para la campaña del 2024 de autoridades municipales y fue impulsada por la oposición, aunque el ahorro real está por verse, dado que los partidos nunca llegan a consumir el total del disponible de deuda política.
El diputado del Partido Liberación Nacional (PLN), Gustavo Viales, fue el principal impulsor y presenció esta mañana la firma de esa ley, junto al presidente del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), Luis Antonio Sobrado.
Alvarado no desperdició la oportunidad de presentar la ley como un elemento en las medidas de ajuste fiscal, ahora que su gobierno negocia un acuerdo financiero con el Fondo Monetario Internacional (FMI): “Esta firma representa la unión de fuerzas políticas con miras al deseo común de darle al país un respiro a sus finanzas públicas por medio del ahorro. Es una muestra de la gestión interinstitucional que da frutos y que es relevante para el proceso electoral que se avecina”.
La campaña del 2022 ya está a la vista para las agrupaciones políticas, que en meses próximos deben renovar y sus estructuras internas y definir también a sus candidatos presidenciales, en caso de que compitan por ella. Las postulaciones legislativas se confirman poco antes del inicio oficial de la campaña, en octubre de este 2021.
El recorte de las posibilidades de obtener deuda política (siempre sujeta a comprobación de gastos hechos bajo ciertas reglas) se suma a cambios en los últimos años en las formas de financiamiento de las agrupaciones, aunque persisten desigualdades entre los partidos y rechazo a formatos como las “franjas electorales” para publicidad en medios de comunicación.
El mandatario reconoció que esta nueva circunstancia de la campaña electoral se suma a la posibilidad de realizar asambleas de manera virtual y con calendarios ajustados por los trastornos provocados por la pandemia. Además, mencionó como factores novedosos la polarización que ya se mostró en los comicios de 2018 y los nuevos canales de desinformación.
“Es una coyuntura difícil” dijo Viales en alusión a las condiciones impuestas por la pandemia y la situación económica, que puede repercutir en las contribuciones privadas a los partidos como se afectó ya el aporte estatal. “Nunca antes se había tenido una reducción tan significativa en el aporte estatal a las agrupaciones políticas”, dijo el diputado, que señaló que el recorte podría servir para compensar la reducción que se aprobó recientemente al presupuesto institucional del TSE o del Ministerio de Seguridad.
